José Antonio Bustamante - El desafío crucial

Здесь есть возможность читать онлайн «José Antonio Bustamante - El desafío crucial» — ознакомительный отрывок электронной книги совершенно бесплатно, а после прочтения отрывка купить полную версию. В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: unrecognised, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

El desafío crucial: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «El desafío crucial»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

En un entorno de trabajo amenazado por la automatización y por los grandes avances tecnológicos que ocurrirán en los próximos años, el más seguro de los caminos para mantener la empleabilidad será desplegar comportamientos creativos e innovadores, ya sea como aporte de valor individual o de equipo en las organizaciones. Éste es el desafío crucial que se aborda en el presente libro, proponiendo un modelo de aplicación amplia: C-Nova, conocimiento nuevo, el cual define cuatro tipos de estrategias y técnicas de pensamiento que serán esenciales en los próximos años para estudiantes y profesionales de diferentes áreas, para los equipos y las organizaciones en forma global.

El desafío crucial — читать онлайн ознакомительный отрывок

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «El desafío crucial», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Si bien era altamente beneficiosa para las tribus que lograron controlar el fuego en vasijas o canastos, esta técnica tenía grandes limitaciones para su conservación: se apagaba fácilmente con el viento y debían acudir nuevamente a las fuentes originales: volcanes, incendios espontáneos que podían quedar muy lejos de su refugio, por lo que otros grandes peligros, animales y enemigos, los hacían altamente vulnerables durante la travesía, sin considerar que su ventaja de poseer el conocimiento ya pudo haber sido alcanzada por alguien más, perdiéndose el “monopolio temporal” que otorgaba el ser los únicos que lo dominaban. El siguiente paso surge ya no de controlar el fuego, sino de ser capaz de generarlo cuando se requiriera, lo que se logró inicialmente, como es ampliamente sabido, por la generación de calor al frotar piedras o metales hasta alcanzar una temperatura que enciende arbustos, ramas o pasto seco. El salto cualitativo en el control del fuego que esta técnica permite, al fabricarlo “de la nada”, es posible que haya provocado asombro e incredulidad entre nuestro antepasados que observaban el proceso por primera vez y de paso facilitó la fama a aquellos integrantes del clan que tenían el conocimiento para hacerlo. Probablemente la popularidad de estos miembros del clan les dio acceso a privilegios, les otorgó posiciones de poder y aumentó su atractivo reproductivo.

Otro acontecimiento muy relevante para dimensionar lo que significa el poder del conocimiento y cómo éste va creciendo y diversificándose a partir de descubrimientos, a veces casuales, es lo que ocurrió hace 26 millones de años. Algo pasó sobre las arenas del desierto del Líbano. No se sabe qué fue exactamente lo que ocurrió, pero sí se sabe que hubo mucho calor, al menos 1 000 grados de temperatura. Como el agua, el dióxido de silicio, es decir la arena, forma cristales en estado sólido y cuando sube la temperatura cambia a un estado líquido, pero la arena necesita para ello mucho más calor que el agua, sobre 500 grados y, a diferencia de ésta, si se vuelve a enfriar no puede volver a reordenarse en forma de cristales. La nueva forma que permanece es algo intermedio entre sólido y líquido, una sustancia que el ser humano ha observado desde los inicios de la civilización: el vidrio. Así se inició el largo y variado uso de este material, probablemente a partir de alguien que caminó sobre esos terrenos y pudo observar las especiales propiedades de los objetos que tenía frente a sus ojos. El vidrio hizo la transición desde ornamentos a alta tecnología durante el apogeo del Imperio Romano, cuando artesanos fueron encontrando la forma de hacerlo cada vez más transparente y se fabricaron las primeras ventanas, hasta lograr lo que son hoy en los grandes rascacielos completamente vidriados.

A través de los ejemplos del dominio del fuego o el uso del vidrio, ocurridos en los albores de la civilización, hemos ido mostrando la espiral de conocimiento que se forma como una fuerza incontrarrestable a través de los siglos y épocas marcadas por puntos de inflexión significativos, como el Renacimiento y en especial la segunda mitad del siglo XX, testigo de avances teóricos científicos y tecnológicos muy decidores para lo que está ocurriendo hoy en día. El matemático Claude Shannon en 1948, con la publicación de su Teoría de la información, define las bases de toda la compu­tación moderna a partir de sólo tres operaciones fundamentales que permiten la programación digital. En 1953 James Watson y Francis Crick logran descifrar el código genético, presente en todos los seres vivos, basado en sólo cuatro pares de aminoácidos que constituyen los pilares de un lenguaje de programación biológica. Hoy en día estamos observando la convergencia de ambos tipos programación, esencialmente manifestados en lo que se denomina inteligencia artificial, no siendo raro escuchar hablar de algoritmos evolutivos y computación genética. Se agrega a lo anterior la masificación de internet y todo lo que ello implica en el ámbito de la información, las redes sociales, el aprendizaje y el comercio, además del alto desarrollo y también masificación de la tecnología móvil en teléfonos celulares inteligentes, tablets, computadoras personales y la aplicación de estas tecnologías en artefactos domésticos a través de la denominada “internet de las cosas”. Como si fuera poco, en paralelo ocurre la automatización digital y robotización de plantas industriales, vehículos, máquinas, camiones y una gran variedad de equipos de uso productivo o recreativo como los lentes de realidad virtual, impresoras 3D y mucho más. Ya es posible leer artículos o libros donde se menciona que las emociones serían “algoritmos bioquímicos” o donde se pregunta sobre cuáles serían las etapas para “crear una mente”.

El avance tecnológico descrito anteriormente contribuye a entender por qué hoy se dice con frecuencia que vivimos en la “era del conocimiento”, sin embargo ya vimos cómo a partir del uso y control del fuego hace miles de años este activo intangible ha jugado un rol clave. No obstante lo anterior, en la actualidad su relevancia es cada vez mayor para la creación de valor. Algunos de los más importantes gurús de la administración de la última década del siglo pasado, ya avizoraban este panorama. Peter Drucker, autor de numerosos libros de administración considerados clásicos, fue uno de los primeros expertos en hablar de este hecho singular. Para este profesor de la Universidad de Harvard, la sociedad actual se distingue de las anteriores porque en ella el conocimiento desempeña un papel esencial. No sólo es otro recurso además de los tradicionales factores de producción (tierra, trabajo y capital), sino el único que se ha vuelto “el” recurso en vez de ser sólo “un” recurso y que hace que la nueva sociedad sea única en su clase. Alvin Toffler, otro famoso autor, especialista en temas del futuro, coincide con Drucker al afirmar que el conocimiento es el recurso de más alta calidad. Su opinión es que este factor dejó de ser un elemento más del poder, como el dinero, la fuerza muscular que caracterizaron épocas anteriores, para convertirse en su esencia y sustituto de los otros recursos. Así las capacidades de una empresa moderna se basarán más en sus capacidades intelectuales y de servicio, que en sus activos, como tierra, plantas y equipos. El valor de la mayoría de los productos y de los servicios depende ahora de la forma en la que se desarrollan los elementos intangibles, como el know-how tecnológico, el diseño, el marketing, el nivel de comprensión de las necesidades del cliente, la creatividad personal y la innovación. Los autores citados también coinciden en que el futuro pertenecerá a las personas que posean este conocimiento, que han conseguido poniendo en juego un conjunto nuevo de habilidades no sólo técnicas, sino de pensamiento, de aprendizaje y una forma diferente de hacer las cosas.

El gran avance del poder del conocimiento comienza en la mitad del siglo XVIII, momento en que se marca la transición desde el uso de la energía muscular a la mecánica, para llegar a lo que estamos conociendo hoy, en que el protagonismo lo tendrá el poder cognitivo artificial que aumenta la producción humana en una manera muy diferente. La Primera Revolución Industrial fue desencadenada por la construcción del ferrocarril y la invención del motor de vapor, luego la segunda fue posible por la producción en masa, fuertemente impulsada por el uso de la electricidad y la cadena de montaje. La Tercera Revolución Industrial se inició en la década de 1960 y dio comienzo al uso creciente de la computación hasta alcanzar el gran desarrollo de las computadoras personales e internet y la creación de inteligencia artificial para reemplazar al hombre en tareas que hasta hace poco era imposible de pensar que podían ser asumidas por otros entes que no fueran con las competencias, talentos o sensibilidad exclusivas de “seres racionales”, marcando el inicio de la Cuarta Revolución Industrial, de acuerdo con el nombre acuñado por Klaus Schwab, presidente del Foro Económico Mundial del año 2015. Allí se definió que esta nueva era industrial implica la “fusión de tecnologías que está desdibujando las líneas entre las esferas físicas, digitales y biológicas”, y predijo que esta revolución haría desaparecer 7.1 millones de puestos de trabajo y creará dos millones de trabajos en los próximos cinco años. Mediante la creación de “fábricas inteligentes”, la cuarta revolución industrial genera un mundo en el que sistemas de fabricación virtuales y físicos cooperan entre sí de una manera flexible en todo el planeta. Esto permite la absoluta personalización de los productos y la creación de nuevos modelos de operación. Al mismo tiempo, se producen oleadas de más avances en ámbitos que van desde la secuenciación genética hasta la nanotecnología, y de las energías renovables a la computación cuántica.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «El desafío crucial»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «El desafío crucial» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


José Antonio Pejovés Macedo - El Tribunal del Consulado de Lima
José Antonio Pejovés Macedo
José Antonio Gurpegui Palacios - Hemingway and Existentialism
José Antonio Gurpegui Palacios
José Antonio Vásquez Angulo - Análisis y diseño de piezas con Catia V5
José Antonio Vásquez Angulo
José Antonio Pagola Elorza - Jesús, Maestro interior 7
José Antonio Pagola Elorza
José Antonio Baigorri Goñi - La filosofía contada por sus protagonistas
José Antonio Baigorri Goñi
José Antonio Otegui - El gorrión en el nido
José Antonio Otegui
José Antonio Berenguer Berenguer - Redes sociales y marketing 2. COMM092PO
José Antonio Berenguer Berenguer
José Antonio Castillo Romero - Big data. IFCT128PO
José Antonio Castillo Romero
José Antonio Dávila - Iniciativa empresarial
José Antonio Dávila
Отзывы о книге «El desafío crucial»

Обсуждение, отзывы о книге «El desafío crucial» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x