Ángel Morancho Saumench - Marina escribe un libro

Здесь есть возможность читать онлайн «Ángel Morancho Saumench - Marina escribe un libro» — ознакомительный отрывок электронной книги совершенно бесплатно, а после прочтения отрывка купить полную версию. В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: unrecognised, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Marina escribe un libro: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Marina escribe un libro»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Es así como recurre a sus íntimos amigos, Claudia y Pedro, un matrimonio de vida intensa y compleja. En la narración de sus avatares tropieza con diferencias de clases, disputas de elevado tono, una relación con idas y venidas donde Marina encuentra la trama que llevaba tiempo buscando.Ángel Morancho expone ante los ojos de Marina las diferentes caras del amor con su fuerza y efecto imparable sobre una pareja de enamorados.

Marina escribe un libro — читать онлайн ознакомительный отрывок

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Marina escribe un libro», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Enrique Dimó se dio por vencido y se alejó de la mesa.

Viéndole ya en la lejanía pensé que probablemente había acertado. Él se comparece como un buscavidas que se entiende muy bien con mujeres casadas o emparejadas que empiezan a sentir el hastío de una convivencia casi tediosa; luego les pide favores, inversiones imposibles y� si no entran en el juego, les amenaza con hacer público su affaire. Es algo más que un gigoló. Me recuerda a lo sucedido a una conocida mía, y... ¡caray!, los siete millones de euros que estafaron a una de las dueñas de BMW, casi la mayor fortuna de Alemania. Recuerdo que tuvo la valentía de enfrentarse al chantaje; le pedían cuarenta y nueve millones de euros por no publicar unos comprometedores DVD que contenían todas las grabaciones de las íntimas relaciones entre ella y su chantajista.

Cuando ya ni podía ver al galán, sonreí. Hasta llegué a pensar que fui una afortunada por ese procaz galanteo de un hombre tan sugestivo y seductor. Me he sentido halagada, es correcto en las formas y, al menos, me ha divertido, pese a la tensión de una propuesta tan directa. Si no fuera porque quiero a mi marido, igual le hubiese correspondido; una conquista más en su colección, y yo seguro que me lo hubiese pasado fenomenal. Parece una constante; las mujeres ignoramos con frecuencia a varones normales para dejarnos arrastrar por los canallas; o machos alfa que últimamente se han puesto de moda. Pero ¿qué pienso? ¿Y después? Me reí por no llorar; según mi religión ortodoxa habría pecado por interesarme la tentación, me carcajeé. Mi amiga Claudia lo habría destrozado, pero yo no tengo sus problemas.

Y yo, ¿qué estaba haciendo con esos chabacanos pensamientos? Tenía que ponerme seria. Debía volver a mis inquietudes. Hoy había quedado con Pedro, mi primo segundo de ascendencia rumana, como yo. Nuestros antepasados fueron propietarios de grandes haciendas. En 1947, cuando se produjo el golpe de Estado contra Miguel I, —el último monarca—, nuestras familias o fueron eliminadas por el radical principio de ser traidores a los nuevos dirigentes o lograron escapar. Pero fueron pocos los que consiguieron huir de Rumanía a tiempo, de todos ellos solo quedan vivos, que yo sepa, conmigo (muertos mis padres, me consideraba ser la única), mi tía segunda Andra, mujer de gran carácter y por ello conductora de los Ionesco que huyeron y que ya han ido desapareciendo con el tiempo, y su hijo Pedro. Salvo milagros, mi familia se reduce a Andra y a su hijo. Es con él con quien necesito hablar abiertamente.

Miré el reloj. Eran las cinco y media de la tarde. Tenía más de una hora y media para preparar mi entrevista con él. Su oficina en Libertas&Cía está muy próxima, al lado del café Gijón.

En el consulado rumano me informaron de que era intención del nuevo gobierno restituir los bienes confiscados desde el golpe de Estado de 1947. No me dieron muchas esperanzas. Esa restitución tiene muchos opositores y, políticamente, se piensa que puede irritar al pueblo. Muchos de sus ciudadanos no se han acostumbrado a una vida sin permanentes intimidaciones.

Saqué del bolso la lista de propiedades y las volví a revisar. Había conseguido incluso las de Andra, mi tía. Ella no quiso saber nada de su país y renunció a cualquier devolución o compensación. Es un ciclo cerrado de su vida que no quiere revivir. No pude convencerla y, claro, su hijo Pedro ¿cómo me va a defender a mí si su madre no quiere malos recuerdos?

No me resultará nada fácil, pero más difícil será que me permita que haga de mediadora entre él y mi íntima amiga Claudia; tanto lo somos que ambas nos llamamos hermanas. En cierta medida sé que estoy engañando a Pedro. El tema de Rumanía es la excusa para estar a solas con él porque quien me importa es ella, Claudia. A ella ya le comenté que quiero escribir un relato sobre lo que ha sido su relación con su exesposo, mi primo Pedro. Pienso que si leen una descripción de su relación podrían llegar a disculparse entrambos y recomponer sus vidas. Algo que yo deseo con fervor.

Tendré que repasar cómo les percibía antes de conocerse, y cómo se les apreciaba. Mi problema es que les quiero a ambos; son mis mejores amigos e incondicionales hermanos. Me costará ser objetiva; además, en ocasiones me han entrado grandes deseos de darles de bofetadas por cegatos. Se quieren, ¡claro que se quieren! Pero lo ocultaban en una cámara oscura.

Claudia

Saqué del bolso un cuaderno nuevo y manuscribí mi reciente aventura. Más tarde empecé a escribir sobre ellos; comencé recordando cómo era ella... algo difícil pues posee una personalidad muy compleja.

Mi amiga Claudia Gonzaga y Tamburini es una mujer muy agraciada. Tiene un gran parecido con la actriz Zeta-Jones[1]; por eso, con frecuencia, le hacen bromas de mejor o peor gusto por semejante parecido, como preguntarle por su marido, el también actor, Michael Douglas. Realmente es muy bella. Belleza es lo que destaca en su figura, en la que son sus piernas lo que más llama la atención; parecen de concurso de belleza y recuerdan las de la célebre bailarina y actriz Cyd Charisse[2], mejores que las de Zeta-Jones. Ella es consciente y por eso usa mucho la minifalda o mini pantalones, y ya en épocas frías: leggins muy apretados.

Realmente es una mujer diez, aunque ella se ve con ojos demasiado pequeños es consciente de su atractivo, al que acompaña una gran elegancia, parte natural y otra —su apariencia corporal— debida a la práctica del ballet.

Es hija primogénita del marqués de Gonzaga. Su padre posee una gran fortuna; además, es un tiburón financiero con numerosos contactos, tanto en el mundo del dinero como en el político. Sin escrúpulos, ha acrecentado la fortuna heredada, pero lo que más desea es ser reconocido como aristócrata más que por su patrimonio. El marqués es de los pocos próceres con título que puede mantener un elevadísimo nivel de vida. Naturalmente, está inserto en la llamada jet o, mejor, élite madrileña y nacional, con importantes amistades en el extranjero. Es engreído y de mal carácter, pero muy sagaz y clarividente. Siendo así, Claudia ha vivido en una cerrada y endogámica sociedad, en la que casi fue feliz. Él casi se explica porque cuando tenía quince años adquirió una fobia que le hizo pasar por muy desagradables momentos en frecuentes ocasiones... No tiene las obsesiones aristocráticas de su padre, pero sí espíritu de «casta privilegiada». Con frecuencia eso la hace distante cuando sale de sus círculos habituales. Su ya espontánea suficiencia hace que no empatice con los de otras clases. No sabe qué es la humildad. Pensaba de sí misma que era una triunfadora social con derecho a andar por la vida como ser sobresaliente.

Al igual que yo, fue educada en el British Council School. Éramos compañeras de curso y ya grandes amigas. En la escuela, Claudia ya destacó por su facilidad para el aprendizaje con muy notables resultados. Era así por su gran inteligencia, con un coeficiente intelectual muy alto del que también presumía; es un orgullo más para ella. Ciertamente su paso por la Universidad fue muy exitoso, también con sobresalientes en Derecho, Filología Francesa y Alemana. Los completó con un máster en Economía en Harvard, un curso en la Sorbona de Filología y Literatura Francesa y otro en Heidelberg de alemán. El inglés ya lo dominaba desde el colegio.

En la Universidad fue cuando más apreció que había muchos seres distintos a los de su entorno; de hecho, tuvo que padecerlo cuando se la llamó «la pija del derecho y del revés». Aguantó con flema casi británica y le sirvió para mejorar su facilidad para el sarcasmo y la mordacidad. Arropada por algunos de sus conocidos, pronto superó esa prueba que le dejó con un sentimiento de desprecio hacia seres para ella inferiores, pero herida, aunque no lo confesase. Acabó perteneciendo al grupo de universitarias más populares, más deseadas y más envidiadas.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Marina escribe un libro»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Marina escribe un libro» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «Marina escribe un libro»

Обсуждение, отзывы о книге «Marina escribe un libro» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x