Kate Hoffmann - La aventura del deseo

Здесь есть возможность читать онлайн «Kate Hoffmann - La aventura del deseo» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: Современные любовные романы, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

La aventura del deseo: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «La aventura del deseo»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

LO ÚNICO QUE PUEDE VENCER A UN QUINN ES UNA MUJER
El agente Connor Quinn estaba acostumbrado a cuidar de todo el mundo excepto de sí mismo. Cuando le encargaron custodiar a Olivia Farrell, se dio cuenta de que el que más necesitaba protección era él…
Olivia Farrell estaba bajo la protección de la policía, pero ella creía que no lo necesitaba… Hasta que conoció al agente que iba a custodiarla: el sexy Connor Quinn. La sonrisa de aquel policía le cortaba la respiración, y su oscura mirada le provocaba imágenes de noches llenas de pasión. De pronto, Olivia se dio cuenta de que su vida no era lo único que estaba en peligro…

La aventura del deseo — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «La aventura del deseo», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

– Lo siento.

– No tienes por qué -replicó Conor-, es algo bastante común. Tú tienes miedo, yo te protejo… Ocurre constantemente.

– Entonces, ¿te ha ocurrido antes?

– No, nunca.

– Bueno, entonces eso me hace sentir mucho mejor -dijo ella, levantándose del sofá-. Voy a ver si puedo encontrar una cama. Despiértame cuando sea hora de marcharnos.

Caminó por un largo pasillo, deseando poner tanta distancia como fuera posible entre Conor y ella. Cuando finalmente alcanzó la puerta de un dormitorio, la cerró tras ella y respiró aliviada. Todo parecía tan irreal como si se estuviera viendo en una película. ¿Qué le había pasado a su vida? Solo unos pocos meses antes había estado tan ocupada con su trabajo, que no había encontrado tiempo para ocuparse de su patética vida social.

En aquel momento, estaba en compañía del hombre más intrigante y guapo que había conocido nunca. Debería estar encantada, pero, cuanto más conocía al detective Quinn, más empezaba a creer que Red Keenan no era quien suponía un peligro para ella. Era Conor Quinn.

Conor contemplaba el puerto de Provincetown, vigilando el horizonte para captar cualquier señal de Brendan y Dylan. El sol estaba empezando a salir y el cielo estaba más despejado. Las estrellas eran visibles a través de los claros que se veían en las nubes, pero el viento había vuelto a soplar con fuerza. El pequeño pueblo estaba despertándose y Conor tenía miedo de que todavía siguieran esperando cuando saliera el sol.

Había aparcado el todoterreno entre unas casetas de pescadores cerca del puerto, lo que le daba una buena visión del agua y de todos los que se acercaran a la ciudad.

– Maldita sea, Brendan, ¿dónde estás?

– ¿Y si no viene? -preguntó Olivia.

– Vendrá -afirmó Conor. Habría deseado tocarla, tomarla entre sus brazos, pero no volvería a hacerlo nunca más. No pensaba consentir que ella le nublara la concentración y los pusiera a los dos en peligre.)-. Lo he llamado y vendrá.

Sintió que ella lo miraba, buscando la cercanía de la que habían disfrutado horas antes. Como no la encontró, se hundió en sí misma y se rodeó con los brazos, tratando de protegerse así del frío de la mañana.

– Si no llega dentro de diez minutos, creo que deberíamos marcharnos -dijo Olivia.

– ¡Yo decidiré si nos marchamos y cuándo lo hacemos!

– Lo único que digo es que…

– ¡No necesito tu opinión! -le espetó él, arrepintiéndose en el momento en que aquellas palabras le salieron de los labios.

– Pareces olvidarte de que es mi vida. Quieren matarme a mí, no a ti. Al menos debería tener voz y voto en la…

– Y si te niegas a escucharme, tal vez yo me vea envuelto en el fuego cruzado, así que, ya ves, no solo es tu vida, sino la mía también. Estamos juntos en esto.

Al menos, hasta que consiguiera que Olivia estuviera segura. En ese momento, pensaba llamar a su teniente para hacer que otro agente se ocupara de ella. Se aseguraría que ese hombre fuera digno de confianza, por supuesto, y ahí se acabaría todo. Prefería enfrentarse a un año de trabajo en comisaría que arriesgarse a sucumbir a la tentación del cuerpo de Olivia Farrell.

– Se acerca un barco -comentó ella, de repente, interrumpiendo sus pensamientos-.

¿Lo ves?

Conor oyó el característico sonido de los motores diesel. Como por arte de magia, el barco de su padre salió de la oscuridad. Conor nunca se había preocupado por aquel barco, ya que, en su opinión, había sido la causa de la separación de sus padres y lo había obligado a él a crecer demasiado rápido. Sin embargo, en aquel momento, se alegró muchísimo de verlo.

El barco maniobró entre los estrechos muelles y se dirigió hasta el lugar donde estaban las bombas de combustible.

– Venga, ahora podemos marcharnos. Conor salió del todoterreno y lo rodeó para ayudarla a salir a ella. La tomó de la mano y bajaron tranquilamente hacia el puerto. Conor le protegía la espalda y miraba cuidadosamente a su alrededor. Cuando llegaron por fin al puerto, le colocó la mano en la espalda, animándola a que continuara.

Brendan no hizo ninguna pregunta. Simplemente extendió la mano y agarró a Olivia. Cuando ella se hubo acomodado, Conor subió rápidamente y enseguida se vieron de nuevo engullidos por la oscuridad. De momento, estaban a salvo de Red Keenan.

Las luces de posición del barco casi no eran visibles por la pesada bruma que había sobre la bahía, pero el agua no estaba tan picada como Conor había esperado. Miró a Olivia, pero ella estaba contemplando el horizonte; la brisa le alborotaba el pelo y el frío hacía que sus mejillas se sonrojaran.

No se sentiría a salvo hasta que estuvieran lejos de allí, en un lugar cálido y seguro. No estaba seguro de dónde podrían ir. Su apartamento era un lugar demasiado evidente y probablemente no estaba lo suficientemente ordenado como para recibir huéspedes.

Miró hacia la cabina y vio que sus hermanos estaban hablando tranquilamente. Cuando Dylan se dio cuenta de que Conor los estaba mirando, le dedicó una lasciva sonrisa y emitió, un silbido, señalando con la cabeza el lugar en el que Olivia estaba. Conor sacudió la cabeza y se reunió con sus hermanos.

– Ni lo pienses -dijo cuando entraba en el interior de la cabina.

– ¿Ni piense qué? -susurró Dylan.

– En lo que siempre estás pensando cuando ves a una mujer hermosa.

– Ay, hermano. Evidentemente, una mujer como esta está desperdiciada contigo -comentó Dylan.

– Es una mujer muy bella, ¿verdad? -añadió Brendan.

Conor gruñó y se preguntó si sus hermanos pequeños crecerían alguna vez. ¿Se darían cuenta alguna vez que la vida era algo más que una larga sucesión de mujeres saliendo de sus dormitorios?

– Vayamos a Hull -les ordenó-. Eso es todo lo que necesito de vosotros en estos momentos.

Volvió a salir fuera de la cabina y fue a reunirse con Olivia. Parecía estar algo mareada y completamente agotada. Suavemente le tomó las manos heladas y la llevó hasta el camarote principal. Brendan lo había caldeado y las luces brillaban suavemente en su espacio interior. Conor vertió café de un enorme termo en una taza y se la ofreció a Olivia.

– ¿Te encuentras bien?

Ella se sentó, muy lentamente, tratando de compensar el movimiento del barco.

– Te acostumbrarás muy pronto al movimiento. Además, cuando hayamos atravesado la bahía, se calmará. Toma un poco de café.

– Aquí se está muy caliente -susurró ella, tras tomar un sorbo del café-. Hace dos días que no entro en calor. ¿Cómo puedes ser tan brusco un momento y tan amable al siguiente? -añadió, interrogándolo con la mirada.

– Es mi trabajo -respondió él, sirviéndose también una taza.

– ¿Eso es todo?

– ¿Qué otra cosa podría ser?

– Entonces, supongo que debería disculparme, por lo de antes. No quería… dejarme llevar. Es solo que últimamente he estado un poco nerviosa y pensé que tú…

– No importa…

Conor no iba a decirle que deseaba besarla tanto como ella a él. No iba a confesarle lo mucho que había tenido que controlarse para apartarse, para resistirse. Nada le habría gustado más que olvidarse de todas sus responsabilidades y dejarse llevar, dejar a un lado la cautela y acostarse con ella. Sin embargo, no pensaba darle nada más a su jefe para que pudiera utilizarlo contra él. Una aventura con un testigo era más de lo necesario para costarle la placa.

– ¿Dónde vamos ahora? -preguntó ella.

– Volvemos a Boston… o a Hull, para ser más preciso. Después de eso, no sé.

– Si fueron capaces de encontrarme en la casa de Cape Cod, no creo que importe dónde me esconda. Me encontrará de todos modos.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «La aventura del deseo»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «La aventura del deseo» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Jill Shalvis - La aventura del amor
Jill Shalvis
libcat.ru: книга без обложки
Kate Hoffmann
Kate Hoffmann - Ella es mi sueño
Kate Hoffmann
Kate Hoffmann - El sabor del pecado
Kate Hoffmann
Kate Hoffmann - Declan
Kate Hoffmann
Kate Hoffmann - El Elixir del amor
Kate Hoffmann
Kate Hoffmann - Warm & Willing
Kate Hoffmann
Kate Hoffmann - Legally Mine
Kate Hoffmann
Отзывы о книге «La aventura del deseo»

Обсуждение, отзывы о книге «La aventura del deseo» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x