Lo pasamos bien ese día, la Cami acostó a su hijo y al poco tiempo la Sandra dijo —me tengo que ir—. A lo que yo contesté —yo también—. Bueno, aún no sé por qué me fui, pero vi la cara de la Cami de decepción, a pesar de haber compartido bastante, debe ser aburrido que se vayan tus visitas cuando se duerme tu hijo.
Fui al día siguiente a entregarle el regalo que se me había quedado en la casa el día anterior, conversamos como una hora mientras el niño dormía y luego otra hora más mientras tenía al niño en brazos.
Después de esto no lo pasaría mejor, mi madre llevaba días insistiendo en que me fuera para Santiago a ver a mi padre antes del año nuevo, yo quería viajar en febrero, pero ella insistió y se enojó mucho, la cosa estaba tan tensa que no me quedó otra que aceptar. Tiempo después me diría que era porque estaba muy enamorado de una mina 25que no valía la pena. Allá en Santiago la seguiría llamando, ella volvería a su casa con su mamá, e incluso un día puso a la niña al teléfono, ese fue un lindo detalle. Un día dejaría de contestar y aunque insistí no volvería a hablar con ella. Tiempo después me enteré gracias a amistades de la U, que el tipo del colectivo, por esas fechas en que me dejó de contestar el celular, la engañó, terminarían su relación y al poco tiempo se pondría a pololear 26con un militar bastante feo, luego quedaría embarazada otra vez, no sé si del militar, ah y dejó la universidad. De ahí en adelante no supe más.
Al final cuando volví a Arica el Vicente me dijo en la guardia, sin saber nada de lo que había pasado con la Natalia – Chino 27 culiao 28 aweonao 29–. No entendía, así que pregunté:
— ¿Por qué?
Por la Macarena. Me contestó
No me dijo nada más, pero sabía cómo nos llevábamos y cómo pensaba ella, supongo que perdí una buena oportunidad por pensar en alguien que arruinó su vida por culpa de sus malas decisiones.
De esto aprendí que no importa lo que hagas por ella, los detalles, las buenas intenciones, el apoyo cuando nadie más lo hace, los pensamientos que nublan tu cabeza, las noches sin dormir, nada de eso importa si ella no siente algo por ti.
Y pensando en mi madre, ella es una verdadera bruja, siempre supo cómo terminaría esto.
1 Rica o rico: Bonita o bonito y sexy.
2 Carretear: Ir de fiesta.
3 Chiquillas: De poca edad, jóvenes.
4 Nota 6.0: Escala del 1 al 7.
5 JUNAEB: Por su sigla en Chile, Junta nacional de auxilio escolar y becas, organismo encargado de administrar los recursos estatales destinados a velar por los niños y estudiantes.
6 Carretear: Ir de fiesta.
7 Jugara: Atreverse, luchar por conseguir algo.
8 Cagado: Con exceso de.
9 Pa´: Para
10 Mina: Mujer.
11 18 de septiembre: Fiestas patrias en Chile.
12 No Cacho: No entiendo.
13 Weón: Estúpido, idiota.
14 Para adentro: Pasmado.
15 Podí: Puedes.
16 Chino: En Chile es muy común que a la gente de procedencia o rasgos asiáticos, se les diga chino sin importar su procedencia.
17 Mina: Mujer.
18 Pololo o polola: Pareja hombre o mujer según corresponda.
19 Cahuín: Comentario malintencionado que provoca disensiones entre personas.
20 Pololeando: Acción de estar en un noviazgo.
21 Torpedo: Papel que en su interior contiene las respuestas de la prueba.
22 Aweonao: Estúpido, idiota.
23 Jotearla: Seducirla o tratar de seducir.
24 Poto: Nalga.
25 Mina: Mujer.
26 Poloear: Tener una relación sentimental similar a noviazgo
27 Chino: En Chile es muy común que, a la gente de procedencia o rasgos asiáticos, se les diga chino sin importar su procedencia.
28 Culiao: Normalmente usado como insulto o palabra despectiva.
29 Aweonao: Estúpido, idiota.
Esto es difícil de explicar, y la segunda parte es más dolorosa, debo admitir que aún veo sus fotos, de hecho, lo hice recién para torturar mi mente un rato antes de escribir. Al igual que con otra mujer que veremos más adelante de similares características, también sueño con un reencuentro, supongo que aún me gusta, pero su frialdad es terrible y como ya verán más adelante cuando algo no le importa simplemente lo deja atrás, y aunque tengo muchas dudas al parecer, nunca me vio como yo la terminé viendo.
Partamos por lo básico, ella es delgada, de ojos café, muy linda, definitivamente la más linda de esta historia, cabello castaño, labios delgados y una sonrisa encantadora, una voz suave y un hijo, hace poco se graduó de kínder, pero en ese entonces todavía andaba en pañales, también una hermana, igual de hermosa, y una maravillosa familia, en esa casa se nota que hay amor. Si bien era inteligente su hermana lo es aún más.
Mientras todavía estaba en Santiago, la llamé mientras caminaba por Providencia, estaba solo y perdido y hablamos como media hora, después de eso no hablaríamos hasta que estuviera en Arica, de nuevo como a principios de febrero, antes de eso le había mandado un par de mensajes.
Una vez en Arica volvería a hablar, quería juntarme con ella y la Sandra para saber cómo estaban. En esa conversación me contaría que terminó con el pololo 30, que estaba mal, que había llorado mucho, era el padre de su hijo y su única pareja hasta ese momento, y estaba preocupada por su hijo.
Después volveríamos a wassapear 31(o como se escriba) un día en medio del festival de viña, estaba cantando Romeo Santos, yo estaba con mis compañeros conversando en la compañía y al mismo tiempo respondiendo sus mensajes; en un momento, no recuerdo cómo llegó el tema a nuestra conversación, pero le dije lo fuerte que era, lo buena madre y cuánto adoraba a su hijo, en fin, las cosas que veía de su persona, su yo interior, a lo cual ella reaccionó con una carita sonrojada y un gracias. De pronto caerían los tonos, un rescate vehicular, dejé de mandar mensajes y fuimos en el carro al rescate, un tipo curao 32habría colisionado con otro vehículo en un cruce, luego habría bajado del vehículo y corrió hasta tropezar con la cuneta y se rompió la cabeza al caer, fue complicado, pero una emergencia rápida. Al volver le escribiría pidiéndole disculpas por no contestar y explicándole lo que pasó, me respondió diciendo – cuenta, cuenta, qué pasó -.
No le insistiría en vernos ya que la Sandra estaba trabajando, eso sí hablamos una vez más, yo aún no me matriculaba en la U y creía que tenía una semana más, era un jueves recuerdo y me dijo que debía hacerlo a más tardar mañana, yo le dije —no importa, todavía tenemos la semana 0, aún hay tiempo—. A lo que ella respondió —esta es la semana 0—. Quedé helado, al cabo de un rato agregó —que pavo 33—. En pocas palabras tenía hasta mañana para matricularme, el problema es que las cosas con mi madre no estaban mejor, al final del año pasado nos habíamos cambiado de casa y si bien era más humilde, tenía 2 habitaciones, algo que la anterior no. La cosa es que peleados y todo fuimos a matricularme, mi madre aún no tenía trabajo, yo ya estaba pensado en congelar la carrera y encontrar laburo. Durante ese fin de semana (tal vez otro día) a la Cami se le enfermaría el hijo, yo solo le escribí —Si es la mitad de fuerte que tú, estará bien—.
Pasaría el fin de semana y tendría que ir a la U, veía muchas caras nuevas, demasiadas, bueno la razón es que éramos 2 cursos de la carrera y ya que se habían ido por ambos cursos varias personas, bueno nos juntaron. Se acuerdan de la mujer que me miró mientras me matriculaba el semestre anterior, sí, la del capítulo anterior, bueno ahí estaba, era del otro curso, ahora íbamos a ser compañeros. Su nombre Isabel, mismo nombre que la hermana de la Cami.
Читать дальше