Bob Shaw - Los mundos fugitivos

Здесь есть возможность читать онлайн «Bob Shaw - Los mundos fugitivos» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Город: Barcelona, Год выпуска: 1990, ISBN: 1990, Издательство: Acervo, Жанр: Фантастика и фэнтези, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Los mundos fugitivos: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Los mundos fugitivos»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Al inicio de
, Toller Maraquine II, nieto del protagonista de
y
, lamenta el hecho de que la vida en los gemelos Land y Overland es demasiado tediosa y plácida comparada con los acontecimientos excitantes de la época en que vivió su ilustre antepasado. Entonces, mientras volaba en globo entre mundos, hizo su asombroso descubrimiento: un disco de cristal enorme, con miles de millas de extensión, crecía rápidamente, creando una barrera entre ellos. Impulsado por razones personales a investigar el enigmático fenómeno, Toller, sin más armas que su espada y su valor ilimitado, llegó a ser una figura destacada en los sucesos que decidirían el futuro de los planetas y sus civilizaciones.

Los mundos fugitivos — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Los mundos fugitivos», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Toller y Steenameert hablaban abiertamente sobre el diseño de muebles, un tema que evocaba imágenes mentales de juntas y armazones, al tiempo que buscaban algún punto débil en la estructura de su prisión. Continuaron la supuesta polémica mientras bajaban por las escaleras hacia la separación de vidrio. Eran novatos, auténticos primitivos en el mundo insondable y tenebroso de la comunicación telepática; pero ya habían aprendido lo suficiente de su experiencia con Divivvidiv como para adivinar que los alienígenas eran vulnerables y podían ser engañados. Era probable que esos intentos pudieran ser escuchados en los procesos mentales más internos, pero los kolkorroneses eran guerreros, y tenían talento para enfrentarse a enemigos de confusa apariencia.

—No puedes negar que las puertas han mejorado con las bisagras y accesorios de hierro —dijo Toller, al llegar a la separación.

En general, resultaba curiosamente similar a lo que habría construido un artesano de Land u Overland para el mismo propósito. Era una estructura rectangular de tres elementos, con un lateral adherido a cada lado de la entrada a la cúpula. Las tres caras del rectángulo iban desde el suelo hasta la parte inferior de la primera galería, y estaban hechas de vidrio desde el nivel de la cintura hasta arriba.

Aun comentando el desarrollo histórico de la carpintería en su planeta, Toller se inclinó de forma aparentemente casual sobre una de las esquinas de la estructura y notó que se desplazaba ligeramente. Sobrepasaba por la cabeza y los hombros a todos los alienígenas que había visto, y además era mucho más corpulento, por lo que podía estimar que su cuerpo debía pesar al menos el triple que el de un dussarrano medio. Su fuerza física podía ser considerada aun superior, debido a las diferencias en la densidad muscular. Estos hechos lo convertían en una potencia a la que Divivvidiv y los de su especie no debían estar acostumbrados a enfrentarse. Había bastantes posibilidades de que una estructura que un dussarrano considerara como una barrera formidable pudiera ser derribada por una embestida de Toller y Steenameert.

Los captores alienígenas contaban con innumerables ventajas frente a los pocos kolkorroneses, pero Toller tenía la esperanza de que se confiaran demasiado, de que estuvieran demasiado seguros de sí mismos. Sus mejores pensadores parecían gastar sus energías en remotas abstracciones —tales como la disolución de las galaxias—, mientras despreciaban amenazas más inmediatas. Eran como ilustres reyes que preparaban sus defensas contra un enemigo global, y mientras tanto se olvidaban del lacayo con el frasco de veneno o de la sonriente concubina con su fina daga…

—Admito que tienes razón respecto de las puertas y demás estructuras semejantes, pero esos son casos especiales —decía Steenameert, asintiendo expresivamente al tantear un panel con el pie—. Allí el metal tiene una función natural; en cambio, cuando se trata de sillas o mesas, siempre está de más.

—Ya veremos —replicó Toller, mientras continuaban su ocioso recorrido por la cúpula.

Llevaban encerrados un tiempo indeterminado, apenas unas pocas horas, pero la naturaleza impaciente y turbulenta de Toller empezaba ya a rebelarse contra la monotonía de la reclusión. Una voz telepática con un indefinido matiz femenino se había dirigido a él y a Steenameert en sus celdas particulares de la primera galería. Toller había inspeccionado la suya brevemente y después, mostrándose no cooperativo por principio, había anunciado que la suya no le gustaba e iba a utilizar otra. Como las celdas eran idénticas y ni siquiera tenían puertas, no había ninguna razón para preferir una a otra, pero la reacción que había esperado provocar no se produjo.

Estuvo tumbado durante un rato en el rectángulo esponjoso que era su cama, pero en seguida se había aburrido. Intentó visitar a Vantara; tenía la esperanza de que su actitud hacia él habría cambiado una vez supiese por Jerene que le habría sido imposible llegar hasta allí con un ejército de rescatadores. No obstante, seguía retirada y aislada en su pequeño enclave; su celda estaba flanqueada por las de las otras mujeres. Para tomarse las cosas con filosofía, Toller abonó a la idea de que el haber sido informada de que estaba a muchos millones de kilómetros de su patria —en vez de a unos cuantos miles—, era más que suficiente para que ella se hundiese en un estado depresivo.

Como su inquietud había ido aumentando, se dedicó a explorar cada una de las galerías de la cúpula. Era lo bastante grande como para albergar veinte veces el número de prisioneros que sumaban ahora, pero ninguno de los despojados compartimentos mostraba signos de una ocupación anterior. ¿Había sido diseñado aquel lugar como prisión? ¿Es que tenían prisiones los dussarranos? ¿O tal vez la cúpula, con su aséptica iluminación sin sombras, era algo parecido a un zoológico? ¿Una jaula de pájaros?

El torrente de preguntas provocó una agitación en su memoria. Justo antes de que se separasen de Divivvidiv —posiblemente para siempre—, la presencia mental del pequeño alienígena parecía haber sido alterada por una misteriosa emoción. Toller la había identificado intuitivamente como culpa; y ahora, mirando hacia atrás, esa identificación le parecía cada vez más exacta. En su momento Toller se había preguntado si estaban siendo conducidos a algún lugar para ser asesinados, pero sus sospechas resultaron infundadas. Entonces, ¿qué sería lo que había causado tal desasosiego en el alma del alienígena?

Estaba también el asunto del Xa, aquel fantástico mar de cristal viviente, y la causa de su presencia en la zona de ingravidez entre Land y Overland. Ahora que la conciencia de Toller estaba saturada con conceptos exóticos, ahora que lo insólito se había convertido en lo normal, podía aceptar la idea de que la función del Xa era proyectar a todo un planeta hasta el centro de una galaxia que se hallaba a millones de años luz.

La primera vez que se enfrentó a tal planteamiento, le había parecido remoto a las realidades de la vida de los planetas hermanos. El concepto le pareció como una burbuja de jabón; un palacio de telarañas construido a partir de pálidas abstracciones. Pero ahora… todo era diferente.

Él, Vantara y unos cuantos compañeros leales estaban prisioneros en un aciago planeta, y…

El entrecejo de Toller se arrugó cuando otros recuerdos comenzaron a aletear ante sus ojos. En el primer hostil encuentro con Divivvidiv, este le había dicho que el salto intergaláctico tendría lugar al cabo de seis días. ¿Había dicho seis días? Sí, lo recordaba bien… y el vuelo a Dussarra había durado unos cuatro días, y aun había pasado más tiempo durante la larga caída…

Un sudor helado abrasó la piel de Toller cuando se dio cuenta de que el tiempo que le quedaba al pequeño grupo de kolkorroneses perdidos podía ser estimado como mucho en unas horas.

O quizás sólo unos minutos…

Capítulo 15

La visión de varias figuras de rostro cadavérico vestidas de negro congregándose detrás de la mampara de vidrio y metal llegó como la respuesta a una plegaria.

Toller se quedó helado a media zancada, tratando de controlar el tumulto de su mente, e intentando pensar y al mismo tiempo no pensar. El comprender que el formidable salto a una parte remota del universo tendría lugar en cualquier momento le había llenado de pesimismo. Necesitaba un nuevo rehén para tener una mínima esperanza de escapar de Dussarra; pero la forma imprevista en que lo había mencionado Jerene había sido una máscara para disimular la desesperación. Su sociedad también se había enfrentado en ocasiones a situaciones de crisis, y aunque no podía establecerse ningún verdadero paralelismo, era incapaz de imaginar que en Overland algún grupo oficial o científico decidiese ir a hacer una visita al zoológico en semejantes momentos.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Los mundos fugitivos»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Los mundos fugitivos» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «Los mundos fugitivos»

Обсуждение, отзывы о книге «Los mundos fugitivos» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x