Jo Nesbø - La estrella del diablo

Здесь есть возможность читать онлайн «Jo Nesbø - La estrella del diablo» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: Детектив, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

La estrella del diablo: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «La estrella del diablo»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

En un verano excepcionalmente caluroso en Oslo, el cuerpo de una joven aparece en el suelo de su apartamento, en medio de un charco de sangre. Tiene amputado un dedo de la mano izquierda, y bajo un párpado le han colocado un pequeño diamante rojo con la forma de una estrella de cinco puntas: el símbolo de las tinieblas, el emblema del diablo. Cinco días después del tétrico hallazgo, un hombre denuncia la desaparición de su esposa. Otro dedo cercenado aparece en escena: lleva un anillo con un diamante rojo engarzado, tallado como una estrella de cinco puntas. Tendrán que pasar cinco días más para que aparezca el tercer cadáver… y se repita el ritual. Son demasiadas coincidencias, y todo apunta a que un asesino en serie está actuando en la ciudad.
Harry Hole no tiene vacaciones, por lo que el jefe Moller le asigna el caso y le impone como compañero a Tom Waaler, un tipo corrupto, implicado en el tráfico de armas y de alguna manera responsable de la muerte de Hellen Gjelten, compañera y amiga de Hole, en el transcurso de una investigación. Harry está decidido a demostrar que sus sospechas sobre Waaler están fundadas, e incluso empieza a preguntarse si no estará relacionado con los crímenes. Los demonios reales y los imaginarios se mezclan en la mente del policía, que se tiene que enfrentar a un criminal sanguinario y a un enemigo implacable dentro del departamento. Sólo tiene una cosa clara: la estrella de cinco puntas es la clave para resolver el misterio.

La estrella del diablo — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «La estrella del diablo», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

– ¿Qué es eso? -preguntó Harry señalando una de las imágenes a la izquierda de la pantalla.

– ¿Esto?

– No, más arriba. En el cuarto piso.

Otto miró fijamente la imagen de otro pasillo vacío y paredes de color amarillo pálido.

– No veo nada de particular -admitió Otto.

– Encima de la tercera puerta a mano derecha. En el yeso.

Otto se fijó en el detalle. Había unas marcas blancas. Primero pensó que se podía deber a un intento fallido de montar una de las cámaras, pero no recordaba que hubieran hecho un agujero allí.

Falkeid se inclinó.

– ¿Qué es?

– No sé -dijo Harry-. ¿Cómo funciona esto, Otto? ¿Se puede ampliar justo…?

Otto arrastró la flecha hasta la imagen y enmarcó en un pequeño triángulo una porción de pared justo encima de la puerta. Apretó dos teclas. De repente, el detalle cubría toda la pantalla de 21 pulgadas.

– Santo cielo -musitó Harry.

– Sí, no es cualquier cosa -convino Otto con orgullo dándole unas palmaditas cariñosas a la consola. Estaba a punto de sentir cierta simpatía por el tal Harry.

– La estrella del diablo -susurró Harry.

– ¿Qué?

Pero el policía ya se había vuelto hacia Falkeid.

– Diles a Delta uno, o como cono se llamen, que se preparen para entrar en el 406. Espera hasta que me veáis en la pantalla.

El policía se había levantado y había sacado una pistola que Otto reconoció de las noches que pasó buscando en Internet tras teclear la palabra handguns. Una Glock 21. No entendía el qué, pero era obvio que algo estaba pasando, algo que podía significar que, después de todo, tendría su primicia.

El agente ya había salido por la puerta.

– Alfa a Delta uno -dijo Falkeid soltando el botón del walkie-talkie.

Y se oyó un ruido. Un ruido de estrellas maravilloso y chisporroteante.

Harry entró y se detuvo delante del ascensor. Dudó un instante. Cogió el picaporte de la puerta y la abrió. Se le detuvo el corazón al ver la verja negra. La cancela corredera.

Soltó la puerta como si se hubiera quemado y dejó que se cerrase sola. De todos modos, ya era demasiado tarde, habían llegado al patético sprint final hacia el andén, como cuando sabemos que el tren ya ha salido, como si quisiéramos atisbarlo en una visión fugaz antes de que desaparezca.

Harry subió por las escaleras. Intentaba hacerlo con tranquilidad. ¿Cuándo estuvo allí el hombre? ¿Dos días atrás? ¿La semana anterior?

No aguantaba más. Cuando empezó a correr, las suelas de los zapatos resonaron como papel de lija en los peldaños. Le gustaría atisbar esa visión fugaz.

Aún no había acabado de girar a la izquierda por el pasillo del cuarto piso cuando vio salir por la puerta del fondo a tres hombres vestidos de negro.

Harry se detuvo bajo la estrella tallada que resplandecía blanca sobre la pared amarilla.

Debajo del número de apartamento -406-, se leía un nombre. «VELAND». Y debajo del nombre, había una hoja de papel pegada con dos trozos de cinta adhesiva.

«ESTOY DE VIAJE. MARIUS.»

Hizo un gesto a Delta uno para indicarles que podían empezar.

Seis segundos más tarde, ya habían abierto la puerta.

Harry les pidió que se quedasen fuera y entró solo. Aquello estaba vacío.

Revisó la habitación con detenimiento. Estaba limpia y ordenada. Demasiado ordenada. No cuadraba con el póster de Iggy Pop que había colgado en la pared, encima del sofá cama. Unos libros de bolsillo manoseados en la estantería, sobre el pulcro escritorio. Al lado de los libros, cinco o seis llaves sujetas por un llavero con forma de calavera. Una foto de una chica sonriente bronceada por el sol. La novia o una hermana, pensó Harry. Entre un libro de Bukowski y un radiocasete, se veía un dedo pulgar como de cera pintado de blanco, que apuntaba hacia arriba, como dándole el visto bueno. Todo listo. Todo OK. Ya se vería.

Harry miró a Iggy Pop, el torso desnudo y flaco, las cicatrices autoinfligidas, la mirada intensa desde las profundas cuencas de los ojos, un hombre que tenía pinta de haber pasado por una o varias crucifixiones. Harry tocó el pulgar en la estantería. Demasiado blando para ser de yeso o de plástico, casi parecía un dedo de verdad. Frío, pero auténtico. Pensó en el consolador de la casa de Barli mientras olía el pulgar blanco. Olía a una mezcla de formol y pintura. Lo sujetó entre dos dedos y apretó. La pintura se agrietó. Harry se retiró hacia atrás cuando notó el olor penetrante.

– Beate Lønn.

– Aquí Harry. ¿Qué tal vais?

– Seguimos esperando. Waaler se ha situado en el pasillo y nos ha echado a mí y a la señorita Sivertsen a la cocina. Y luego hablan de la liberación de la mujer.

– Llamo desde el 406 del edificio de apartamentos. Ha estado aquí.

– ¿Ha estado ahí?

– Ha tallado una estrella del diablo encima de la puerta. El chico que vive aquí, un tal Marius Veland, ha desaparecido. Los vecinos llevan varias semanas sin verlo. Y en la puerta hay una nota que dice que ha salido de viaje.

– Bueno. Puede que esté realmente de viaje, ¿no?

Harry se había percatado de que Beate había empezado a utilizar los mismos giros que él al hablar.

– Lo dudo -objetó Harry-. Su dedo pulgar sigue en el apartamento. En un estado próximo al embalsamado.

Siguió un denso silencio al otro lado.

– He llamado a algunos de tus amigos de la Científica. Están en camino.

– Pero… no entiendo -confesó Beate-. ¿No teníais vigilado todo el edificio?

– Bueno, sí. Pero no hace veinte días, cuando esto sucedió.

– ¿Veinte días? ¿Cómo lo sabes?

– Porque encontré el número de teléfono de sus padres y llamé. Recibieron una carta en la que Marius les comunicaba que se iba a Marruecos. El padre me aseguró que, si no recuerda mal, es la primera vez que reciben carta de Marius, siempre llama por teléfono. El matasellos de la carta es de hace veinte días.

– Veinte días -repitió Beate en voz baja.

– Veinte días. O sea, exactamente cinco días antes del primer asesinato, el de Camilla Loen. O sea…

Harry oyó en el auricular la respiración nerviosa de Beate.

– … el que, hasta ahora, hemos considerado el primer asesinato -concluyó Harry.

– Dios mío.

– Hay más. Hemos reunido a los inquilinos y les hemos preguntado si recuerdan algo de aquel día y la chica del 303 dice que recuerda que estuvo tomando el sol en el césped, delante del edificio, justo aquella tarde. Y que en el camino de regreso se encontró con un mensajero ciclista. Y lo recuerda porque no es muy frecuente verlos por aquí y porque, un par de semanas más tarde, cuando los periódicos empezaron a escribir sobre el mensajero asesino, se lo comentó a otras personas de su pasillo.

– ¿Así que ha hecho trampa con el orden?

– No -dijo Harry-. Lo que pasa es que yo soy demasiado estúpido. ¿Recuerdas que me preguntaba si el dedo que cortaba a las víctimas también sería una especie de clave? Pues eso. Es lo más obvio. El pulgar. Empezó desde la izquierda de la mano izquierda en la primera víctima y continuó hacia la derecha. No hacía falta ser un genio para entender que Camilla Loen era la número dos.

– Ya.

«Ya lo ha vuelto a hacer», pensó Harry. «Habla como yo.»

– Entonces, sólo falta el número cinco -dijo Beate-. El dedo meñique.

– Comprendes lo que eso significa, ¿no?

– Que ahora nos toca a nosotros. Que todo el tiempo nos ha tocado a nosotros. Dios mío, ¿de verdad tiene pensado…? Ya sabes.

– ¿Está su madre sentada a tu lado?

– Sí. Cuéntame lo que va a hacer, Harry.

– No tengo ni idea.

– Ya sé que no tienes ni idea, pero cuéntamelo de todas formas.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «La estrella del diablo»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «La estrella del diablo» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «La estrella del diablo»

Обсуждение, отзывы о книге «La estrella del diablo» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x