Charles Harness - Los Hombres paradójicos

Здесь есть возможность читать онлайн «Charles Harness - Los Hombres paradójicos» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: Фантастика и фэнтези, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Los Hombres paradójicos: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Los Hombres paradójicos»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

En un lejano futuro una minoría aristocrática, totalitaria y belicista domina los Estados Unidos de América, explotando el trabajo de hombres y mujeres que han preferido vivir como esclavos antes que morir en la pobreza. Las paradojas de Einstein y las concepciones históricas de Toynbee animan este libro singular, un clásico eminente de la ciencia-ficción contemporánea.
La novela Los Hombres Paradójicos puede ser considerada como el clímax del banquete de un billón de años.Entreteje el espacio y el tiempo con altura, amplitud y belleza; zumba dando vueltas por el sistema solar como una avispa enloquecida; es ingeniosa, profunda y trivial, todo a la vez, y ha demostrado tener una inventiva que muchas hordas de presuntos imitadores han tratado de alcanzar en vano.

Los Hombres paradójicos — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Los Hombres paradójicos», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

– No los subestimes -susurró la mujer, mientras lo llevaba de la mano por el pasadizo oscuro-. Interrogarán al guardia que vigilaba el otro extremo del corredor y vendrán todos hacia aquí. En menos de un minuto hallarán el panel. Pronto estuvieron en un callejón mal iluminado, al nivel de la calle.

– ¿Y ahora? -preguntó Alar, jadeando. -Allá está mi automóvil.

– ¿Y bien?

Keiris se detuvo y lo miró con expresión muy seria.

– Estás libre por el momento, amigo mío, pero ya comprenderás que pueden atraparte en cuestión de horas. La Policía Imperial te está buscando minuciosamente por toda la ciudad, manzana por manzana, casa por casa, cuarto por cuarto. Todas las rutas están cerradas. No se permite la salida de aviones, a menos que sean de la policía. Y también los Ladrones te están buscando. Aunque sus métodos no sean tan exhaustivos, no por eso son menos eficaces. Si tratas de huir sin un buen plan o sin ayuda tus compañeros no tardarán en recapturarte.

– Voy contigo -replicó él, brevemente.

La tomó del brazo y ambos se dirigieron en silencio hasta el automóvil. En cuanto los motores de propulsión atómica tomaron velocidad la calle oscura empezó a deslizarse rápidamente junto a ellos. -

– En el botiquín de primeros auxilios encontrarás antibióticos y astringentes -dijo la mujer-. Tendrás que vendarte solo. Por favor, hazlo pronto.

El se arrancó la chaqueta, la camisa y la ropa interior; sus dedos estaban resbaladizos por la sangre. El polvo antibiótico ardía; el astringente le llenó los ojos de lágrimas. Por último cubrió la herida con gasa adhesiva.

– A tu lado hay un bulto con ropas.

Alar estaba demasiado débil cómo para preguntar a quién pertenecían y desató el lío sin decir palabra.

– Desde este momento has asumido la identidad de un tal doctor Philip Ames, astrofísico.

Alar subió el cierre a cremallera de su nueva camisa y se soltó el cinturón, listo para cambiarse los pantalones.

– En realidad -continuó la mujer, lacónica-, Ames no existe más que en ciertos documentos gubernamentales. En el bolsillo interior de la chaqueta tienes una billetera con tus nuevas credenciales, un pasaje para el próximo vuelo lunar y un sobre sellado con las órdenes del Laboratorio Imperial de Astrofísica, refrendadas por Haze-Gaunt.

Algo, un hecho de increíble importancia, le desafiaba sin que él pudiera apresarlo. Si no estuviera tan cansado… Dirigiéndose a Keiris preguntó lentamente:

– Supongo que el Laboratorio Imperial está en antecedentes de que Haze-Gaunt envía a un hombre pero no lo conoce. De lo contrario se descubrirá en seguida que soy un impostor. También supongo que Haze-Gaunt, en caso de haber jugado algún papel en esto, cree haber enviado un astrofísico imperial cuya identidad sólo él conoce. Ese doble engaño sólo puede haber sido planeado y ejecutado por una tercera persona.

¡Ahí estaba! Pero seguía tan a oscuras como siempre. Se volvió hacia la mujer con gesto acusador.

– Sólo hay un intelecto capaz de calcular que escaparía de Shey y dónde se llevaría a cabo el juicio de los Ladrones. Sólo hay un hombre capaz de manejar las acciones de Haze-Gaunt y hacer que eligiera a "Ames": ¡el Cerebro Microfílmico!

– El fue.

Alar aspiró profundamente.

– Pero ¿qué motivos tiene él para salvar la vida de un Ladrón?

– No lo sé, pero creo que desea llevarte a descubrir algo vital en el Laboratorio Lunar. Hay algo en un fragmento del mapa estelar. Todo está entre tus indicaciones. Además el Cerebro, en secreto, simpatiza con los Ladrones.

– No comprendo.

– Tampoco yo. No tenemos por qué entender.

Alar se sentía completamente perdido. Pocos minutos antes el mundo se reducía a Ladrones e imperiales. Ahora sentía vívidamente el impacto de un cerebro que trataba a ambas facciones como si estuvieran compuestas por niños, un cerebro de inconcebible profundidad, que trabajaba con infinita habilidad y paciencia hacia… ¿hacia qué?

– Allí está la Lunar Terminus -dijo su compañera-. Tu equipaje ya está revisado y a bordo. Verificaran cuidadosamente tu pasaporte, pero no creo que haya problemas. Si quieres cambiar de idea, ésta es tu última oportunidad.

Haze-Gaunt y el Laboratorio Imperial se reunirían en algún momento para comparar sus notas. Alar imaginó por un instante el momento en que se viera acorralado por rudos policías imperiales en el diminuto Observatorio Lunar; la mano se le retorció intranquila sobre la empuñadura del sable. Pero ¿qué había en ese placa estelar? ¿Por qué el Cerebro Microfílmico lo había elegido precisamente a él para que la descubriera? ¿Acaso ese detalle podía arrojar alguna luz sobre el problema de su identidad?

¡Iría, sin lugar a dudas!

– Bien, adiós; Keiris -dijo suavemente-. A, propósito, debo advertirte algo. En la cancillería han reparado en tu ausencia, No me preguntes cómo lo sé. Correrás un gran riesgo si vuelves allí. ¿No puedes venir conmigo?

Ella meneó la cabeza, -Todavía no. Todavía no.

X EL INTERROGATORIO

Mientras trepaba apresuradamente la escalera secreta hacia sus habitaciones de la cancillería, la calma exterior de Keiris ocultaba una grave confusión interior, la misma confusión que se había iniciado en las primeras horas de la noche, cuando la esbelta silueta de Alar se recortó en su ventana. La armadura con que ella se había rodeado tras la desaparición de Kim (¿habría muerto, como decían?) yacía en pedazos a su alrededor. ¿Cómo era posible que un Ladrón desconocido la afectara hasta ese punto?

Aun sin máscara, su rostro no le ofrecía clave alguna; era una verdadera desilusión, pues ella nunca olvidaba una cara. Sin embargo, desde la primera vez que viera esa frente ancha y suave, esos ojos oscuros incongruentemente duros, el problema que debía desvanecerse como absurdo se había acentuado. Sabía que nunca hasta entonces le había visto, pero también sabía que le era completamente familiar, parte de sí misma, como las ropas que usaba. ¿Representaba eso una falta de lealtad para con Kim? Todo dependía del sentido que ella le diera.

Al detenerse junto al panel que se abría hacia su cuarto de baño sintió que se sonrojaba; se encogió de hombros. No era momento adecuado para analizar los sentimientos íntimos. Haze-Gaunt la estaría aguardando en el dormitorio, preguntándose dónde estaba. Había que agradecer al cielo por sus extraordinarios celos. Aunque no creía en ella más que hasta cierto punto, eso le proporcionaba una extraña especie de seguridad, un statu quo perfectamente definido por esa misma inseguridad.

Se permitió un suspiro en tanto deslizaba el panel hacia atrás. Al menos tendría tiempo de darse una ducha y hacer que sus doncellas le frotaran el cuerpo con pétalos de rosa. Mientras tanto podría inventar algunas respuestas a las preguntas que Haze-Gaunt no dejaría de formular. Después se pondría esa bata escotada que…

– ¿Agradable, el paseo? -preguntó Haze-Gaunt.

Estuvo a punto de soltar un grito, pero la lengua se le había adherido al paladar. Exteriormente no dio señal alguna de sorpresa. Respiró hondo y se sobrepuso. Llena de aparente calma se enfrentó a los tres intrusos.

Haze-Gaunt la miraba fijamente, en sombría incertidumbre, con las piernas separadas y las manos cruzadas a la espalda. Shey irradiaba de satisfacción anticipada. En cuanto al general Thurmond, las profundas arrugas de su cara se mantenían inexpresivas; tal vez los paréntesis que encerraban el pequeño guión de la boca eran un poco más duros y crueles.

El corazón de la mujer palpitó aceleradamente. Por primera vez desde que Haze-Gaunt la instalara en esas habitaciones sentía un ramalazo de temor físico. Mentalmente se rehusaba a aceptar las implicaciones que podía tener esa visita del Canciller, acompañado por los dos monstruos más implacables del imperio. Antes de que Haze-Gaunt abriera la boca para preguntar nada, ella tenía ya pensada su mejor defensa.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Los Hombres paradójicos»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Los Hombres paradójicos» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «Los Hombres paradójicos»

Обсуждение, отзывы о книге «Los Hombres paradójicos» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x