Michael Connelly - Llamada Perdida

Здесь есть возможность читать онлайн «Michael Connelly - Llamada Perdida» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: Триллер, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Llamada Perdida: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Llamada Perdida»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Pierce es un investigador de informática molecular volcado en un estudio que podría revolucionar el mundo de la medicina. Su obsesiva dedicación al trabajo ha repercutido en su vida privada, dando al traste con su relación con Nicole. tras abandonar la vivienda que compartía con ella, Pierce se instala en un nuevo apartamento con vistas a la playa de Santa Mónica. Allí empieza a recibir extrañas llamadas telefónicas de hombres que buscan a una tal Lilly. Movido por la curiosidad, Pierce decide investigar quién es esa mujer y descubre su anuncio en L.A. Darlings, una web donde ofrecía sus servicios como chica de compañía. La obsesión de Pierce le arrastra al oscuro mundo del sexo en Internet, un ámbito desconocido para él y que no tardará en convertirse en una pesadilla.
En Llamada perdida, Connelly sustituye a Harry Bosch – el protagonista que le ha aportado fama mundial – por Henry Pierce, cuya curiosidad sirve de motor para abordar, desde el suspense, dos temas de gran actualidad: el sexo online y las nuevas tecnologías científicas.
«Connelly sabe jugar diabólicamente con los lectores. El resultado es esta novela que cuenta con un suspense al más puro estilo Hitchcock.» – Kirkus Reviews

Llamada Perdida — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Llamada Perdida», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Otra pausa.

– Henry Pierce, el buen samaritano. El eterno rescatador de putas desaparecidas y mascotas perdidas.

Pierce sintió que se ruborizaba.

– Está de muy buen humor hoy, Bob -dijo Langwiser con sequedad-. Se ríe mucho últimamente, ¿no?

– Henry Pierce es el bufón, las historias que cuenta…

– Bueno, por eso lo llamaba. No habrá más historias de Henry, Bob. Yo lo represento y no va a volver a hablar con usted. Desaprovechó su oportunidad.

Pierce miró a Langwiser y ella le guiñó un ojo.

– No desaproveché nada-protestó Renner-. Cuando quiera empezar a explicarme la historia completa y verdadera. Aquí estoy. De lo contrario…

– Mire, detective, está más interesado en arremeter contra mi cliente que en tratar de entender lo que ocurrió de verdad. Esto tiene que detenerse. Ahora Henry Pierce está fuera de su lazo. Y otra cosa, si trata de llevar esto a juicio voy a meterle por donde usted sabe ese truquito de las dos grabadoras.

– Le dije que estaba grabando -protestó Renner-. Le leí sus derechos y él dijo que los había entendido. Es todo lo que se me exige. No hice nada ilegal durante ese interrogatorio voluntario.

– Tal vez no per se, Bob, pero a los jueces y los jurados no les gusta que la poli engañe a la gente. Les gusta el juego limpio.

Esta vez hubo una larga pausa de Renner y Pierce ya comenzaba a pensar que Langwiser estaba yendo demasiado lejos, que tal vez estaba empujando al detective a buscar una acusación contra él por simple rabia o resentimiento.

– De verdad ha cruzado la línea, ¿eh? -dijo finalmente Renner-. Espero que sea feliz allí.

– Bueno, si sólo tengo clientes como Henry Pierce, gente que estaba tratando de hacer un bien, entonces lo seré.

– ¿Un bien? Me pregunto si Lucy LaPorte cree que lo que hizo fue un bien.

– ¿La ha encontrado? -espetó Pierce.

Langwiser inmediatamente alzó la mano para pedirle que callara.

– ¿Está ahí el señor Pierce? No sabía que estaba escuchando, Janis. Hablando de trucos, ha sido bonito por su parte que me lo dijera.

– No tenía que hacerlo.

– Y yo no tenía que hablarle de la segunda grabadora después de que le advertí que la conversación estaba siendo grabada. Así que tráguese usted ésa. He de irme.

– Espere. ¿Ha encontrado a Lucy LaPorte?

– Eso es un asunto policial oficial, señora. Usted se queda en su lazo y yo me quedo en el mío. Adiós.

Renner colgó y Langwiser cerró el teléfono.

– Le pedí que no dijera nada.

– Lo siento. Es que he estado tratando de localizarla desde el domingo. Ojalá supiera dónde está y si está bien o necesita ayuda. Si algo le pasa será culpa mía.

«Ya estoy otra vez -pensó-. Encontrándome culpable de cosas, ofreciendo reconocimiento público de culpabilidad.»

Langwiser no pareció advertirlo. Estaba guardando su teléfono y su libreta.

– Haré algunas llamadas. Conozco gente en Pacífico que es un poco más cooperadora que el detective Renner. Como su jefe, por ejemplo.

– ¿Me llamará en cuanto descubra algo?

– Tengo sus teléfonos. Mientras tanto manténgase al margen de todo esto. Con un poco de suerte esta llamada asustará a Renner por el momento, quizá se piense dos veces sus movimientos. Todavía no está a salvo, Henry. Creo que está casi fuera de peligro, pero podrían ocurrir otras cosas. Mantenga la prudencia y permanezca alejado.

– De acuerdo, lo haré.

– Y la próxima vez que venga el médico consiga una lista de los fármacos específicos que le habían puesto cuando Renner lo grabó.

– De acuerdo.

– ¿Sabe cuándo le van a dar el alta?

– Supongo que en cualquier momento.

Pierce miró el reloj. Llevaba casi dos horas esperando que el doctor Hansen le firmara el alta.

Miró a Langwiser. Ella parecía lista para irse, pero lo estaba mirando como si quisiera preguntarle algo y no supiera cómo hacerlo.

– ¿Qué?

– No lo sé. Estaba pensando que había un salto muy grande en su razonamiento. Me refiero a cuando usted era niño y pensaba que su padrastro fue la razón de que su hermana se fuera.

Pierce no dijo nada.

– ¿Hay algo más que quiera contarme al respecto?

Pierce levantó la mirada hacia la pantalla apagada de la televisión y no vio nada allí. Negó con la cabeza.

– No, eso es todo.

Dudaba de que la hubiera convencido. Suponía que los abogados defensores trataban con mentirosos por rutina y eran tan expertos en captar las sutilezas del movimiento ocular y las inflexiones de voz como las máquinas diseñadas a tal fin. Pero Langwiser se limitó a asentir con la cabeza y lo dejó estar.

– Bueno, he de irme. Tengo una comparecencia en el centro.

– De acuerdo. Gracias por venir a verme aquí. Ha sido un detalle.

– Es parte del servicio. Haré algunas llamadas desde el coche y le contaré lo que averigüe de Lucy LaPorte o cualquier otra cosa. Pero mientras tanto es necesario que se mantenga al margen de esto. ¿De acuerdo? Vuelva a trabajar.

Pierce levantó los brazos en ademán de rendición.

– He terminado.

Ella sonrió profesionalmente y salió de la habitación.

Pierce cogió el teléfono de la barandilla de la cama y estaba marcando el número de Cody Zeller cuando Nicole James entró en la habitación. Volvió a dejar el teléfono en su sitio.

Nicole había quedado en pasar a buscar a Pierce para llevarlo a casa después de que el doctor Hansen le diera el alta. Aunque no dijo nada, la expresión de Nicole reveló dolor al examinar el rostro herido de Pierce. Lo había visitado con frecuencia durante su estancia en el hospital, pero al parecer no lograba acostumbrarse a ver la cremallera de puntos.

De hecho, Pierce había tomado sus malas caras y murmullos de compasión como una buena señal. Si volvían juntos todo el episodio habría valido la pena.

– Pobrecito -dijo ella, dándole unos golpecitos en la mejilla-. ¿Cómo te encuentras?

– Bastante bien -contestó Pierce-. Pero todavía estoy esperando que el médico me dé el alta. Ya hace casi dos horas.

– Voy a salir a averiguar qué pasa. -Ella volvió a la puerta, pero miró de nuevo a Pierce-. ¿Quién era esa mujer?

– ¿Qué mujer?

– La que acaba de salir.

– Ah, es mi abogada. Kaz me la consiguió.

– ¿Para qué la necesitas a ella si tienes a Kaz?

– Ella es una abogada defensora penal.

Nicole se apartó de la puerta y se acercó a la cama.

– ¿Abogada defensora penal? Henry, la gente normalmente no necesita abogados por que le den un número equivocado. ¿Qué está pasando?

Pierce se encogió de hombros.

– Ya no lo sé. Me metí en algo y ahora sólo intento salir de una pieza. Deja que te pregunte algo.

Pierce se levantó de la cama y caminó hasta ella. Primero tuvo problemas de equilibrio, pero enseguida se sintió bien. Tocó suavemente los antebrazos y las manos de Nicole. En el rostro de ella se dibujó una expresión de sospecha.

– ¿Qué?

– Cuando salgamos de aquí, ¿adonde me llevarás?

– Te lo he dicho, Henry, te llevaré a casa. A tu casa.

La decepción de Pierce fue visible a pesar del mapa de puntos y su hinchazón.

– Henry, acordamos que probaríamos esto. Así que vamos a probar.

– Sólo pensé…

No terminó. No sabía exactamente qué había pensado o cómo ponerlo en palabras.

– Veo que piensas que lo que nos pasó ocurrió muy deprisa -dijo ella-. Y que puede arreglarse deprisa. -Ella se volvió y se encaminó de nuevo a la puerta.

– Y me equivoco.

Ella volvió a mirarlo.

– Meses, Henry, y lo sabes. Tal vez más. No hemos estado bien juntos en mucho, mucho tiempo.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Llamada Perdida»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Llamada Perdida» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Michael Connelly - The Wrong Side of Goodbye
Michael Connelly
Michael Connelly - Murder in Vegas
Michael Connelly
Michael Connelly - The Crossing
Michael Connelly
Michael Connelly - The Drop
Michael Connelly
Michael Connelly - The Fifth Witness
Michael Connelly
Michael Connelly - Nueve Dragones
Michael Connelly
Michael Connelly - Cauces De Maldad
Michael Connelly
Michael Connelly - Cmentarzysko
Michael Connelly
Michael Connelly - Luz Perdida
Michael Connelly
Michael Connelly - The Scarecrow
Michael Connelly
Отзывы о книге «Llamada Perdida»

Обсуждение, отзывы о книге «Llamada Perdida» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x