Vassilis Christodoulou - Psicoterapia Corporal

Здесь есть возможность читать онлайн «Vassilis Christodoulou - Psicoterapia Corporal» — ознакомительный отрывок электронной книги совершенно бесплатно, а после прочтения отрывка купить полную версию. В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: unrecognised, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Psicoterapia Corporal: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Psicoterapia Corporal»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

En algunos casos los traumas surgen delante nuestro, como objetivos creados hace tiempo y que ya no podemos ignorar. En muchos casos, sin embargo, tendremos que realizar un trabajo previo, tendremos que despejar el camino, desarmar los obstáculos que bloquean el paso, o construir, con tal de crear soporte y puentes que abran el camino hacia el trauma y a la curación. Una persona equilibrada es una persona sana y un estado de equilibrio dinámico es un estado saludable en el cual estar. Cualquier cosa que altere el equilibrio, no importa cuán profundo esté en la oscuridad del inconsciente, mostrará signos de vida. Mientras más tardemos en confrontar el trauma, más difícil será el reto de echar una nueva mirada a un caso que creímos cerrado.
En el pasado, nuestra tendencia de huir tan rápido como pudiésemos del dolor del trauma fue la respuesta adecuada y, de hecho, hasta pudo salvarnos. En el presente, sin embargo, tenemos nuevas capacidades y más opciones. Nos aferramos como supervivientes de un naufragio a la vieja y destartalada balsa, golpeada por los mares tormentosos de nuestra infancia y no somos capaces de ver las aguas tranquilas a las que nos dirigimos. La fórmula que probamos y que nos funcionó una vez ya no es esencial o, simplemente, no es el método adecuado cuando tanto nosotros como el mundo a nuestro alrededor hemos cambiado. Cuando nos negamos a reconocer un sentimiento de malestar como presagio de algo más, podemos esperar otro tipo de estados, quizá menos persistentes pero más claros: ataques de pánico que aparecen inesperadamente, la depresión que nos priva de la alegría de vivir, las fobias que limitan nuestro espacio vital, y otros malestares físicos que procuran desesperadamente, antes del abrazo final de la muerte, hacernos saber lo que ocurre en las profundidades de nuestro ser…
Son estas las cosas que nos limitan y nos asustan, y a pesar de todo son las cosas que nos muestran nuevos caminos y posibilidades. ¿Permaneceremos en la 'seguridad' familiar a la que se aferra el niño o, como adultos que somos, tomaremos a la criatura asustada de la mano y, con la terapia que ofrecemos, le llevaremos hacia la luz del día?

Psicoterapia Corporal — читать онлайн ознакомительный отрывок

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Psicoterapia Corporal», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

A menudo el trabajo progresivo que realizamos con tal de nutrir al paciente y de ayudarles a avanzar, se alterna con trabajo regresivo que ayudará al paciente a obtener aquello que no recibió en el pasado, le ayudará a sentirse seguro y continuar su desarrollo con confianza.

Me gustaría describir ahora parte de una sesión terapéutica que tuve con C.D. y que tuvo lugar unos tres meses después del inicio de nuestro trabajo juntos. Como siempre, llegó cinco minutos antes. Dijo que se sentía muy cansado, a pesar de no haber hecho nada que justificara tanto cansancio. 'No sé qué me está pasando… Me siento tan rígido y lento y, aun así, no he hecho nada especialmente inusual para sentirme de este modo', me dijo con una expresión de auto-desprecio.

V.Ch.: Quizá no hayas hecho nada inusual pero aun así te causa cansancio.

C.D.: No he hecho nada que no suela hacer… no debería sentirme así.

V.Ch.: ¿No eres quizá un poco duro contigo mismo?

C.D.: Aprendí a ser así… siempre siento que tengo la culpa de algo. Siento como si no fuera suficiente para alguien… como si de alguna manera me quedara corto… no sé, siempre siento que alguien espera algo de mí…

V.Ch.: Ahora, en este momento, ¿qué sientes? ¿Sientes que espero algo de ti?

C.D.: ¿Que espera que yo coopere? No sé…

V.Ch.: ¿Y cómo te sientes cuando alguien espera algo de ti pero no sabes qué es ni cómo responder?

C.D.: No lo sé…

V.Ch.: En este momento, ¿cómo te sientes físicamente?

C.D.: Cansado. Sí, siento como si alguien me hubiese forzado a cavar un campo entero por mí mismo y no hubiese recibido ni una palabra de agradecimiento…

V.Ch.: Si te dieran las gracias, ¿te sentirías menos cansado?

C.D.: Por supuesto.

V.Ch.: Muy bien, concéntrate en tu estado físico. Te sientes cansado, de acuerdo, sabemos eso… Ahora, intenta hablarme un poco más de ese cansancio que sientes.

C.D.: Siento tensión en la cabeza… no me duele pero tampoco me siento bien. Siento como si no pudiese ver por claridad… Siento como si tuviese un trozo de madera dónde está mi nuca, siento dificultad al mover la cabeza de un lado a otro. Como si se me fuera a caer… Noto mis hombros como dos bloques de piedra. Los siento pesados y me duelen… Me cuesta respirar profundamente… Me duele el pecho…

V.Ch.: Tu barriga, tus caderas, tus piernas… ¿cómo las sientes?

C.D.: Bueno, siento la barriga un poco revuelta… En cuanto a mis caderas y piernas, las veo pero ¡no las siento!

V.Ch.: Concéntrate por un momento en aquello que sí puedes sentir en tu cuerpo… Si puedes, cierra los ojos y dime qué ocurre… o dime si ves algo.

C.D.: Sí, veo a mi novia. Veo lo que sucedió ayer… estoy cerca de la cama… me siento en la cama y mi novia se me acerca. Está de pie, en frente mío, y tengo miedo de que quiera sexo y yo no sé si quiero. La amo, la encuentro atractiva, pero ahora mismo no sé si quiero acostarme con ella y no sé qué hacer.

V.Ch.: ¿Qué pasaría si le dijeras que ahora mismo no te apetece acostarte con ella? Si simplemente le dijeras: 'Cariño, no me apetece', ¿no sería eso suficiente? No importa que no sepas si ella realmente quiere o no.

C.D.: No es solamente que no sepa si ella quiere o no, sino que, aunque ella quisiera, es tan buena que no se quejaría ni pondría mala cara.

V.Ch.: ¿Hubo alguien anteriormente que se quejara o te pusiera malas caras?

C.D.: ¡Mis padres! Nunca estaban contentos conmigo… Nunca… Recuerdo un día después de la escuela cuando era joven… no me fue muy bien en un examen y me sentía desgastado, quería irme a la cama y olvidarme de todo. No mostraron comprensión alguna, me humillaron y me sentí agotado. Y luego, cuando tenía unos quince o dieciséis años, tenía miedo de tener una relación. Tenía miedo de que mis padres me criticaran o criticaran a la chica con la que estuviese… Me uní al ejército y mantuve la esperanza de salir con una chica pero prefería masturbarme… Es por eso que, incluso ahora, siento cierta adicción al respecto. Todavía me cuesta arriesgarme… Voy a lo seguro… ¡Oh Dios mío!, me siento tan agotado… quiero estirarme…

Se estiró en el colchón y continuó hablando:

C.D.: No es por casualidad que mintiera a menudo a mis padres. Al mentirles conseguía un poco de amor y afecto… Siempre que les decía la verdad respondían insatisfechos y me rechazaban. En aquellos momentos en que una mentira parecía poder salir a la luz, me inventaba otra para tapar la primera y, al final, me sentía siempre atrapado. Todavía me atormenta, incluso ahora…

V.Ch.: Ahora, en este momento, ¿cómo te sientes? Concéntrate en tu cuerpo y tus sentimientos.

C.D.: ¡Siento como si me hubieran quitado un peso de encima! No siento rabia, no quiero golpear a nadie… aunque me siento dolido… Siento como si tuviera que rendir cuentas a alguien, como si me fueran a juzgar… Me siento prácticamente atrapado en un rincón. Me duele la garganta, como si tuviera una masa dentro. Siento la necesidad de acurrucarme…

Se hizo un ovillo en posición fetal y estuvo en silencio durante un rato. Me tomó de la mano izquierda mientras yo le daba apoyo en la espalda con la derecha. Al cabo del rato continuó:

C.D.: Tengo diez años… Estoy acurrucado en esta posición en mi cama… Es así cómo me protejo.

V.Ch.: ¿Te proteges de quién?

C.D.: De los que me juzgan, mis padres.

Estuvo en silencio durante un rato.

V.Ch.: Ahora, en este momento, ¿sientes que te estoy juzgando?

C.D.: No…

V.Ch.: Bien. ¿Qué te ayudaría en este momento a sentirte mejor?

C.D.: Despertar y descubrir que todo esto no es más que un mal sueño. No hay otra manera en la que pueda lidiar con ello. No soy una mala persona… No soporto la idea de que me juzguen y de que esto nunca acabe. Vale, está bien pero… Siempre habrá 'peros'… Ella está bien pero… Él es feliz pero… Siempre temía los 'peros'… Los 'peros' son tan impredecibles… Y tampoco puedes usarlos para ocultarte.

V.Ch.: En este momento, ¿qué te ayudaría a sentirte algo mejor?

C.D.: Hablar un poco… sí, eso… y un buen abrazo también me ayudaría.

Le cubrí con una manta y le sostuve tal y como estaba, en posición fetal, y le insté a que respirara más profundamente. Se dio cuenta, mientras hablaba, que la masa en la garganta había encogido. El contacto físico y la forma en que le sostenía, sin ningún tipo de condición, le ayudaban. Alguien estaba ahí por él, solamente por él, sin esperar nada y sin juzgarlo. Estuvo en esa posición durante un tiempo, como si se nutriese del ambiente uterino y fuera nutrido por éste. Su cuerpo se relajó, su respiración se tornó profunda y calmada. Lentamente comenzó a abrir su cuerpo y a estirar sus extremidades, tomándose su propio tiempo. Pudo entonces sentir su pelvis; sentía sus piernas y comenzó a jugar con ellas; las subió y las miró… Movió la parte posterior del cuello, haciéndola girar y, entonces, abriendo los ojos, me miró como si fuera un bebé. Era como un bebé que aún recibía la atención de su madre, y se sintió bien. Se mantuvo estirado y, mientras me miraba, le sonreí y, tirando suavemente de sus manos, le alcé levemente. Se le cayó la cabeza un poco hacia atrás; su cuello era flojo… Comenzó a responder a mi sonrisa y me dijo que se sentía 'diferente' al ser capaz de entenderla mejor. Le dije que no se esforzara, sino que simplemente se dejara ir y sintiera como era dejar que su cuerpo fuera levemente elevado, solamente con mi ayuda. Esto era algo nuevo para él… tener a alguien que se preocupase solamente por él de una manera alegre y sin prisas.

Una vez pudo experimentar este 'ahora' tan diferente y pudo registrarlo en su sistema, estaba preparado para seguir adelante y levantarse con su propio esfuerzo y mi apoyo. Le ofrecí mis manos, que utilizó para sostenerse, usando la fortaleza de sus brazos, y se levantó un poco. También esta era una nueva experiencia para él, y también fue buena. Era bueno para él sentir que tenía a alguien que le brindara apoyo, alguien que le mirara alegremente y de manera que, no solamente no se sentía juzgado, sino que se sentía alentado. Se tomó su tiempo, se dio la vuelta, descubrió lo que era gatear con un adulto cerca que le apoyara y, entonces, se sentó en el suelo. Tocaba entonces darle apoyo en la espalda y en la nuca para que, con las plantas de los pies y las palmas de las manos firmemente apoyadas en el suelo, mientras respiraba profundamente desde el abdomen, pudiera sentir lo que era levantar su cabeza. Era verdaderamente una nueva experiencia para él… se sentía tan fuerte que, haciendo fuerza hacia abajo, se puso de pie derecho. Se sintió más alto de lo que nunca jamás se había sentido…

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Psicoterapia Corporal»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Psicoterapia Corporal» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «Psicoterapia Corporal»

Обсуждение, отзывы о книге «Psicoterapia Corporal» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x