Robert Silverberg - La estrella de los gitanos

Здесь есть возможность читать онлайн «Robert Silverberg - La estrella de los gitanos» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Город: Madrid, Год выпуска: 1988, ISBN: 1988, Издательство: Júcar, Жанр: Фантастика и фэнтези, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

La estrella de los gitanos: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «La estrella de los gitanos»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

En el año 3159, la humanidad ha conquistado las estrellas, y los otrora despreciados gitanos son hoy mimados y respetados, porque solo ellos pueden llevar a buen puerto las astronaves en sus largos saltos estelares.
Pero los gitanos tienen también otros talentos,. Arrastrados por su tradición errante, siguen vagando, pero hoy no solo a través del espacio, sino también del tiempo: su facultad de espectrar les permite trasladarse a las más remotas épocas, y volver al viejo y ya desaparecido planeta Tierra para contemplar su vida pasada, desde el esplendor de la antigua ciudad de Atlantis hasta el horror de los campos de exterminio nazis.
Y los gitanos mantienen un antiguo sueño: volver a su mundo de origen. Porque ellos nunca fueron nativos de la Tierra. Y así, contemplan desde el cielo de los mil mundos por los que se hallan ahora dispersos la Estrella Romani, de la que tuvieron que huir precipitadamente para salvar sus vidas, y anhelan el día en que podrán regresar a su hogar. Y quien mas lo anhela es Yakoub, el Rey de los Gitanos, un personaje mezcla de Falstaff y Ricardo Corazón de León, que abdicó de su trono para poner las cosas en su sitio y ahora tiene que volver a él para cumplir con el último destino de la raza rom.

La estrella de los gitanos — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «La estrella de los gitanos», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

—Dios nos ayude a todos —murmuró Valerian.

Luego empezaron a chillar todos juntos de nuevo, y en un abrir y cerrar de ojos la reunión se vio reducida a la histeria más absoluta. Intenté apaciguarles y no lo conseguí. Cuando un rey no puede conseguir la atención de sus propios consejeros, hay auténticos problemas en la mancomunidad. Les observé gritar y discutir por un tiempo, y yo también grité y discutí un poco, y nada de aquello sirvió para nada. Así que simplemente me alejé de ellos. Rodeé el cráter hasta el otro lado y trepé un par de círculos y me senté de espaldas a ellos, escuchando las voces y gritos de mis mejores y más leales amigos.

Al cabo de un rayo oí el sonido de alguien subiendo a mis espaldas. No miré. Estaba completamente seguro de quién era, porque incluso de espaldas capté aquella naturaleza ligeramente extraña en su presencia.

Thivt.

Aguardé, sin decir nada. Sintiendo su espíritu alienígena acercarse más y más a mí.

Ya saben que nunca hemos decidido de una forma satisfactoria si existen o no otras razas inteligentes en la galaxia. Ciertamente, tienen que haber existido algunas, en un momento determinado…, la antigua fortaleza de Megalo Kastro es sólo uno de cierto número de indicaciones de ello. Pero no hemos podido hallar ninguna cultura alienígena viva. Las únicas especies inteligentes que conocemos aparte nosotros son los gaje, dos razas humanas básicamente idénticas que evolucionaron en mundos distintos a miles de años luz de distancia. A medida que nuestra cada vez más amplia expansión nos lleva hacia fuera en la galaxia, nos encontramos con un elevado número de interesantes y complejas criaturas, pero ninguna poseedora de los rasgos que calificamos como inteligencia. Puede que ustedes deseen contar cosas tales como el mar viviente de Megalo Kastro como una forma de vida inteligente, pero eso no es inteligencia como nosotros la comprendemos.

(La presencia de dos razas humanas separadas pero idénticas a tantos años luz de distancia es un rompecabezas distinto pero relacionado. Un cierto número de grandes pensadores entre los rones dicen que es improbable estadísticamente y con toda seguridad biológicamente imposible que dos especies evolucionen independientemente en dos mundos distintos con virtualmente la misma forma. Sospechan que roms y gaje tienen que haber poseído un antepasado común en algún otro mundo completamente distinto, muy lejano. Que todos somos descendientes de colonos que fueron dejados atrás en tiempos prehistóricos. En cuanto a las diferencias que existen entre las dos razas —la habilidad rom de espectrar, digamos, y la habilidad relacionada con ella de propulsar astronaves en modo de salto—, pueden explicarse como mutaciones que se infiltraron en nuestra rama de la humanidad durante nuestros miles de años de existencia separada en la Estrella Romani. Todo eso son especulaciones roms, recuerden. No existen especulaciones gaje sobre este tema. Los gaje, por supuesto, no tienen ningún indicio de nuestro origen alienígena. Si lo hubieran tenido alguna vez, probablemente nos hubieran linchado a todos hace ya mucho tiempo, allá en la Tierra, durante los años de persecución. Ya fue bastante duro para ellos soportar nuestra forma errante de vivir y nuestro desdén por sus leyes. Saber que éramos bichos de otro planeta hubiera desatado con toda seguridad algún tipo de gigantesco pogrom, una santa cruzada contra las abominables cosas malignas llegadas de las estrellas. Quizá aún pudieran hacerlo.)

Thivt, de todos modos…, estoy convencido de que es algo distinto. Ni rom ni gaje, creo. Pero dudo que llegue a saber alguna vez la verdad; porque Thivt es mi amigo y mi primo, y la cortesía me impide pedirle que me cuente si es o no humano.

Se detuvo a mi lado, lanzando oleadas de peculiaridad. Apoyó ligeramente su mano en mi brazo. Sentí el calor fluir de él, la ternura, la simpatía. Eso era lo más extraño en él: la forma en que podía tocar tu mente, la forma en que podía conseguir una especie de comunión contigo.

—Yakoub —dijo.

—Escúchales, Thivt. Chillando como pollos en el corral.

—Pronto se apaciguarán.

—Todos están en contra de mi plan, ¿verdad?

—¿Es eso tan importante para ti?

—Si ellos creen que me he vuelto loco, lo es. Necesito su apoyo si las cosas no me van bien en Galgala, y dudo que lo vayan. ¿Cómo puedo pedirles que vengan aquí y arriesguen sus vidas por mí, si piensan que he puesto deliberadamente mi cuello en peligro contra todos sus consejos?

—Harán todo lo que tú les pidas que hagan, Yakoub.

—No lo sé. —Estaba dudando. Frente a una oposición tan concertada, empezaba a creer que debía abandonar mi idea. Quizá sí estuviera loco. Tal vez estuviera imponiendo un riesgo innecesario no sólo a mí sino a todo el mundo.

—No son estúpidos —dije —. Si ellos creen que no debería ir, entonces quizá…

Los dedos de Thivt seguían apretando ligeramente mi brazo. Sentí el amor fluir de él a mí, la preocupación, el apoyo.

—Sigue tu propio juicio, Yakoub. Nunca te ha traicionado. Si crees que lo que hay que hacer es acudir a ver a Shandor, entonces debes ir a ver a Shandor. Tú eres el rey. Tú prevalecerás.

Me volví hacia él.

—¿Lo crees así, Thivt?

Sus oscuros y solemnes ojos estaban muy cerca de los míos. En aquel momento me pareció más misterioso que nunca. Me pregunté qué se ocultaba detrás de aquella serena frente, qué tipo de cerebro, que circunvoluciones y canales alienígenas. Estaba enviándome aliento. Estaba enviándome fuerza. Fuera lo que fuese, perteneciera a la especie que perteneciese antes de adoptar la forma humana, era mi amigo. Era mi primo.

—Creo que sí, sí —dijo. Y lo dijo en romani.

—De acuerdo. Que así sea, pues.

Caminé de vuelta rodeando el cráter hacia los demás. Cuando llegué a su lado, todos habían callado y me miraban.

—No vas a hacerlo, ¿verdad? —dijo Polarca.

—Ya he tomado mi decisión.

—¡Somételo al menos a la phuri da¡! —exclamó Valerian —. ¡Por el amor de Dios, Yakoub, deja que ella decida!

—¡La phuri dai! —insistió Polarca —. La phuri dai.

De nuevo se volvieron hacia Bibi Savina y se apiñaron a su alrededor. Seguían aún contra mí, todos menos Thivt. Realmente pensaban que me había vuelto loco.

—De acuerdo —dije, empezando a sentir la furia que crecía en mi interior —. Escuchemos a la phuri dai. Dinos, Bibi Savina. ¿Qué debo hacer?

Había una fantasmagórica luz en los ojos de Bibi Savina, y su arrugado y apergaminado cuerpo parecía arder con una llama interior. Por un momento parecía erguirse erecta de nuevo, y de ella emanó una especie de belleza que brilló mucho más que la de la magnífica Syluise.

—Tienes que ir a Galgala, Yakoub —dijo con una voz extraña, como la de alguien que está en trance. La voz de un oráculo —. Ve a ver a Shandor y dile que él no es el rey. Es la única forma. Eso es lo que debes hacer.

Cinco:

EN LA BOCA DEL LOBO

¿Qué había hecho este profeta? ¿Qué nos había dicho, ante todo, de hacer? Nos había dicho que rechazáramos todo consuelo —dioses, patrias, moralidades, verdades— y, retirándonos a la soledad, sin usar nada más que nuestra propia fuerza, empezáramos a modelar un mundo que no avergonzara nuestros corazones. ¿Cuál es el camino más peligroso? ¡Es el que deseo seguir! ¿Dónde está el abismo? ¡Allá hacia donde me encamino! ¡Cuál es la alegría más valiente! ¡Asumir la completa responsabilidad!

—Kazantzakis

1

Pese a la afirmación de Bibi Savina hubo una enorme agitación. Se me acercaron en grupos de dos y tres, intentando hacer que cambiara de opinión. Piensa en los riesgos, dijeron. Piensa en el peligro. Piensa en la pérdida para nuestro pueblo si Shandor te causa algún daño, Yakoub. Piensa en esto, piensa en aquello. Eres indispensable, me dijeron. ¿Cómo puedes simplemente ponerte así en manos de Shandor?

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «La estrella de los gitanos»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «La estrella de los gitanos» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «La estrella de los gitanos»

Обсуждение, отзывы о книге «La estrella de los gitanos» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x