Jessica Hart - Una Unión Irresistible

Здесь есть возможность читать онлайн «Jessica Hart - Una Unión Irresistible» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: Современные любовные романы, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Una Unión Irresistible: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Una Unión Irresistible»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Un deseo de Navidad, una proposición… ¡y una nueva vida!
Aquellas navidades, Sophie Beckwith tendría que ver al hombre que la había abandonado para casarse con su hermana. Sólo una persona podía ayudarla: su mejor amigo Bram. Bram había estado prometido con la hermana de Sophie, pero ahora pretendía demostrarles a los tortolitos que tanto Sophie como él los habían olvidado y se le ocurrió el plan perfecto para conseguirlo: pedirle a Sophie que se casara con él.
Era una locura, pero también era la solución a todos sus problemas. Además, sería todo fingido… ¿no? Pero a medida que se acercaba el día de la boda, los sentimientos de Sophie hacia Bram fueron cambiando y empezó a desear que todo fuera real.

Una Unión Irresistible — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Una Unión Irresistible», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

– Tenemos que organizar una fiesta -anunció.

Sophie sentía como si no tuviera huesos. Sobre todo en la zona de las rodillas. Afortunadamente, se habían sentado antes de que cayera al suelo desmayada.

– ¿Una fiesta?

– Melissa y Nick también querrán celebrar vuestro compromiso, claro. ¿Qué tal la semana que viene?

Sophie hizo un desesperado esfuerzo por sobreponerse. Tenía que olvidar el beso y concentrarse en lo que su madre estaba diciendo. ¿Qué estaba diciendo? Ah, sí, una fiesta de compromiso.

– ¿No podemos dejarlo para más tarde, mamá? Tengo que volver a Londres para recoger mis cosas y no sé cuándo podré venir.

– Pero tenemos un millón de cosas que hacer antes de la boda y no hay mucho tiempo antes de Navidad.

Sophie miró a su madre con un horrible presentimiento.

– ¿Qué tiene que ver eso?

Harriet apartó la mirada.

– Me he encontrado con el párroco esta tarde y resulta que el día veinticuatro por la mañana tiene la iglesia libre. Por supuesto, tendríais que ir a hablar con él vosotros mismos, pero le he pedido que no se comprometa con nadie más. Quizá podríais hablar con él mañana para confirmarlo…

– ¿Qué? -exclamó Sophie, tan enfadada que no encontraba palabras-. ¡Tú no tenías por qué hablar con el párroco, mamá! Acabamos de deciros hace cinco minutos que estamos comprometidos y… a lo mejor no queremos casamos por la iglesia.

– Tonterías. Claro que os casaréis por la iglesia -la interrumpió su madre-. Seguro que Molly también lo habría querido así. ¿Verdad, Bram?

Al ver a Sophie tan enfadada, él apretó su mano.

– Mi madre habría querido que nos casáramos por la iglesia, es verdad. Pero sólo han pasado unos meses desde su muerte y, en estas circunstancias, hemos decidido que queremos una boda discreta.

– Exactamente -asintió Sophie. Sí, a Bram se le daba mucho mejor manejar a su madre-. Y queremos organizaría nosotros mismos.

– Bueno, hija, si insistes… -Harriet puso cara de pena-. Pero ya sabes que tú no eres la persona más organizada del mundo y yo sólo quería ayudar. En fin, si no quieres que tenga nada que ver con tu boda… yo lo decía porque me hace tanta ilusión…

Horror. Su madre haciéndose la mártir era lo peor que podía pasar.

– Sólo decía, si me permites que te dé un consejo, que lo mejor es no dejarlo todo para el último momento. Se tarda mucho tiempo en organizar una boda.

– Lo sé, mamá. Pero acabamos de comprometernos. No hay ninguna razón para ponerse a organizar nada todavía.

– Y tampoco hay razón para no hacerlo -intervino su padre, de forma inesperada-. No es que acabéis de conoceros, precisamente. No me hizo mucha gracia que Melissa se casara cuando apenas conocía a Nick, pero con vosotros es diferente.

– Y una boda en Navidad es tan bonita -siguió Harriet, animada por el apoyo de su marido-. Piensa en lo romántica que sería, hija. La iglesia está preciosa en Navidad, con todas las luces y las flores de Pascua. Y sería maravilloso combinar la boda con el setenta cumpleaños de tu padre. ¿Verdad, Joe?

– Si eso es lo que quiere Sophie…

Sin saber qué decir, Sophie se volvió hacia Bram.

– Pues…

– La verdad es que suena bien -dijo él-, ¿Podemos pensárnoslo, Harriet?

– No lo penséis mucho. Sólo quedan seis semanas para Navidad y habrá que pensar en las invitaciones, en la ceremonia, el banquete, las flores… ah, y el vestido de novia. Se pueden tardar siglos en encontrar el vestido que una quiere -contestó su madre, mirando el reloj-. Ah, voy a ver cómo van las patatas. Os quedaréis a cenar, ¿no? Así podremos seguir haciendo planes.

– Es muy amable por tu parte, Harriet -dijo Bram, levantándose. Sophie estaba a su lado, aterrorizada-. Pero tenemos que volver a la granja.

– Bueno, en fin… si tenéis que iros.

Afortunadamente, sus padres parecían dar por sentado que Sophie iba a alojarse en casa de Bram.

– Supongo que tendréis que hablar de muchas cosas ^decía Harriet, mientras los acompaña a la puerta-. Mañana hablaremos. Ah, y voy a llamar a Melissa para ver cuándo podemos cenar todos juntos. Llamadme en cuanto hayáis decidido una fecha para la boda -siguió, mientras Sophie se ponía el abrigo y la bufanda-. Si queréis una boda sencilla, podríamos celebrar el banquete aquí mismo. Pero conozco una floristería en York que es una maravilla…

Sin dejar de hablar, los acompañó hasta el Land Rover, donde Bess los esperaba, impaciente.

Sophie dejó caer la cabeza y suspiró mientras se alejaban por el camino.

– Lo siento. Ya sabes cómo es mi madre.

– Podría haber sido peor.

– ¿Cómo?

– Podría haber aparecido con el certificado de matrimonio en la mano -contestó Bram.

Sophie levantó los ojos al cielo.

– Ay, por favor. Seguro que ahora se está lamentado por no haberlo pensado -dijo, riendo.

– Seguro que se habría presentado con Maggie Jackson.

– ¿Y el vestido? No me habría dejado casarme en vaqueros.

– Te habría puesto el vestido de Melissa.

– ¡SÍ no tuviera tres tallas más que ella, seguro!

Era asombroso cómo la risa aliviaba la tensión. Afortunadamente.

– En serio, Bram, no sabes cómo lamento todo esto. Espero que no te importe que duerma en tu casa, pero no habría podido soportar quedarme con mis padres esta noche… haciendo planes para la boda. Lo que me ha sorprendido es que les pareciera tan natural que me quedase en tu casa.

– Yo me alegro de que hayan creído lo del compromiso. Pensé que sospecharían algo.

Sus padres los habían visto besándose y, naturalmente, los habían creído una pareja enamorada porque eso era lo que querían creer. Pero sería mejor no pensar en el beso, se dijo Sophie. Ese beso tan extraño que la había hecho suspirar… Era tan agradable que Bram la tomase por la cintura, sentir el peso de su mano en la espalda, el calor de sus labios… tan perdida estaba en la evocación que dejó escapar un gemido.

– ¿Pasa algo?

– ¿En? No, nada, no me pasa nada.

Bram no volvió a preguntar hasta que llegaron a la granja. Una vez en la cocina, sacó una botella de vino y buscó algo de comer en la nevera.

– ¿Sabes una cosa? Estás un poco rara. ¿Te ocurre algo?

– No, qué va -contestó Sophie, deseando poder apartar de sí el recuerdo de aquel beso. Pero no podía. Todo lo contrario. Mientras Bram estaba mirando en la nevera, se fijó en su espalda, en sus fuertes manos mientras abría la botella de vino, en su pausada forma de moverse por la cocina.

– Te veo muy preocupada -insistió él.

– Estaba pensando que hemos sido demasiado convincentes. Es como si no pudiéramos pisar el freno… la conversación que tuvimos el otro día se ha convertido en una pesadilla de cenas, bodas, iglesias, vestidos de novia… Ya sabes cómo es mi madre. Como empiece a organizar la boda, será imposible pararla. ¡Si no tenemos cuidado acabará casándonos, Bram!

Capítulo 6

BRAM puso un plato de queso sobre la mesa y se sentó frente a Sophie para mirarla a los ojos.

– Pues quizá deberíamos dejar que siguiera adelante con los planes.

– ¿Qué quieres decir?

– Que deberíamos pensar seriamente en casarnos.

– Pero ya hablamos de esto la semana pasada, Bram -contestó Sophie, apartando la mirada de esos ojos azules que conocía tan bien y que, de repente, le parecían los de otro hombre.

– Pues deberíamos volver a hablar. Yo estoy dispuesto a olvidar el pasado y a empezar de nuevo, Sophie. Y creo que seríamos felices juntos. Podríamos vivir y trabajar en la granja, tú podrías seguir haciendo objetos de cerámica en el viejo granero… Al menos sabemos que nos llevamos bien. Y seguiríamos siendo amigos, como lo somos ahora.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Una Unión Irresistible»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Una Unión Irresistible» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «Una Unión Irresistible»

Обсуждение, отзывы о книге «Una Unión Irresistible» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x