Carmen Posadas - Invitación a un asesinato

Здесь есть возможность читать онлайн «Carmen Posadas - Invitación a un asesinato» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: Современная проза, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Invitación a un asesinato: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Invitación a un asesinato»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Olivia Uriarte acaba de ser abandonada por su marido. Ha sido reemplazada por una mujer más joven y además está al borde de la ruina.
¿Qué puede hacer? Planear al milímetro su propio asesinato.
¿Cómo? Invitando a todos sus enemigos a un lujoso velero en el Mediterráneo.
Sin embargo… Será su hermana Ágata quien reconstruirá los últimos minutos de la vida de Olivia y buceará en los posibles motivos de cada invitado para asesinarla.
Esto, cambiará su propia vida y la de su hermana.

Invitación a un asesinato — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Invitación a un asesinato», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Para seguir con el relato ordenado de cómo fue desarrollándose el susodicho rosario de acontecimientos a partir de este momento, supongo que ahora tendría que dedicar unas líneas a explicar nuestro reencuentro. Relatar, por ejemplo, el instante en que abrí la puerta y allí estaba él, tan rubio, materializado como una divina aparición en mi oscuro y bastante maloliente descansillo (misterio glorioso). Explicar también que su sonrisa espectacular no se le torció ni un poquitín al entrar en casa y verme ahí, con la coleta a medio hacer, el colorete mal puesto y tremenda cara de pánfila (misterio gozoso). Y por fin (misterio doloroso porque de todo tiene que haber en la viña del Señor) señalaré que el equipaje que traía era mínimo, por lo que no tuve más remedio que presagiar que la visita iba a ser más corta que un amén Jesús.

Sí, así fue el comienzo de aquella estadía que se inauguró con un beso de bienvenida y unas palabras de gratitud «por darme "albergo"», pronunciado tal cual, con "o" y no con "ue", y envuelto en ese maravilloso acento italiano que ni siquiera requiere el apoyo de su belleza física para derretir corazones. Y para decirlo todo, añadiré que, no bien cerramos la puerta, se acabó el rosario de mis dudas, al menos durante un buen rato. Hasta la hora de irnos a la cama para ser exactos. Pero vamos por partes, porque antes de eso ocurrieron varias cosas que necesito contar.

Pasaré velozmente por nuestras palabras iniciales. Me detendré apenas en transcribir las razones de su visita a Madrid y que eran las mismas que ya he explicado antes (buscar trabajo, abrir nuevas posibilidades, cambiar completamente de ocupación).

Tampoco creo que merezcan más de un par de líneas sus amabilidades por mi acogida («Sabía que iba contar contigo, Ágata. Mañana muy temprano tengo una entrevista en el centro de Madrid, por la tarde otra en La Moraleja y luego me vuelvo a Palma por la noche, no quiero abusar de tu hospitalidad»). Y así pasaron los primeros diez o doce minutos, tan formales. Después entramos en la intendencia, con las particularidades propias de cualquier acomodo -uno no demasiado cómodo, me temo.

«Es que ya ves -le dije-, esta casa sólo tiene dos dormitorios, uno es el mío y el otro lo he convertido en cuarto de trabajo. Pero eso en seguida lo arreglamos; me llevo el ordenador a mi habitación y el resto es todo es para ti. Además, el sofá éste es feo pero bastante grande. No, no, de veras que no es ningún trastorno, y ahora voy a darte también unas toallas; tendremos que compartir cuarto de baño, pero de eso ya tenemos práctica desde el Sparkling Cyanide, ¿verdad?»

Creo que fue al mencionar el nombre de aquel cianuro espumoso cuando noté que se le tensaba la mandíbula, un síntoma que, según tengo entendido, suele asociarse con agresividad contenida. Pero quiá, yo ya no pensaba en esas tonterías, adiós aprensiones y temores, porque era delicioso ver cómo mi casa se iba transformando en otra muy distinta a medida que él la ocupaba. Observar, por ejemplo, el modo en que la balda de mi cuarto de baño daba acogida a sus objetos de aseo, a su cepillo de dientes, ahora junto al mío en vasos idénticos; a su after shave y su colonia, codeándose con mi Nenuco de toda la vida («¿De veras usas Old Spice?», pregunté al reparar en aquel inconfundible frasco de cerámica blanca que hacía años no veía. «Es mi favorita desde que tengo dieciocho años -dijo él-. Tu querida hermana opinaba que era más apestosa que el pachuli»).

Esa fue la primera y por el momento única mención que se hizo de Olivia. Pero, si su fantasma rondaba por ahí, desde luego no se materializó para darnos la lata. Es más, creo que mi carcajada al oír el comentario sobre el Oíd Spice nos acercó un tanto.

«Pues a mí me encanta como huele, es supervaronil», dije, e inmediatamente me di cuenta de la metedura de gamba, qué majadera, apuesto que enrojecí hasta la raíz del pelo. Sin embargo, él no pareció notarlo, estaba deshaciendo la maleta y a cada rato me preguntaba dónde podía acomodar tal cosa o tal otra. Hacía tantos años que no compartía vivienda con alguien, que me fascinó observar cómo sus escasas pertenencias se iban apoderando del cajón de la única de mis cómodas; su chaqueta y una camisa del armarito del vestíbulo, «la deliciosa colonización del territorio de uno por otro -me dije-, esa que se vuelve usurpación cuando se acaban las ilusiones pero que tan extraordinaria es en sus comienzos».

– ¿Puedo dejar esto aquí, Ágata? No me gustaría descolocar tus cosas.

Vlad me miraba ahora como un escolar aplicado. Llevaba bajo el brazo un par de libros, y de su hombro derecho colgaba la funda de lo que parecía un antiguo y voluminoso ordenador portátil. Yo ya había trasladado mi querido Hewlett Packard de su habitación a la mía, pero me faltaba aún despejar el resto de los objetos del escritorio.

– Verás lo que voy a hacer -dije-. Cogeré dos o tres cosas y el resto se puede quedar aquí mismo, en esta esquina. Así tú puedes instalar tu ordenador.

Acto seguido, aparté varias carpetas con facturas, cartas de bancos, cosas así. Lo único que había de mayor volumen sobre mi mesa de trabajo era aquella caja que me había dado Flavio Viccenzo con las pertenencias de Oli y, antes de retirarla, volví a guardar dentro la carta del registro para que no se traspapelara. «En cuanto se vaya Vlad, mañana lunes, iré a ver qué me ha dejado Oli», pensé, y al hacerlo no pude evitar sentir un ahogo de profunda pena por mi hermana muerta. Pero fue sólo un segundo. En seguida volví a la deliciosa colonización de la que hablaba antes, a ver cómo Vlad iba colocando sus pertenencias sobre mi vieja mesa de trabajo.

– Ven, deja el maletín del ordenador en aquel estante. ¿Y estos libros, de qué son, Vlad?

– Espero que sean mi futuro -dijo él, y acto seguido rompió a reír, supongo que para que su declaración no pareciera exagerada-. Son recetarios de cocina; se acabó el mar, bienvenidos sean los fogones.

Entonces me explicó algo de su vida inmediatamente anterior a su empleo en el Sparkling Cyanide y que había trabajado en Sorrento en una cantina regentada por su madre, «que, por si no lo sabías, es una de los muchos parientes pobres de mi querido Primo Flavio, por lo que me será facilísimo el downshifiing», dijo, así, en inglés y yo tuve que esperar que continuara con su relato para deducir el significado de aquel «palabro» por su sentido dentro de la frase, pero por fin creo que lo entendí. Douwshifting debe ser algo así como descender en la escala laboral y decantarse por un trabajo menos glamouroso que el que a uno le corresponde por sus aptitudes, pero que tiene, en cambio, más compensaciones emocionales.

– Antes incluso de que tuviera lugar el accidente de tu hermana y la ruina de mí querido primo ya tenía pensado mandarlo todo a paseo, de modo que no importa. Sólo habrá que seguir bajando aún más, a las entrañas del monstruo, eso es todo.

– ¿De qué monstruo?

– Del círculo de los ricos, de esa sociedad figurona y estúpida de la que todos dicen querer escapar pero que, al final, los tiene cogidos por los huevos. Sin embargo, yo ya he entendido cómo son las cosas en ese particular y selecto círculo del infierno: Lasciate ogni speranza voi ch 'éntrate: Abandonad toda esperanza vosotros que entráis aquí. No, no hay escapatoria. No se puede salir del infierno. Sólo ascender o descender, y la gente piensa que subir es lo acertado, por eso el mundo está lleno de gilipollas matándose por asomar la jeta y figurar. Pero no, la única manera de huir es bajar y cuanto más profundo, mejor.

Me desconcertó absolutamente este pequeño discurso de Vlad. No me esperaba un razonamiento así de sus labios. Tal vez estaba condicionada por los comentarios de Olivia sobre el muchacho. De ellos había sacado la impresión de que mi hermana no tenía buen concepto de las dotes intelectuales de Vlad y menos aún de las culturales.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Invitación a un asesinato»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Invitación a un asesinato» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «Invitación a un asesinato»

Обсуждение, отзывы о книге «Invitación a un asesinato» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x