Juan Gómez-Jurado - El emblema del traidor

Здесь есть возможность читать онлайн «Juan Gómez-Jurado - El emblema del traidor» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: Триллер, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

El emblema del traidor: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «El emblema del traidor»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Esta obra obtuvo el VII PREMIO DE NOVELA CIUDAD DE TORREVIEJA 2008
otorgado el 26 de septiembre de 2008, en Torrevieja (Alicante), por el siguiente jurado: J. J. Armas Marcelo, José Calvo Poyato, Julio Ollero, Nuria Tey (directora editorial de Plaza Janes) y Eduardo Dolón (concejal de Cultura del Excmo. Ayuntamiento de Torrevieja), actuando como secretario Alberto Marcos.
***
Estrecho de Gibraltar, 1940. En el epicentro de una tormenta, el capitán González rescata a un grupo de náufragos alemanes. Cuando cesa el temporal, el cabecilla le obsequia con un emblema de oro macizo. De la conversación con ellos, González no olvidará dos palabras: traición y salvación. En torno a este emblema gira la aventura de Paul, un joven huérfano que vive con su madre y sus tíos, los barones von Schroeder. Una revelación oculta sobre la extraña muerte del padre de Paul precipitará una peligrosa investigación en el Munich de entreguerras. Ni siquiera su amor por Alys, una intrépida fotógrafa judía, acabará con su obsesión por descubrir qué le sucedió realmente a su padre. Pero lo que Paul no sabe es que su indagación traerá consecuencias imprevisibles y cambiará para siempre el destino de las personas que le rodean.

El emblema del traidor — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «El emblema del traidor», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Con una visita a una logia diferente cada semana, y valiéndose de trucos y argucias, Jürgen había conseguido ya más de tres mil nombres de miembros de las logias humanitarias. Heydrich estaba exultante con aquel progreso, y Eichmann también, pues veía cada vez más cerca su sueño de escapar de su gris empleo en Dachau. No le había importado mecanografiar las fichas para Heydrich en su tiempo libre, incluso hacer ocasionales viajes de fin de semana con Jürgen a ciudades cercanas como Augsburgo, Ingolstadt o Stuttgart. Pero aquella obsesión que se había desatado en Jürgen desde hacía unos días le preocupaba mucho. Prácticamente no pensaba en otra cosa que en ese Paul Reiner. Ni siquiera le había explicado qué papel representaba en la misión que Heydrich les había encargado, sólo había dicho que quería encontrarle.

– Yo tenía razón -repitió Jürgen, más para sí que para su nervioso acompañante-. Ella era la clave.

Ajustó un poco la lente de los prismáticos. Su uso le resultaba muy incómodo al tener un solo ojo, y tenía que retirarlos de tanto en tanto. Al volver a enfocar, se desvió un poco y la imagen de Alys entró en su campo de visión. Estaba muy hermosa, más madura desde la última vez que la vio. Se fijó en cómo la blusa negra de manga corta que llevaba le marcaba los pechos, y deseó que alzase la vista un poco para verla mejor.

Ojalá mi padre no la hubiera rechazado. Hubiese sido una gran humillación para esa zorra tener que casarse conmigo y hacer lo que yo quisiera, fantaseó Jürgen. Se le había formado una erección, y tuvo que meter la mano en el bolsillo y acomodarse discretamente el miembro para que Eichmann no notase nada.

Pensándolo bien, es mucho mejor así. Casarme con una judía hubiese sido letal para mi carrera en las SS. Y sin embargo ahora puedo matar dos pájaros de un tiro. Primero atraer a Paul hasta mí y segundo poseerla a ella. Ya aprenderá. Oh sí, ya aprenderá la muy puta.

– ¿Continuamos con lo previsto, señor? -dijo Eichmann.

– Sí, Adolf. Síguele. Quiero saber dónde se aloja.

– ¿Y luego? ¿Le denunciamos a la Gestapo?

Con el padre de Alys había sido muy fácil. Una llamada a un Obersturmführer conocido, poco más de diez minutos de conversación y cuatro hombres habían sacado al judío insolente de su piso de Prinzregentenplatz sin dar ninguna explicación. El plan había salido a la perfección, y Paul había acudido al funeral, como Jürgen estaba seguro de que haría.

Sería tan sencillo repetirlo… descubrir dónde dormía, enviar una patrulla y luego acudir a los sótanos del palacio Witelsbacher, el cuartel general de la Gestapo en Munich. Entrar en la celda acolchada -no para que nadie se arrojase contra las paredes sino para ahogar los gritos de dolor- y sentarse frente a él para verle morir. Tal vez incluso podría llevar a la judía allí y violarla delante de Paul, disfrutar de ella mientras él intentaba desesperadamente soltarse de sus ataduras.

Pero tenía que pensar en su carrera. No estaría bien que la gente fuese hablando de su crueldad por ahí, y menos ahora que comenzaba a ser más conocido, que por su título y por sus logros estaba a un paso de lograr el ascenso y un billete a Berlín para trabajar codo con codo con Heydrich.

Y luego estaba su propio deseo de medirse con Paul de hombre a hombre. Devolverle al mierdecilla todo el dolor que le había causado con sus propias manos, sin escudarse tras la maquinaria del Estado.

Tiene que haber una manera mejor.

De repente supo qué quería hacer, y los labios se le curvaron en una sonrisa cruel.

– Perdone, señor -insistió Eichmann, creyendo que no le había oído-. Le decía que si denunciaremos a Reiner.

– No, Adolf. Esto va a requerir un enfoque más personal.

52

¡Ya estoy en casa!

De vuelta del cementerio, Alys entró al pequeño apartamento y se preparó para la habitual embestida de Julian, que corría como un loco pasillo abajo para abrazarla cada vez que ella llegaba a casa. Pero en esa ocasión no se produjo.

– ¿Hola? -gritó extrañada.

– ¡Estamos en el estudio, mamá!

Alys recorrió el estrecho pasillo. Tan sólo había tres habitaciones. La de ella, la más pequeña, era tan austera como un armario. La de Manfred era prácticamente lo mismo, sólo que su hermano la tenía siempre hasta arriba de manuales técnicos, libros raros en inglés y un montón de apuntes de la carrera de ingeniería que había terminado el año anterior y que siempre decía que iba a tirar. Manfred vivía con ellos desde que comenzó la universidad y se recrudecieron las peleas con su padre. Supuestamente era un arreglo temporal, pero ya llevaban juntos tanto tiempo que Alys no se imaginaba cómo podría desarrollar su carrera de fotógrafa sin él y la ayuda que le prestaba con Julian. Tampoco él podría ir demasiado lejos sin ellos, pues a pesar de haber conseguido excelentes calificaciones en la carrera, sus entrevistas de trabajo siempre terminaban con la misma frase: Qué pena que sea usted judío. El único dinero que entraba en casa era el que Alys ganaba vendiendo fotos, y cada vez era más difícil pagar el alquiler.

El «estudio» era lo que en los hogares normales se conocía como salón. Los instrumentos de revelado de Alys lo habían copado por completo. La ventana se había cubierto con telas negras, y la bombilla que colgaba del techo era de color rojo.

Alys llamó a la puerta con los nudillos.

– ¡Pasa mamá! ¡Estamos terminando!

La mesa estaba cubierta por las cubetas de revelado. Media docena de cuerdas cruzaban de pared a pared, abarrotadas de pinzas que sostenían las fotos en proceso de secado. Alys, divertida, corrió a darle un beso a Julian y a Manfred.

– ¿Estás bien? -le dijo su hermano.

Alys le indicó con gestos que hablarían después. No le habían dicho a Julian dónde iban antes de dejarle al cuidado de una vecina. El niño no había tenido derecho en vida de su abuelo a disfrutar de él, ni tendría en la muerte derecho a su herencia -mucho más exigua en los últimos años, pues Josef había perdido ímpetu en los negocios-, que había pasado por completo a un fondo cultural.

La última voluntad del hombre que decía hacerlo todo por su familia, pensó Alys cuando escuchó al abogado de su padre. Pues no pienso hablarle a Julian de la muerte de su abuelo. Al menos le evitaremos ese mal trago.

– ¿Qué es esto? No recuerdo haber hecho estas fotos.

– Parece que Julian ha estado utilizando tu vieja Kodak, hermanita.

– ¿Ah, sí? Lo último que recuerdo es que el obturador estaba atascado.

– El tío Manfred me la arregló -respondió Julian, con una sonrisa culpable.

– ¡Chivato! -dijo Manfred, dándole un empujón en broma-. En fin, era eso o dejarle coger tu Leica.

– Te hubiera arrancado la piel a tiras, Manfred -dijo Alys, fingiendo enfado. A ningún fotógrafo le gusta que los dedos pequeños y pegajosos de un niño estén cerca de su cámara, pero tanto ella como su hermano sentían debilidad por el pequeño Julian. Desde que aprendió a hablar había hecho lo que había querido con ambos, y al mismo tiempo era el más sensato y cariñoso de los tres.

Se acercó a la hilera de fotos y comprobó que las primeras ya se podían manipular. Cogió una y la levantó con cuidado. Era un primer plano de la lámpara del escritorio de Manfred, con una pila de libros al lado. La foto estaba excepcionalmente bien conseguida, con el cono de luz iluminando a medias los títulos en un excelente contraste de luces y sombras. Había un pequeño desenfoque, producto sin duda del movimiento de las manos de Julian al apretar el disparador. Un pequeño defecto de principiante.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «El emblema del traidor»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «El emblema del traidor» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «El emblema del traidor»

Обсуждение, отзывы о книге «El emblema del traidor» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x