Rex Stout - Los Amores De Goodwin

Здесь есть возможность читать онлайн «Rex Stout - Los Amores De Goodwin» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: Триллер, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Los Amores De Goodwin: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Los Amores De Goodwin»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Cuando un poderoso representante gubernamental de la O.R.P. (Oficina de Regulación de Precios) está preparándose para hablar ante un grupo de millonarios pertenecientes a la A.I.N. (Asociación Industrial Nacional) muere asesinado. El mundo de los negocios se tambalea ante las sospechas vertidas sobre los magnates asistentes a la conferencia. La A.I.N. exige que se encuentre al asesino y Nero Wolfe decide hacerse cargo del caso.

Los Amores De Goodwin — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Los Amores De Goodwin», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

– No está usted obligada, señora, a explicarme nada. Ha hablado usted ya tres o cuatro minutos.

– Ya lo sé. Mi primo me advirtió que sería usted de una aspereza inverosímil. Por ello me parece abordar el asunto directamente y decirle que me considero responsable de la muerte de Phoebe Gunther.

– Esta es una idea molesta. ¿De dónde la ha sacado?

– He aquí lo que quiero explicarle aunque no he acabado de decidirme a ello. Anoche creí volverme loca; no sé qué hacer, porque siempre me apoyaba en mi marido para tomar las decisiones graves. No quiero hablar de ello con el F.B.I. o la policía, porque es posible que yo haya cometido alguna modalidad de crimen; no lo sé Pero me parece una tontería explicárselo a usted cuando reparo en los sentimientos que profesaba mi marido respecto de la A.I.N., a cuyo sueldo trabaja usted ahora. Me parece que tendría que acudir a un abogado, y conozco una porción de ellos, pero no parece haber ninguno a quien pudiera confiarme. Siempre llevan ellos el peso de la conversación y una no entiende lo que dicen.

Estas palabras parecieron suavizar un poco a Wolfe. Empezó a prestar un poco más de atención y se tomó la molestia de repetir que no estaba a favor de ningún lado.

– En lo que a mí respecta, este no es ningún pleito privado, como puede serlo para otros. ¿Qué crimen cometió usted?

– No sé si lo fue…

– ¿Qué hizo usted?

– No hice nada; esto es lo terrible. Lo que ocurrió fue que la señorita Gunther me informó de sus actos y yo la prometí que no se lo diría a nadie y no lo cumplí, y ahora tengo la sensación,, -Se detuvo un momento y luego prosiguió-: No miento, no, tengo la sensación… Estoy segura de…

– ¿De qué?

– Estoy segura de que si hubiera informado a la policía de lo que ella me dijo, no la habrían matado. Pero no lo hice, porque ella expresó que lo que estaba realizando era en favor de la O.R.P., y daño de la A.I.N. y que esto es lo que mi marido hubiera deseado por encima de todo. Y llevaba razón. Aun estoy pensando si debo decirlo a usted o no. A pesar de lo que usted diga, subsiste el partido de mi esposo y el contrario, bajó cuyas órdenes trabaja usted. Después de haber hablado con mi primo, decidí venir y ver qué aspecto me presentaba usted.

– ¿Y qué aspecto presentó?

– No lo sé; de veras que no lo sé.

Wolfe frunció el ceño, suspiró y luego se volvió hacia mí.

– Archie…

– Sí, señor.

– Coja su cuaderno de notas. Hay que despachar esta carta esta noche misma para que la entreguen por la mañana. A la A.I.N., a la atención del señor Frank Thomas Erskine. Muy señores míos: El curso de los acontecimientos me obliga a informarles de que me será imposible continuar actuando por cuenta de ustedes en la investigación de los asesinatos del señor Cheney Boone y de la señorita Phoebe Gunther. Por ello, les adjunto un cheque por el valor de treinta mil dólares, devolviendo el anticipo que me hicieron ustedes y terminando así mi asociación con ustedes en este asunto. Su afmo., s. s.»

– ¿Extiendo el cheque? -pregunté después de hacer el último rasgo.

– Naturalmente. Mal podrá usted adjuntarlo si no lo extiende. Espero, señora Boone -dijo dirigiéndose a ella -que este gesto tendrá algún efecto sobre sus resistencias. Aun aceptando el punto de vista de usted de que yo me encontraba en la acera de enfrente, ya ve usted que ya no estoy en ella. ¿Qué le dijo la señorita Gunther que hacía?

– ¿Treinta mil dólares? -dijo ella mirándole atónita.

– Sí, una cantidad importante.

– Pero ¿esto era lo que le pagaba la A.I.N.? ¿Sólo treinta mil? Yo me figuraba que era veinte veces más. Disponen de cientos de millones, de billones…

– Era sólo el anticipo. De todos modos, ahora soy neutral. ¿Qué le decía la señorita Gunther?

– Pero, pero… Ahora no cobrará usted nada -repitió asombrada la señora Boone-. Mi primo me dijo que durante la guerra trabajó usted con mucho afán para el Gobierno sin cobrar nada, pero que a los particulares les cobra unas facturas indignantes. Debo informar a usted a usted, por si no lo sabe, que está en mi mano pagarle la factura más indignante que pueda usted imaginar. Podría… -vaciló un instante y continuó-: Podría darle cien mil dólares.

– No quiero dinero -dijo exasperado Wolfe-. Si no puedo tener un cliente en este caso sin que se me acuse de -estar tomando parte en una sanguinaria «vendetta», ¿Quiere usted decir de una vez qué le contó la Gunther?

La señora Boone me miró y yo tuve la molesta sensación de que trataba de encontrarme algún parecido con su difunto marido. Como él estaba muerto y la mujer se sentía desprovista de su respaldo para las decisiones importantes, yo creí que podría venir bien hacerle un gesto de aliento, y lo hice. No sé si ello fue lo que rompió el dique o no, pero para algo debió de servir, porque ella empezó a hablar.

– La señorita sabía quién mató a mi marido. Mi marido le dijo algo cuando le entregó la caja de cuero y ella obtuvo la noticia a través de estas palabras; y además le dictó algo en uno de los cilindros. Así, pues, el cilindro era una prueba y ella lo conservaba. Lo tenía guardado y se proponía darlo a la policía, pero esperaba a que las murmuraciones y los rumores y la indignación pública contra la A.I.N. la hubiesen producido todo el daño posible. Me lo dijo, porque yo fui a visitarla y le enteré de que me daba cuenta de que no decía verdad en lo de la caja de cuero. Yo sabía que la tenía consigo en la mesa del banquete y no quería mantenerme en silencio más tiempo acerca de ello. La señorita me informó de sus actos para que no diese cuenta a la policía del asunto de la caja.

– ¿Cuándo ocurrió esto? ¿Quería?

La señora Boone reflexiona un momento, se ahondó la arruga de su frente y luego movió la cabeza con vacilación.

– Las fechas las tengo, todas mezcladas…

– Claro está, señora Boone. Usted estuvo aquí con loa demás por vez primera la noche del viernes, cuando se disponía a hablar de ello y cambió de opinión. ¿Fue antes o después?

– Después, al día siguiente.

– Luego, fue el sábado. Otra cosa que la ayudará a usted a situarse; el sábado por la mañana recibió usted un sobre por correo que contenía su retrato de bodas y el permiso de conducción. ¿Lo recuerda? ¿Fue el mismo día?

– Sí, ciertamente. Porque aludí a ello, y ella me dijo que había escrito una carta al hombre que mató a mi marido. Ella sabía que mi marido había llevado siempre el retrato en la cartera desaparecida. Lo había llevado durante más de veinte años, durante veintitrés…

La voz de la viuda se extinguió. Renunció a seguir hablando y tragó saliva. Si perdía el gobierno de sí misma y empezaba a llorar ya gritar no se podía profetizar lo que haría Wolfe. Hasta quizá trataría de mostrarse humano, lo cual nos producirla a todos una violencia terrible. Por ello le dijo:

– Vaya, señora Boone, descanse. Cuando esté usted repuesta díganos para qué le escribió una carta al asesino. ¿Para decirle que le mandase a usted el retrato de bodas?

– Sí -dijo ella con un hilo de voz.

– Claro está -intervino Wolfe para ayudarla.

– Me dijo que ya se daba cuenta de que yo quería tener aquel retrato y le escribió para decirle que sabía quién era y que debía mandármelo.

– ¿Qué más le decía?

– No lo sé. Sólo me informó de esto.

– Pero le dijo a usted quién era.

– No, no me lo dijo; dijo que no quería explicármelo porque no podía creer que yo supiese ocultarlo. Dijo que no tenía que preocuparme por su castigo, que no había duda alguna de éste y que además era peligroso para mí el saberlo. Aquí es donde creo ahora que me equivoqué y por ello digo que soy responsable de su muerte. Si era peligroso para mí, Igual lo tenía que ser para ella, sobre todo después de haberle escrito aquella carta. Debía haberle dicho a la señorita Gunther que informase a la policía, y de no haber querido, haber roto yo mi promesa y dar parte yo misma. De esta forma no la hubiesen matado. Además dijo ella que estaba vulnerando una ley, ocultando informados y sustrayendo una prueba, y por ello tengo también sobre mi conciencia el haberla ayudado a delinquir.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Los Amores De Goodwin»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Los Amores De Goodwin» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «Los Amores De Goodwin»

Обсуждение, отзывы о книге «Los Amores De Goodwin» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x