Connie Willis - Tránsito

Здесь есть возможность читать онлайн «Connie Willis - Tránsito» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Город: Barcelona, Год выпуска: 2003, ISBN: 2003, Издательство: Ediciones B, Жанр: Фантастика и фэнтези, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Tránsito: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Tránsito»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Ocho premios Hugo, seis premios Nebula, y el John W. Campbell Memorial en unos diez años avalan la excepcional habilidad narrativa de la autora de
y
. Se trata de una de las mejores y más inteligentes voces de la narrativa modena, que esta vez nos sorprende e intriga con una emotiva y racional exploración del mundo de las ECM (Experiencias Cercanas a la Muerte) en una novela de implacable suspense.
Según diversos testigos, en una ECM parece haber varios elementos nucleares: experiencia extracorporal, sonido, un túnel de altas paredes, una luz al final del túnel, parientes fallecidos y un ángel de luz con resplandecientes túnicas blancas, una sensación de paz y amor, una revisión de la vida, una revelación del conocimiento universal y la orden de regreso final. ¿Es todo esto algo real, o se trata tan sólo de manifestaciones surgidas de la bioquímica de un cerebro moribundo?
En
, Joanna Lander es un psicóloga que investiga las ECM. Su encuentro con el neurólogo Richard Wright ha de permitirle simular clínicamente ese tipo de experiencias con el uso de drogas psicoactivas. Pero los sujetos del experimento del doctor Wright ven cosas completamente distintas de lo esperado, y Joanna decide someterse al experimento para conocer directamente una ECM. Y las sorpresas empiezan…
Novela finalista del premio Hugo 2002
Novela finalista del premio Nebula 2001
Novela finalista del John W. Campbell Memorial Award 2002

Tránsito — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Tránsito», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

— Muy bien —dijo, mirando a Kit, quien asintió—, puedes ayudarnos, pero tienes que prometer que descansarás…

— Y hacer todo lo que te digan las enfermeras —dijo Kit.

— Lo haré —dijo Maisie mansamente.

— Lo decimos en serio. Sólo tienes que hacer preguntas. No vas a hacer nada ni ir a ninguna parte.

— No me dejarán de todas formas —dijo Maisie, disgustada, y Richard se preguntó qué historia había detrás—. Lo prometo. Sólo haré preguntas.

— Muy bien. La hora que estamos investigando es después de las once y antes de las doce y cuarto.

Maisie intentó estirar la mano hacia la mesita de noche, y Kit saltó a alcanzarle el lápiz y la libreta.

— Once y doce y cuarto —dijo Maisie, anotándolo—. ¿Quiere que lo llame al busca cuando lo averigüe? Richard sonrió.

Puedes llamarme —dijo. Se sacó una de sus tarjetas del bolsillo de la bata.

¿Y si no contesta?

— Puedes dejar un mensaje en mi contestador —dijo él, y ante su mirada escéptica añadió—: Prometo que vendré en cuanto reciba el mensaje.

Miró la hora.

—Será mejor que nos vayamos —dijo Kit, poniéndose en pie—. Han pasado dos minutos.

—No puedes irte todavía. No tengo tu número —dijo Maisie—. Por si el contestador del doctor Wright no funciona.

La retrasadora maestra en acción. Anotó el número de Kit y luego el de Vielle.

—Pero no llames a Urgencias —dijo Richard severamente—. Están muy ocupados. Llámame a mí.

—Lo haré.

—Ahora bébete el Ensure y descansa —dijo Richard, y se dirigieron hacia la puerta.

—¿Sabe cómo es esto? —dijo Maisie.

—¿Qué?

—Es como el Titanic. Tuvieron que averiguar qué había sucedido gracias a la gente, sólo que estaban muertos, así que tuvieron que hablar con otra gente y averiguar qué hicieron y quién los vio y esas cosas.

Recomponiendo la tragedia, pieza a pieza, conversaciones y atisbos y últimas palabras.

—Joanna estaba loca por ti, ¿sabes? —dijo Richard, y Maisie asintió solemnemente.

—Sabía que no podía irse y dejarme.

—¿Vas a ponerte bien, Maisie?—preguntó Kit.

—Aja. Casi es la hora de que venga la señora con las revistas. Va por todo el hospital repartiendo revistas. Apuesto a que tal vez, vio a Joanna. Kit, ¿puedes ahuecarme las almohadas antes de irte?

Tardaron otros cinco minutos e hizo falta que Lucille volviera para que pudieran marcharse.

—Tienes razón —dijo Kit mientras esperaban el ascensor—. Es toda una valiente.

—¿Cómo sabias que no sabía lo de Joanna?

—Tenía la misma cara de mi tío Pat el día que le dieron el diagnóstico —dijo ella, mirando la puerta cerrada del ascensor—. Hay cosas peores que la muerte.

—Como dejar tirado a alguien. Kit lo miró.

—No vamos a dejar tirada a Joanna. Vamos a descifrar su mensaje.

¿Pero cómo, exactamente? Recomponiendo trocitos de información. Kit le trajo la lisia de referencias a jardines que Joanna había encontrado entre las transcripciones, y otra con el título “Regresos bruscos de la ECM”.

— Es de hace varias semanas. Ya lo he visto —le dijo él. Pero cuando volvió a mirarlo, advirtió en la lista el nombre de Amelia Tanaka, y cuando comprobó su testimonio con el escaneo de esa sesión, encon tró que había salido del estado ECM por su cuenta., y que la teta-as parcina estaba presente.

Revisó todas sus ECM y luego empezó con las del señor Sage. El testimonio no servía de nada con el señor Sage, pero cuando Richard comprobó los escaneos, descubrió que había pasado directamente del estado ECM al despertar dos veces. Ambas veces la teta-asparcina estuvo presente. Pero no estaba presente en las ECM del señor Pearsall ni en las del señor O’Reirdon.

Trabajó con los escaneos hasta que los ojos empezaron a arderle, y entonces se marchó al ala oeste y terminó de cartografiar el resto de las plantas, preguntando a varias enfermeras y celadores.

— ¿Cómo puedo llegar más rápido a la ocho-oste desde aquí? ¿Cuál es el camino más rápido a Urgencias?

Y anotó las repuestas y fue añadiendo las rutas a su plano.

Entretanto, reflexionó sobre la lista de mensajes de Maisie. Eran casi imposibles de leer, una letanía de desastre y desesperación cada vez mayor : “Hay hielo”; “Estamos subiendo las mujeres a los botes”; “Requerimos ayuda inmediata”; “Nos hundimos rápidamente”. “SOS. SOS. SOS.”

Había una pista en alguna parte, una conexión. Joanna había tenido un motivo para pedirle a Maisie que los buscara, pero él lo entendía tan poco como los barcos que respondieron al SOS del Titanic. “¿Qué os pasa?”, había preguntado el Olympic, y luego, increíblemente: “¿Viráis al sur para encontraros con nosotros?” El Frankfurt estaba tan despistado que el telegrafista le recriminó: “¡Idiota, permanece a la escucha y atiende!” Incluso el operador del Carpathia preguntó: “¿Debo decírselo al capitán?” Idiotas obtusos, todos ellos, incapaces de comprender un mensaje perfectamente sencillo. “Igual que yo.”

Llamó Vielle.

— Encontré a alguien más que vio a Joanna. Wanda Rosso. Es radióloga. Dice que vio a Joanna en la cuatro-oeste a eso de las once y media.

— ¿Dónde en la cuatro-oeste? —preguntó Richard, recuperando el plano del Mercy General.

— Estaba entrando en un ascensor.

Había dos ascensores para pacientes y dos ascensores de servicio en la cuatro-oeste.

—¿Qué ascensor?

—No lo dijo . Supongo que el que está junto al pasillo.

—Pregúntaselo. ¿Sabía esa tal Wanda en qué dirección iba Joanna?

—No podía recordarlo —dijo Vielle—. Cree recordar que la flecha “abajo” estaba encendida, pero no está segura. Le pregunté si Joanna parecía excitada o feliz, y dijo que no notó nada, excepto que parecía tener prisa porque no paraba de mirar los números de las plantas y de dar golpéalos con el pie.

Con prisa, iba a alguna parte en el ala oeste. ¿Pero adonde? La tercera planta era Ortopedia, lo cual no parecía probable, y debajo todo eran oficinas de administración. Y esta Wanda había dicho que no estaba segura de que la flecha estuviera encendida. La cuarta era Pediatría, y no había ido a ver a Maisie. La sexta era Cardiología, una posibilidad en lo referido a las ECM, pero Joanna no se había llevado la minigrabadora consigo.

—¿Dijo si Joanna llevaba un cuaderno?

—No.

—¿Averiguaste lo de la cinta? ¿La tiene la policía?

—No —dijo Vielle, y hubo un extraño cambio en su voy.—. Su ropa fue destruida.

—¿Destruida? ¿Estás segura? Era una prueba.

—No hay caso. El sospechoso está muerto, y hubo testigos, así que no había ningún motivo para conservarla.

—Pero no habrán tirado las cosas que llevaba en los bolsillos —dijo él—. Las habrán devuelto a sus parientes. Tal vez su hermana tenga la cinta. Y escucha, he estado pensando, puede que también haya notas. Joanna siempre tomaba notas cuando hacía las entrevistas, y sabemos que no llevaba la grabadora consigo. Puede que haya un cuaderno, un trozo de papel…

—Todo fue destruido —dijo Vielle, y su voz sonó cortante, definitiva—. En la papelera de residuos contaminados.

—¿La papelera de resi…? —dijo él, y entonces comprendió lo que Vielle había estado intentando decirle de manera implícita. La ropa de Joanna estaba empapada de sangre, y todo lo que llevara en los bolsillos se habría empapado también. Estropeado. Ilegible.

—Lo siento —dijo Vielle—. Todavía no he encontrado al taxista, pero tengo un par de pistas. Te llamaré en cuanto encuentre algo.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Tránsito»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Tránsito» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Connie Willis - Zwarte winter
Connie Willis
Connie Willis - Black-out
Connie Willis
Connie Willis - Passage
Connie Willis
Connie Willis - Rumore
Connie Willis
Connie Willis - All Clear
Connie Willis
Connie Willis - Lincoln’s Dreams
Connie Willis
Connie Willis - Fire Watch
Connie Willis
Connie Willis - Remake
Connie Willis
Connie Willis - L'anno del contagio
Connie Willis
Отзывы о книге «Tránsito»

Обсуждение, отзывы о книге «Tránsito» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x