George Effinger - Cuando falla la gravedad

Здесь есть возможность читать онлайн «George Effinger - Cuando falla la gravedad» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Город: Madrid, Год выпуска: 1989, ISBN: 1989, Издательство: Martínez Roca, Жанр: Киберпанк, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Cuando falla la gravedad: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Cuando falla la gravedad»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

El Budayén, los bajos fondos de una ciudad árabe anónima, está construido al lado del cementerio, y quien se interna en sus callejones lo hace consciente del peligro que corre: ni sus habitantes —prostitutas, proxenetas y traficantes de drogas— ni la policía se preocupan demasiado si un desconocido aparece acuchillado y tirado en la esquina.
Tal es el ambiente en el que se ha criado Marîd Audran, un hombretón que nunca ha necesitado llevar armas y que es respetado en su independencia.
Pero nadie podría haber imaginado la pesadilla en la que se convertiría su vida después de que un extraño muriera asesinado por alguien conectado a un módulo de James Bond…
Una novela vertiginosa, en la que se dan cita los logros de la informática, la novela negra y la ciencia ficción.

Cuando falla la gravedad — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Cuando falla la gravedad», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

—¿Qué has estado haciendo, novio? —me preguntó. —Esta noche nada, Frenchy —le dije.

—Tu chica se lo está montando muy bien ella sola.

—Eso es bueno, porque he perdido hasta el último fíq por un agujero de mi bolsillo.

Frenchy me miró de reojo y se fijó en mi galabiyya.

—Esta prenda no tiene bolsillos, mon noraf.

—Fue hace unos días, Frenchy —dije, solemne —. Desde entonces, vivimos de amor.

Yasmin tenía conectado algún moddy de velocidad orbital y su baile era digno de verse. Todos los clientes olvidaron sus bebidas en las mesas, y las otras chicas las manos en sus regazos, y todos contemplaron a Yasmin.

Frenchy sonrió, sabía que yo nunca estaba tan arruinado como pretendía.

—El negocio va mal —dijo escupiendo en una pequeña taza de cristal.

A Frenchy el negocio siempre le va mal. Nadie habla jamás de prosperidad en la «Calle», da mala suerte.

—Oye, tengo que decirle algo importante a Yasmin cuando termine su número.

Frenchy sacudió la cabeza.

—Se trabaja a ese pavo de allí, el del fez. Espera a que le deje seco, entonces podrás hablar con ella todo lo que quieras. Si te esperas a que el pavo se vaya, haré que alguien ocupe su turno en escena.

—Alabado sea Alá —dije—. ¿Puedo invitarte a una copa?

Me sonrió.

—Pide dos. Piensa que una es para mí y otra para ti. Bébete las dos. Ya no puedo soportar el género.

Se tocó el vientre e hizo una mueca amarga, luego se levantó y paseó por el local: saludaba a los clientes y les susurraba algunas palabras al oído de las chicas. Pedí dos bebidas a Dalia, la pequeña, cara redonda y animada chica de la barra del club de Frenchy. Conocía a Dalia desde hacía años. Dalia, Frenchy y Chiriga componían un trío prometedor de la «Calle» cuando ésta era sólo un camino de cabras que atravesaba el Budayén de uno a otro extremo. Antes de que el resto de la ciudad decidiera, con razón, amurallarnos e instalar el cementerio.

Cuando Yasmin acabó de bailar, le dedicaron un largo y fuerte aplauso. Su bote de propinas se llenó con rapidez y luego se apresuró a volver con el pavo enamorado, antes de que otra puta se lo robara. Yasmin me dio un fugaz y afectivo pellizco en el culo al pasar junto a mí.

La observé durante hora y media reírse y hablar y abrazar a aquel bastardo bizco, hijo de una perra amarilla. Su dinero se agotó y tanto él como Yasmin parecieron entristecerse. Su asunto había tenido un final prematuro. Se despidieron con cariño, casi con pasión, y prometieron que nunca olvidarían esa tarde feliz. Cada vez que veía a uno de esos malditos capullos magreando a Yasmin —o a cualquiera de las otras chicas—, me acordaba de los hombres anónimos que manoseaban a mi madre. De eso hacía mucho tiempo, pero mi memoria funciona demasiado bien para ciertas cosas. Miré a Yasmin y me dije que aquello era sólo un trabajo; pero no podía evitar el amargo sentimiento de asco que surgía de mis entrañas y me daban ganas de empezar a romper cosas. Vino corriendo junto a mí, empapada en sudor.

—¡Creí que ese hijo de puta no iba a soltarme nunca! —suspiró. —Es tu encantadora presencia —dije con amargura—. Es tu turbadora conversación. Es la fuerte cerveza de Frenchy.

—Sí —repuso Yasmin, molesta por mi fastidio—, tienes razón. —He de hablar contigo.

Yasmin me miró y respiró a fondo. Enjugó su rostro con una servilleta limpia de la barra. Supongo que debí parecerle extrañamente sombrío. De cualquier modo, le relaté los acontecimientos de la tarde: mi segunda cita con Friedlander Bey, nuestras —es decir, sus— conclusiones y cómo había fracasado mi intento de impresionar al teniente Okking. Cuando acabé, hubo un turbador silencio a mi alrededor.

—¿Vas a hacerlo? —preguntó Frenchy.

No había notado su regreso. No me había dado cuenta de que había estado escuchando furtivamente, pero era su local y nadie conocía sus recodos mejor que él.

—¿Vas a modificarte el cerebro? —me preguntó Yasmin sin aliento. La idea le pareció muy emocionante. Excitante, ya sabéis a lo que me refiero.

—Estás loco si lo permites —dijo Dalia. Ésta era lo más genuinamente conservador que se podía encontrar en la «Calle»—. Mira lo que hace a la gente.

—¿Qué hace a la gente? —gritó Yasmin, enfadada, mientras tocaba su moddy.

—Oh, lo siento —dio Dalia, y se fue a limpiar una imaginaria cerveza derramada, en el extremo más alejado de la barra.

—Piensa en todas las cosas que podríamos hacer juntos —dijo Yasmin, soñadora.

—Quizá así no soy lo bastante bueno para ti —repliqué, algo herido.

Su semblante se entristeció.

—Marîd, no se trata de eso. Sólo que…

—Es tu problema —dijo Frenchy—, y a mí no me incumbe. Me voy a la trastienda a contar el dinero de esta noche. No me ocupará mucho tiempo.

Desapareció tras una raída cortina dorada que servía de frágil barrera al vestuario y a su oficina.

—Es irreversible —dije—, una vez hecho, hecho está. No se puede retroceder.

—¿Alguna vez me has oído decir que quería arrancarme los cables?—me preguntó Yasmin.

—No —admití.

Era la irrevocabilidad lo que me irritaba.

—No me he arrepentido ni por un instante, y tampoco conozco a nadie que le haya ocurrido.

Me humedecí los labios.

—Tú no entiendes…

No pude terminar mi argumentación. Ni expresar qué era lo que ella no entendía.

—Sólo estás asustado —dijo.

—Sí —respondí.

Ése era un buen principio.

—«Medio Hajj» tiene el cerebro preparado, y no es ni la mitad de hombre que tú.

—Y todo lo que ha conseguido es mancharlo todo con la sangre de Sonny. No se necesitan moddies para comportarse como un loco, puedo hacerlo yo solo.

De repente, una mirada soñadora y fantasiosa brilló en sus ojos. Sabía que se le había ocurrido algo fascinante, y que eso significaba malas noticias para mí.

—Oh, Alá y la Virgen María en la habitación de un hotel —dijo bajito. Creo que era la blasfemia favorita de su padre—. Es tal como dijo el hexagrama.

—El hexagrama.

Yo había olvidado ese asunto del / Ching al instante de que Yasmin acabara de explicármelo.

—¿Recuerdas lo que dijo de que no tuvieras miedo de atravesar las grandes aguas?

—Sí. ¿Qué grandes aguas?

—Las grandes aguas representan algún cambio importante en tu vida. Modificar tu cerebro, por ejemplo.

—Ah. Y dijo que encontraría al gran hombre. Ya lo he encontrado, dos veces.

—Dijo que debías esperar tres días antes de empezar y tres días antes de completarlo.

Conté rápido: viernes, sábado, domingo. El lunes me iban a hacer eso, después de tres días.

—¡Oh, demonios! —murmuré.

—Y dijo que nadie te creería, que te mantuvieras firme en la adversidad y que no sirvieras ni a reyes ni a príncipes, sino a fines más elevados. Eso es, Marîd.

Me besó y me sentí enfermo. Ahora no había forma de escapar a la cirugía, a no ser que huyera y empezara una nueva vida en algún otro país, espantando a las cabras y las ovejas a mi alrededor y comiendo unos cuantos higos cada dos días para subsistir, como los demás fellahin.

—Soy un héroe, Yasmin —dije—,, y, a veces, los héroes tenemos asuntos secretos que atender. He de irme.

La besé tres o cuatro veces, pellizqué su pezón derecho para que me diera suerte y me levanté. Mientras salía de Frenchy, di una palmada al culo de Indihar, que se volvió hacia mí y me sonrió. Me despedí de Dalia. Y simulé que Blanca ni siquiera existía.

Caminé por la «Calle» hasta el Silver Palm, sólo para ver qué hacía la gente y qué ocurriría. Mahmud y Jacques estaban sentados a una mesa, tomaban café y mojaban hummus en él con pan de pita. «Medio Hajj» no estaba allí, tal vez se encontrara excitándose con gigantescos picapedreros heterosexuales, por gusto. Me senté con mis amigos.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Cuando falla la gravedad»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Cuando falla la gravedad» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «Cuando falla la gravedad»

Обсуждение, отзывы о книге «Cuando falla la gravedad» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x