• Пожаловаться

Nohelia Alfonso: Amar a la bestia

Здесь есть возможность читать онлайн «Nohelia Alfonso: Amar a la bestia» — ознакомительный отрывок электронной книги совершенно бесплатно, а после прочтения отрывка купить полную версию. В некоторых случаях присутствует краткое содержание. категория: unrecognised / на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале. Библиотека «Либ Кат» — LibCat.ru создана для любителей полистать хорошую книжку и предлагает широкий выбор жанров:

любовные романы фантастика и фэнтези приключения детективы и триллеры эротика документальные научные юмористические анекдоты о бизнесе проза детские сказки о религиии новинки православные старинные про компьютеры программирование на английском домоводство поэзия

Выбрав категорию по душе Вы сможете найти действительно стоящие книги и насладиться погружением в мир воображения, прочувствовать переживания героев или узнать для себя что-то новое, совершить внутреннее открытие. Подробная информация для ознакомления по текущему запросу представлена ниже:

Nohelia Alfonso Amar a la bestia

Amar a la bestia: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Amar a la bestia»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Una novela sobre la memoria, los secretos y las relaciones tóxicas.Cuando Mica recupera la consciencia después de dos años en coma tras un grave accidente, apenas recuerda nada de su vida. Y ni su hermana gemela ni su mejor amiga parecen querer ayudarla a salir de la madriguera en la que se encuentra. ¿Por qué tienen tanto miedo a que vuelva a ser la de antes?Una cerveza en el bar adecuado empieza a desenterrar de sus entumecidas neuronas los años de rock, de amistad, de rodar por los escenarios y las barras de León, de viejos amores corrosivos…Mica tendrá que reconstruir su identidad a través del espejo, luchando contra el reloj del Conejo Blanco, contra su psiquiatra y sus píldoras, contra la Reina Roja de su vida y contra las previsiones de su propio Galimatazo.¿Hasta qué punto nuestro cerebro activa el olvido como mecanismo de defensa? ¿Hasta dónde estamos dispuestos a llegar para descubrir la verdad? ¿Hasta cuándo se puede amar a la bestia?

Nohelia Alfonso: другие книги автора


Кто написал Amar a la bestia? Узнайте фамилию, как зовут автора книги и список всех его произведений по сериям.

Amar a la bestia — читать онлайн ознакомительный отрывок

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Amar a la bestia», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема

Шрифт:

Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Índice de contenido

1. Déjà vu

2. Knokin´on Heaven´s door

3. Painkiller

4. Celada

5. Fotos viejas

6. Donde habita el olvido Índice de contenido 1. Déjà vu 2. Knokin´on Heaven´s door 3. Painkiller 4. Celada 5. Fotos viejas 6. Donde habita el olvido 7. No podemos matar el tiempo sin herir la eternidad 8. Tu voz es como un sueño que no puedo situar 9. Cábalas 10. El Club de los 27 11. Panecillo integral 12. Inventario de tristezas 13. Locus amoenus 14. Estratega 15. Vampiros emocionales 16. Lady Pain 17. Nothing else matters 18. Cuerdas de acero Agradecimientos

7. No podemos matar el tiempo sin herir la eternidad Índice de contenido 1. Déjà vu 2. Knokin´on Heaven´s door 3. Painkiller 4. Celada 5. Fotos viejas 6. Donde habita el olvido Índice de contenido 1. Déjà vu 2. Knokin´on Heaven´s door 3. Painkiller 4. Celada 5. Fotos viejas 6. Donde habita el olvido 7. No podemos matar el tiempo sin herir la eternidad 8. Tu voz es como un sueño que no puedo situar 9. Cábalas 10. El Club de los 27 11. Panecillo integral 12. Inventario de tristezas 13. Locus amoenus 14. Estratega 15. Vampiros emocionales 16. Lady Pain 17. Nothing else matters 18. Cuerdas de acero Agradecimientos 7. No podemos matar el tiempo sin herir la eternidad 8. Tu voz es como un sueño que no puedo situar 9. Cábalas 10. El Club de los 27 11. Panecillo integral 12. Inventario de tristezas 13. Locus amoenus 14. Estratega 15. Vampiros emocionales 16. Lady Pain 17. Nothing else matters 18. Cuerdas de acero Agradecimientos

8. Tu voz es como un sueño que no puedo situar

9. Cábalas

10. El Club de los 27

11. Panecillo integral

12. Inventario de tristezas

13. Locus amoenus

14. Estratega

15. Vampiros emocionales

16. Lady Pain

17. Nothing else matters

18. Cuerdas de acero

Agradecimientos

Título original Amar a la bestia 2021 Nohelia Alfonso - фото 1

Título ori­gi­nal: Amar a la bestia

© 2021 Nohelia Alfonso

____________________

Diseño de cu­b­ier­ta y fo­to­mon­ta­je: Eva Olaya

___________________

1.ª edi­ción: marzo 2021

De­re­chos ex­clu­si­vos de edi­ción en es­pa­ñol re­ser­va­dos para todo el mundo:

© 2021: Edi­c­io­nes Ver­sá­til S.L.

Av. Dia­go­nal, 601 planta 8

08028 Bar­ce­lo­na

www.ed-ver­sa­til.com

____________________

Nin­gu­na parte de esta pu­bli­ca­ción, in­cl­ui­do el diseño de la cu­b­ier­ta, puede ser re­pro­du­ci­da, al­ma­ce­na­da o trans­mi­ti­da en manera alguna ni por ningún medio, ya sea elec­tró­ni­co, quí­mi­co, me­cá­ni­co, óptico, de gra­ba­ción o fo­to­co­p­ia, sin au­to­ri­za­ción es­cri­ta del editor.

1 Déjà vu Otra vez ese sueño O más bien pesadilla Me preguntaba si tenía - фото 2

1. Déjà vu

Otra vez ese sueño. O más bien pesadilla. Me preguntaba si tenía que ver con todas las drogas que el psiquiatra se afanaba en hacerme engullir desde el accidente, o si por el contrario, y a pesar de lo que todo el mundo intentaba negar, tenía algún tipo de significado transcendental que mi mente amnésica y desquiciada era incapaz de interpretar. Era demasiado frecuente y demasiado inquietante como para ignorarlo. Sobre todo porque el Conejo Blanco se me aparecía también cuando estaba despierta, y empezaba a ser difícil saber discernir entre el sueño y la realidad…

Además cantaba. ¡El condenado bicho cantaba! ¿Cómo iba a obviarlo con lo molesto que es que canturreen a tu alrededor cuando estás ocupada intentando recordar quién demonios eres? Tarareaba la misma melodía una y otra vez, tanto que hasta yo misma me sorprendía a veces mascullando aquel soniquete que, por cierto, nadie más identificaba. Maldito conejo cantautor… Yo obedecía al doctor Luján y me tragaba aquellas pastillas rosas cada vez que se me aparecía, pero el bichejo sabía cómo esquivar el efecto del litio. Era muy puntual. Acudía a mis sueños cada noche y frecuentaba mi compañía al caer la tarde. Pero cómo no iba a serlo, si llevaba ese reloj de bolsillo labrado siempre encima, como queriéndome decir que me diera prisa, vaya usted a saber para qué.

El tiempo… Cuando tienes amnesia el tiempo se convierte en algo insustancial, en una coordenada sin sentido por la que dejarse arrastrar. Yo ya llevaba un año en esa corriente de minutos, desde que desperté del coma, flotando en el agua mansa de la ausencia de autorreconocimiento, dejando que se desmigasen los relojes a mi paso. Ese océano temporal que me engullía me devolvía un reflejo que me era ajeno, alienándome hasta el punto de no saber en qué lado del mismo estaba. ¿Era yo la persona real o la muchacha pálida que temblaba en la superficie? ¿Estaba congelada, como un reflejo? ¿Quién vivía entonces mi vida al otro lado?

—Las alucinaciones son consecuencia de los daños en la parte frontal del cerebro, Micaela. Ya estamos trabajando para mejorar eso.

—Sí… con un buen colocón , ¿verdad? Tengo tanto sueño todo el día que creo que es el Conejo Blanco el que no sabe si estoy despierta o dormida y se me aparece cuando no toca, cuando no estoy soñando.

—Es una dosis fuerte, y los ansiolíticos provocan mucho sueño también…

—A él no le gusta verme así, cuando no me canta esa cancioncilla pegadiza me grita que despierte. Empiezo a tener problemas para saber cuándo estoy dormida… ¿Lo estoy ahora?

—No. Estás en la consulta, conmigo, ¿por qué? ¿Puedes verlo ahora?

—No —mentí—, ahora no.

Junto a la puerta de la aséptica sala, mi blanco y peludo compañero señalaba su precioso reloj dorado.

Así fue como se me apareció la primera vez, hace ya más de un año: de repente. Yo aún estaba recuperándome del catastrófico siniestro. Iba en silla de ruedas y padecía afasia. Por eso no salí corriendo ni pedí ayuda a gritos, era físicamente incapaz de avisar a mi hermana Melisa. Mientras ella me preparaba la cena, yo permanecía frente a la pantalla plana del salón, absorbiendo las ondas como un vegetal absorbe la luz. Era mi forma particular de hacer fotosíntesis mental. Clorofila televisiva. Y en esas estaba, en mi maceta con ruedas, cuando los contornos de una figura blancuzca empezaron a dibujarse junto a la puerta, ajustando su nitidez hasta llamar poderosamente mi atención y un amago de infarto. Al principio pensé que tanta telebasura me había destrozado el poco cerebro sano que me quedaba y pestañeé un par de veces, creyendo que se trataba de una ilusión óptica. Pero no, el Conejo Blanco que Lewis Carroll diseñó para su Alicia había salido del maldito país de las maravillas para venir al saloncito de un piso de estudiantes del barrio obrero de La Palomera. Sí. Todo muy lógico. Un animalillo de metro y medio con chaleco y reloj de bolsillo, de pie sobre sus patas traseras, en mi casa, mirándome. Definitivamente se me había ido la olla. Traté de llamar a Melisa, que hacía ruido de cazuelas al otro lado de la puerta de la cocina, pero pronunciar siquiera su nombre era algo que aún no había conseguido, pese a la rehabilitación. El hemisferio izquierdo de mi cerebro —el que controla el movimiento de la parte diestra y el habla— había quedado dañado a causa de un coágulo, y me había hecho perder por completo la movilidad de la mitad derecha del cuerpo, así que, al levantarme, caí hacia un lado, vencida por mi propio peso muerto y arrastrando conmigo la silla de ruedas. Debido al estrépito, mi hermana emergió de entre los vapores culinarios y acudió a levantarme del suelo.

Читать дальше
Тёмная тема

Шрифт:

Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Amar a la bestia»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Amar a la bestia» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё не прочитанные произведения.


José Luis Borrero González: Roa, el guerrillero de Antequera
Roa, el guerrillero de Antequera
José Luis Borrero González
Gonzalo Lezo De Córdoba: Salir vencidos o vencedores
Salir vencidos o vencedores
Gonzalo Lezo De Córdoba
Óscar Rossainz Carmona: Entre príncipe azul y bestia
Entre príncipe azul y bestia
Óscar Rossainz Carmona
Lidia Caro: Los años que no
Los años que no
Lidia Caro
Отзывы о книге «Amar a la bestia»

Обсуждение, отзывы о книге «Amar a la bestia» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.