Luz Larenn - Á(r)mame

Здесь есть возможность читать онлайн «Luz Larenn - Á(r)mame» — ознакомительный отрывок электронной книги совершенно бесплатно, а после прочтения отрывка купить полную версию. В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: unrecognised, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Á(r)mame: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Á(r)mame»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Dos mujeres; dos tiempos; un mismo crimen Sin familia ni amigos y con licencia por estrés; la psicóloga Audrey Jordan se desliza lenta pero segura a la depresión. Hasta que un día; cuando menos se lo espera; un mensaje anónimo y el asesinato de una joven extrañamente parecida a ella le dan la posibilidad de asumir una nueva identidad. ¿Es posible reinventarnos? ¿Puede un giro del destino borrar nuestras acciones y elecciones; y las de nuestros padres? ¿O siempre habrá algo oscuro y persistente que nos persiga? Un thriller que no puede dejar de leerse y mantiene al lector en vilo; narrado con ritmo muy ágil y diálogos inteligentes. Una novela que sostiene el suspenso y la intriga; que se cruzan con conflictos personales que acechan desde el pasado; hasta un final sorprendente.

Á(r)mame — читать онлайн ознакомительный отрывок

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Á(r)mame», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Esos zapatos. No podía evitar sentirme identificada. Nuestro parecido físico era innegable y si bien yo era algunos años mayor que ella, tranquilamente podría haber sido una víctima de aquel enfermo. El perfil arrojaba que había sido asesinada por un hombre.

La autopsia preliminar reveló que la joven había muerto por asfixia. No había signos de marcas en la zona de su cuello, así que fueron detrás de la hipótesis de que quizá la habían arrojado allí, moribunda y se había terminado por ahogar. La zona del parque donde la habían hallado se encontraba en remodelación, aprovechando la primavera y la temporada de lluvias, así que se habían plantado nuevos panes de pasto y, por dicho motivo, el suelo se encontraba alterado.

De caer boca abajo, sin fuerzas o incluso desmayada, podría haber aspirado pequeñas partículas de polvo que bloquearan sus vías respiratorias. Pude sentir en mi cuerpo la parálisis, la desesperación de no poder respirar y la imposibilidad de hacer algo para salir de allí. ¿Y si el asesino de Juliet no se había dado cuenta de que aún estaba viva? ¿Qué habría sucedido de haberla encontrado alguien? Los otros daños no habían sido fatales: de no haber sido por la asfixia, no estaría muerta. ¿Y si después de todo había logrado escapar de las manos de aquel animal?

Eran demasiadas las preguntas que probablemente no tendrían respuestas concretas más que en las hipótesis construidas por los forenses. De no encontrar a un responsable que confesara haberla atacado, su muerte quedaría archivada como un caso inconcluso.

Me desesperaba pensar en el hecho de que esa chica tuviera familia, una madre, un padre –esperaba que mejor que el mío–, incluso hermanos, que quedarían todos sin la posibilidad de un cierre.

No tenía opción. A esa altura me encontraba demasiado involucrada como para salirme. Para la estación del Central Park yo era la doctora Morgan y si eso los hacía felices o ayudaba en algo que contribuyera a resolver el crimen de la joven Atwood, bienvenido. A mí definitivamente me servía.

Me levanté resignada. Encendí el televisor y aunque mi cuerpo se encontraba cansado, la sobrecarga de energía me movía por inercia. Hacía largos meses que no me sucedía, así que no iba a desperdiciarla. A la mañana siguiente me esperaría Hardy con su equipo en la estación para trabajar en el caso y aun así no me importaba ir sin dormir.

Lo había llamado aquella misma tarde para confirmarle mi participación, luego de comerme las pocas uñas semicrecidas, intentando mantenerme ocupada hasta las cinco para sembrar algo de inquietud. Así que durante esas horas aproveché a ponerme al día con los chismes de la farándula que seguían llegando por la suscripción de mamá, y unos cuantos tés más tarde para cuando el reloj marcó las cinco y dos minutos, busqué a Hardy en la lista de contactos de mi teléfono y le notifiqué las buenas nuevas; al menos buenas para mí, no para Juliet Atwood, desde luego.

Dejé la vista fija en aquel programa de preguntas y respuestas y me perdí pensando en la forma en que mi vida acababa de cambiar por completo. De la noche a la mañana me había convertido en parte de una investigación de homicidio. Un caso que ponía en jaque a la seguridad de la que gozábamos últimamente los residentes de la isla, al menos hasta la 112 y el parque. Quise llamar a Leanne para contarle, pero era demasiado tarde para una familia con niños. Además, Leanne habría creído que me había terminado de volver loca. Mejor así, mejor mantenerlo en secreto, si de todas maneras ya casi no quedaban personas que conocieran a Audrey Jordan.

A las tres de la mañana los programas eran tediosos. Estaba a punto de darme por vencida cuando apareció Don Hardy, filmado aquella mañana en la escena del crimen dando una nota. Me vi de pie, detrás de él, inservible como pocas.

Hardy, por otro lado, lucía como un actor de Hollywood, aunque las cámaras no lo beneficiaran por completo, al hacer una vez más que sus ojos parecieran grises. Una real pena para el televidente.

Mientras relataba lo ocurrido y los pasos a seguir para encontrar al responsable, apelaba sin cesar a su equipo –y yo era parte de él–. Me sentí dichosa y eso era algo que pocas veces en mi vida había experimentado. Claro que segundos después bajé a tierra y me di cuenta de que estaba actuando de manera absolutamente neurótica. Morgan era parte de su equipo, no Jordan. Apagué la televisión y en algún momento me habré dormido.

El despertador sonó junto con la sensación de que esa noche acababa de transcurrir en un abrir y cerrar de ojos; aplacada la adrenalina, el cansancio tomaba protagonismo. De todas formas, mi entusiasmo seguía intacto. Últimamente la sensación matutina por excelencia había sido querer caer en un agujero negro. Sonreí al recordar una discusión una noche de copas entre colegas y otros profesionales, en la que una psiquiatra defendía a rajatabla el uso de fármacos para salir de estados polares de emocionalidad, deberían prescribir un Don Hardy por la mañana y uno por la noche. Salté de la cama y corrí al baño para prepararme, tenía un gran día por delante.

Para cuando llegué a la estación el reloj marcaba las nueve menos cuarto. Vestía una pollera negra con una camisola azul. Solía ser una persona puntual, pero aquella mañana en particular me sentía la alumna modelo en su primer día de clases.

Ni siquiera me había detenido a pensar en la mentira, en el hecho de que acababa de tomar “prestada” una identidad. De una forma u otra, lo que realmente importaba eran los aportes que pudiese realizar y respecto de eso me sentía segura, además Hardy me había dejado claro que se hallaba satisfecho con mi presencia.

La burbuja explotó bajándome con una honda cuando solicitaron mi identificación para ingresar al establecimiento policial.

–Disculpe, la he olvidado, pero el jefe Hardy le dirá quién soy, verá, ayer comencé a trabajar con ellos. Estuve aquí.

–Lo siento mucho, señorita, pero a este lugar no se ingresa sin identificación, más aún desde septiembre de 2001. Si es norteamericana lo entenderá –tenía razón, aunque me resultara odioso, tenía toda la razón. Si por mucho menos nos registraban de pies a cabeza.

La última vez que Leanne había venido a visitarme, la había llevado de paseo a la Estatua de la Libertad y para embarcarnos tuvimos que pasar por un procedimiento del mismo tipo que en un aeropuerto, sin zapatos ni objetos de metal que pudieran sonar, y luego vuelta y vuelta por aquella máquina que parecía que en cualquier momento abduciría a alguien y lo trasladaría al año 1985.

Giré al mismo tiempo que mordía mi mejilla interna, “¿y ahora qué?”, pensé, pero de pronto, vi venir a Don Hardy hacia mí.

–¿Se ha puesto cómoda, doctora? –bromeó.

–Olvidé mi identificación –chasqueé mi lengua. Últimamente me había convertido en una maestra de la mentira. Esto no me enorgullecía en particular, pero me daba la pauta de que era potencialmente buena en más cosas de las que creía.

–Robbins, déjela pasar, está con nosotros, mañana la traerá, ¿no es así, doc?

Asentí con la cabeza. Mañana. Para mañana debía conseguir una identificación falsa si quería seguir formando parte de esta obra de teatro personalizada que acababa de montar, que venía dirigiendo y hasta protagonizando.

Colgada de ese pensamiento trastabillé sobre la escalinata del hall, delante de un puñado de oficiales y algunas mujeres de mediana edad, cuyos semblantes apagados las hacían lucir como las típicas secretarias del Estado. Me miraron con menosprecio. Hardy no se percató de mi pequeño contratiempo, ya que siguió caminando delante de mí con la mirada en alto.

Todos se detuvieron a observarme y, acto seguido, se volvieron en pequeños grupos a hablar en voz baja, menudo déjà vu del bachillerato.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Á(r)mame»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Á(r)mame» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «Á(r)mame»

Обсуждение, отзывы о книге «Á(r)mame» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x