Tú eres El Shaddai, el Dios del más que suficiente. Las riquezas y los bienes están en mi casa porque te temo y me deleito en tus mandamientos.
Oh, Señor, que la bendición del Señor sobre mi vida me haga rico.
Yo decreto y declaro que, soy bendecido entrando y bendecido saliendo.
Declaro hoy que soy siervo de Dios, y Él se complace en mi prosperidad, y prosperaré en el nombre de Jesucristo.
Oh Señor Jesús, yo declaro que, te hiciste pobre, para que a través de tu pobreza yo pudiera ser rico
Oh Señor, declaro que medito en la Palabra día y noche, y todo lo que hago prospera
Día 2:
Puntos de oración para la confesión
Las Escrituras: Salmo 122:7, Esdras 6:14, 2 Crónicas 20:20, Nehemías 1:11, Nehemías 2:20
Que la paz esté dentro de mis muros y la prosperidad dentro de mi palacio
Prosperaré a través de los profetas y el ministerio profético.
Creo en los profetas, y prosperaré
Soy tu siervo, Señor. Prospérame
El Dios del cielo me prosperará
Vivo en la prosperidad del Rey (Jeremías 23:5).
A través de Tu favor seré una persona próspera (Génesis 39:2).
Oh Señor, me has llamado y harás que mi camino sea próspero (Isaías 48:15).
Rezo en secreto, y Tú me recompensas abiertamente (Mateo 6:6).
Ayuno en secreto, y Tú me recompensas abiertamente (Mateo 6:18).
Me recompensas porque te busco diligentemente (Hebreos 11:6).
Señor, libera las riquezas de los malvados en mis manos (Proverbios 13:22).
Señor, llévame a un lugar rico (Salmo 66:12).
Yo doy, y me es dada buena medida, apretada, sacudida y rebosante (Lucas 6:38).
Abre las puertas del cielo sobre mi vida, y recibiré más de lo que tengo suficiente para recibir (Malaquías 3:10).
Que cada agujero de mi bolsa se cierre en el nombre de Jesús (Hageo 1:6).
Reprende al devorador por mí (Malaquías 3:11).
Día 3:
Puntos de oración de la confesión
Las Escrituras: Malaquías 3:12
Todas las naciones me llamarán bendito, y seré una tierra encantadora
Mis puertas están abiertas continuamente para que las fuerzas (riqueza) de las naciones puedan entrar en mi vida (Isaías 60:11).
Estoy aliado con las piedras del campo (Job 5:23).
Que tus lluvias de bendición vengan a mi vida (Ezequiel 34:26).
Deja que mis tinas se desborden (Joel 2:24).
Que mis graneros se llenen con abundancia y mis prensas rebosen de vino nuevo (Proverbios 3:10).
Ordena tu bendición sobre mi almacén (Deuteronomio 28:8).
Que mis graneros estén llenos y rebosantes. Que mis ovejas produzcan miles y diez miles. Que mis bueyes sean fuertes para trabajar (Salmo 144:13-14).
El arador supera al segador en mi vida, y el comerciante de uvas al cosechador de la semilla, y yo vivo en continua cosecha (Amós 9:13).
Que mi suelo se llene de trigo y mis tinas se llenen de vino y aceite (Joel 2:24).
Haced conmigo lo que queráis, y dejadme comer y quedar satisfecho (Joel 2:26).
Haz la paz dentro de mi frontera, y lléname con el mejor trigo (Salmo 147:14).
Día 4:
Puntos de oración para la confesión
Escritura: Deuteronomio 8:9
Déjenme estar lleno de miel y del mejor trigo (Salmo 81:16).
Llévame a la tierra llena de leche y miel (Éxodo 3:8).
Llévame a una buena tierra sin escasez y carencia
Haced que abunde en mí toda gracia, para que tenga en todas las cosas lo suficiente y abunde en toda buena obra (2 Corintios 9:8).
Ungan mi cabeza con aceite, y que mi copa se llene de aceite (Salmos 23:5).
Que tenga riquezas y honor en abundancia (2 Crónicas 18:1).
Que la roca me derrame ríos de aceite (Job 29:6).
Que sumerja mis pies en aceite (Deuteronomio 33:24).
Déjame ver tus montones en mi vida (2 Crónicas 31:8).
Amo la sabiduría, heredo la sustancia y mis tesoros se llenan (Proverbios 8:21).
Recibo riquezas y honor, riquezas duraderas y justicia (Proverbios 8:18).
Saca la miel de la roca para mí (Salmo 81:16).
Déjame comer el mejor de los trigos (Salmo 147:14).
Que mis dientes se blanqueen con leche (Génesis 49:12).
Lava mis pasos con mantequilla (Job 29:6).
Déjame guardar oro como polvo (Job 22:24).
Déjame tener mucha plata (Job 28:1).
Deja que tu río me lleve al oro (Génesis 2:11-12).
Déjame heredar la tierra (Salmo 37:29).
Me niego a permitir que el ángel de la bendición se vaya sin bendecirme Génesis 2:6).
Oraciones positivas para bendiciones financieras
Rezo por la sabiduría para las finanzas.
Bendito seas, Señor, que diariamente nos cargas con beneficios, incluso el Dios de nuestra salvación. Salmos 68:19
Dios, Tú deseas sobre todas las cosas que prosperemos y tengamos salud, así como prospera nuestra alma. Con Tu ayuda, estoy prosperando. Tengo salud. Mi alma está prosperando.
3 Juan 1:2
Toda la tierra es tuya, Señor. Todo lo que soy y todo lo que tengo es tuyo. Ayúdame a ser un buen administrador de todo lo que me has confiado. Salmos 24:1.
Señor, gracias por multiplicar todos mis recursos. Estoy aumentando. Tus bendiciones son siempre más que suficientes. Salmos 115:14
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