Jane Goodall - El libro de la esperanza

Здесь есть возможность читать онлайн «Jane Goodall - El libro de la esperanza» — ознакомительный отрывок электронной книги совершенно бесплатно, а после прочтения отрывка купить полную версию. В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: unrecognised, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

El libro de la esperanza: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «El libro de la esperanza»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Es inútil negarlo: vivimos en una era realmente difícil. Una pandemia global, una crisis climática que no deja de empeorar, conflictos armados, desigualdad económica creciente… Ciertamente, sentir esperanza cuando el mundo tiene retos tan complejos puede parecer una proposición difícil, ingenua, incluso utópica. Pero sin duda es necesarísima para hallar nuevos caminos propicios para la humanidad y el resto de los habitantes del planeta.Mediante un animado diálogo, la célebre naturalista Jane Goodall y el escritor Douglas Abrams plantean en este oportuno volumen que tenemos aún varias razones para entrar en acción por nuestro futuro si confiamos en nuestra capacidad intelectual, la resiliencia del mundo natural, el poder de los jóvenes y el indomable espíritu humano.La esperanza, afirma Jane Goodall, es contagiosa y se sostiene en la convicción de que nuestras acciones tendrán resultados positivos. Sí: todavía hay esperanza, y este libro nos ayudará a encontrarla.«Un mensaje poderoso sobre proteger los derechos de todos los seres vivos, dar esperanza a las generaciones futuras y hacer un llamado urgente para combatir el cambio climático.»
Leonardo DiCaprio

El libro de la esperanza — читать онлайн ознакомительный отрывок

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «El libro de la esperanza», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

—Hubo muchos momentos de decepción y de desesperanza —explicó Jane—. Todos los días me levantaba antes del amanecer y trepaba las empinadas colinas de Gombe en busca de chimpancés; de vez en cuando avistaba alguno por mis binoculares. Me arrastraba y gateaba por el bosque, exhausta, con las piernas y los brazos arañados por los arbustos, hasta que finalmente llegaba hasta un grupo de chimpancés. El corazón me daba un vuelco, pero antes de que pudiera observar cualquier cosa, me dirigían una rápida mirada y escapaban en el acto.

”El dinero de mi investigación sólo alcanzaría para seis meses y los chimpancés huían de mí. Las semanas se convirtieron en meses. Tenía claro que a la larga me ganaría la confianza de los chimpancés. Pero ¿tenía tiempo? Sabía que si las cosas no salían bien, decepcionaría a Leakey, que había depositado tanta confianza en mí, y el sueño llegaría a su fin. Pero lo peor —continuó Jane— era que jamás podría entender a estas fascinantes criaturas o lo que pueden decirnos sobre la evolución humana, que es lo que Leakey esperaba comprender mejor.

Jane no era una científica consolidada. Ni siquiera tenía un título universitario. Leakey quería a alguien que estuviera libre de prejuicios académicos y nociones preconcebidas. Tal vez los importantes descubrimientos de Jane, en especial aquellos sobre las emociones y las personalidades de los animales, no habrían sido posibles si la hubieran predispuesto a negar que los animales las poseían, como era normal en las universidades por entonces.

Por suerte para Jane, Leakey creía que las mujeres podían ser mejores investigadoras de campo, más pacientes y empáticas hacia los animales que estudiaban. Tras mandar a Jane al bosque, Leakey ayudó a otras dos jóvenes a cumplir sus sueños: consiguió financiamiento para que Dian Fossey estudiara gorilas de montaña y Biruté Galdikas, orangutanes. Las tres terminarían por ser conocidas como “las Trimates”.

—Cuando vi el terreno agreste y montañoso del parque —recordó Jane—, me pregunté cómo diablos iba a encontrar a esos esquivos chimpancés. Y no fue fácil. Mi mamá desempeñó un papel muy importante. Yo volvía al campamento deprimida porque los chimpancés habían vuelto a huir de mí, pero ella me decía que había aprendido más de lo que pensaba. Había descubierto un pico en el que podía sentarme y dominar dos valles con la mirada. Y a través de mis binoculares, los había visto construir nidos para dormir en los árboles y viajar en grupos de diferentes tamaños. Descubrí qué comían y sus diferentes llamados.

Instalé una cámara en un árbol y me tomé una foto con temporizador buscando - фото 10

Instalé una cámara en un árbol y me tomé una foto con temporizador buscando señales de los chimpancés (Instituto Jane Goodall / Jane Goodall).

Pero Jane sabía que ésta no era suficiente información para que Leakey consiguiera más dinero al llegar el fin de su subvención para seis meses.

—Le escribí muchas cartas a Leakey —recuerda Jane— cuando los chimpancés huían de mí: “Depositaste toda tu fe en mí y no puedo hacerlo”. Y él me respondía “Yo sé que tú puedes”.

—El apoyo de Leakey debe haber sido muy importante para ti.

—De hecho, empeoraba las cosas —insistió Jane—. Cada vez que me decía “Yo sé que puedes hacerlo”, yo pensaba: “Pero si no, le habré fallado”. Esto era lo que más me preocupaba. Él puso el cuello para obtener dinero para esta jovencita desconocida. ¿Cómo se sentiría si lo defraudaba?

Le escribió una y otra vez, desesperada:

—No está funcionando, Louis —le decía—. Y a vuelta de correo, él respondía: “Yo que puedes hacerlo”. Y en su siguiente carta la palabra “SÉ” era más grande y estaba subrayada. Y yo me sentía cada vez más desesperada.

—Debió haber algo en esa confianza hacia ti que también te impulsaba a volver a salir —sugerí.

—Sí, probablemente me alentó a trabajar aún más duro, aunque no sé cómo podría haber trabajado más, porque cada día salía a las cinco y media de la mañana a arrastrarme por el bosque o a observar desde mi cumbre hasta que casi oscurecía.

Esos primeros días suenan peligrosos, llenos de desafíos y obstáculos. Pero al parecer Jane no se inmutaba. Me contó que una vez se sentó en el suelo y observó a una serpiente venenosa deslizarse sobre sus piernas. Y que sentía que ningún animal iba a lastimarla, como si estuviera “destinada” a estar ahí. Creía que los animales de algún modo sabían que ella no pretendía dañarlos. Leakey fomentó esta certeza, y hasta ahora ningún animal le ha hecho daño.

Ahora bien, por más importante que fuera esta certidumbre, lo cierto es que Jane también sabía cómo conducirse cerca de animales salvajes. Sabía, en particular, que lo más peligroso es interponerse entre una madre y su cría, o confrontar a un animal herido o alguno que hubiera aprendido a odiar a los humanos.

—Leakey aprobó mi reacción en Olduvai una tarde en la que, tras un día de trabajo duro bajo el sol ardiente, Gillian y yo regresábamos al campamento y sentí algo a mis espaldas: un joven león curioso —cuenta Jane—. Tenía el tamaño de un adulto, pero su melena apenas comenzaba a crecer. Ella le dijo a Gillian que debían alejarse lentamente y subir por la ladera de la garganta hasta llegar a la planicie elevada.

”Louis dijo que fue una suerte que no hubiéramos corrido, porque el león podría habernos perseguido. También aprobó mi reacción cuando nos encontramos a un rinoceronte negro macho. Dije que debíamos quedarnos absolutamente quietas, pues los rinocerontes no tienen buena vista, y por suerte pude sentir cómo el viento soplaba hacia nosotras y supe que llevaría nuestro olor lejos de él. El rinoceronte sabía que pasaba algo extraño y corrió de un lado a otro con la cola en el aire, pero finalmente se alejó trotando. Creo que estas reacciones (y mi afición por desenterrar fósiles ocho horas al día) deben ser la razón por la que Leakey me ofreció la oportunidad de estudiar a los chimpancés.

Jane perseveró en Gombe, y poco a poco se ganó la confianza de los chimpancés. Conforme los iba conociendo, les puso nombres, del mismo modo que bautizó a todos los animales que ha tenido u observado. Más tarde le dijeron que era más “científico” identificarlos con números. Pero Jane, que nunca fue a la universidad, no lo sabía; de hecho, me confió que, de haber ido, está segura de que les habría puesto nombres de todos modos.

—David Barbagris, un chimpancé muy apuesto con un elegante mechón de pelo blanco en el mentón, fue el primero que confió en mí —contó Jane—. Era muy tranquilo, y creo que su aceptación poco a poco persuadió a los otros de que no era tan peligrosa después de todo.

David Barbagris fue al primero que Jane observó usar tallos de plantas como herramienta para sacar termitas de un termitero (sus nidos de tierra). Luego lo vio quitarle las hojas a una ramita para adaptarla para el mismo propósito. Por entonces la ciencia occidental pensaba que sólo los humanos éramos capaces de fabricar herramientas, y que ésta era una de las principales características que nos distinguían del resto de los animales. Nos definíamos como “el hombre, el fabricante de herramientas”.

Cuando se reportaron las observaciones de Jane, esta amenaza a la singularidad humana causó sensación. El famoso telegrama de Leakey a Jane decía: “¡Ah! ¡Ahora debemos redefinir al hombre, redefinir las herramientas o aceptar a los chimpancés como humanos!”. David Barbagris con el tiempo fue proclamado por la revista Times como uno de los quince animales más influyentes de la historia.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «El libro de la esperanza»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «El libro de la esperanza» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «El libro de la esperanza»

Обсуждение, отзывы о книге «El libro de la esperanza» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x