Dennis Lehane - Rio Mistico

Здесь есть возможность читать онлайн «Dennis Lehane - Rio Mistico» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: Триллер, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Rio Mistico: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Rio Mistico»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Jimmy, Dave y Sean crecieron juntos en la sección peligrosa de Boston. Veinticinco años después vuelven a reunirse, cuando la hija de 19 años de Jimmy es brutalmente asesinada. Sean, que ahora es policía, es asignado para resolver el caso. Además de desenredar este crimen, Sean deberá estar pendiente de su amigo Jimmy, quien busca vengarse del asesino de su hija. Conectado al crimen por una serie de circunstancias, Dave se ve obligado a enfrentarse con los demonios de su propio pasado. A medida que la investigación se concentra alrededor de estos tres amigos, se despliega una siniestra historia, que tiene que ver con la amistad, la familia y la inocencia perdida demasiado pronto.

Rio Mistico — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Rio Mistico», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Con todo, no dejaba de darle vueltas al asunto y a la hora en la que habían pasado los hechos. Dave le había contado que se encontraba en el Last Drop. Según parecía, había dicho una mentira a la policía. Katie fue asesinada entre las dos y las tres de la mañana. Dave había regresado a casa a las tres y diez, cubierto de sangre ajena, y le había contado una historia muy poco convincente para justificar toda aquella sangre.

Ésa era la más sorprendente de las coincidencias: a Katie la habían asesinado la misma noche en que Dave había regresado a casa cubierto de sangre.

Si no fuera su esposa, ¿dudaría siquiera de la conclusión a la que había llegado?

Celeste volvió a inclinarse hacia delante, haciendo un esfuerzo por no vomitar y por apartar la voz interna que no cesaba de susurrarle al oído:

«Dave ha matado a Katie. Santo cielo. Dave ha matado a Katie».

«¡Por el amor Dios! Dave ha matado a Katie, y yo me quiero morir.»

– Entonces, ¿habéis descartado a Bobby y a Roman como sospechosos? -preguntó Jimmy.

Sean negó con la cabeza y respondió:

– Del todo, no. Cabe la posibilidad de que contrataran a alguien para que lo hiciera.

– Sin embargo -apuntó Annabeth-, por la expresión de su rostro creo que no lo consideran muy probable.

– Así es, señora Marcus.

– ¿Tienen algún otro sospechoso? -preguntó Jimmy.

Whitey y Sean intercambiaron una mirada, y en ese momento Dave entró en la cocina; quitó el papel de celofán del paquete de cigarrillos, se lo dio a Annabeth y le dijo:

– ¡Aquí tienes, Anna!

– Gracias. -Se volvió hacia Jimmy con una ligera expresión de turbación-. Me han entrado muchas ganas de fumar.

Jimmy sonrió con dulzura, le acarició la mano y le respondió:

– Cariño, haz lo que quieras. A mí no me supone ningún problema. Se volvió hacia Whitey y Sean mientras se encendía el cigarrillo, y declaró:

– Lo dejé hace diez años.

– Yo también -confesó Sean-. ¿Le puedo coger uno?

Annabeth se rió, con el cigarrillo temblándole entre los dedos, y Jimmy pensó que seguramente era el primer sonido agradable que había oído en las últimas veinticuatro horas. Vio cómo Sean sonreía mientras cogía un cigarrillo de su mujer y deseó darle las gracias por haberla hecho reír.

– Es un chico malo, agente Devine. Annabeth le encendió el cigarrillo. Sean dio una calada y comentó:

– No es la primera vez que me lo dicen.

– De hecho, si no recuerdo mal, te lo dijo el comandante jefe la semana pasada -terció Whitey.

– ¿De verdad? -preguntó Annabeth, observando a Sean con cierto gesto de interés cariñoso; Annabeth era una de esas pocas personas que tienen tanto interés en escuchar a la gente como en hablar.

La sonrisa de Sean se hizo aún mayor cuando Dave se sentó con ellos, y Jimmy sintió que el aire de la cocina se volvía más ligero.

– Me suspendieron de mi empleo -admitió Sean-. Ayer fue mi primer día de trabajo después de la sanción.

– ¿Qué hiciste? -preguntó Jimmy, apoyándose en la mesa.

– Es confidencial -respondió Sean.

– ¿Sargento Powers? -preguntó Annabeth.

– Bien, el agente Devine aquí presente…

Sean le miró por encima del hombro y le amenazó:

– Yo también podría contar muchas historias sobre ti.

– Tienes razón -asintió Whitey-. Lo siento, señora Marcus.

– ¡Vamos, hombre!

– No, no puede ser. Lo siento.

– Sean -dijo Jimmy, y cuando Sean se volvió para mirarle, Jimmy le dio a entender con la mirada que eso estaba bien, que era precisamente lo que necesitaban en ese momento. Un respiro. Una conversación que no tuviera nada que ver con asesinatos ni funerarias ni pérdidas.

El rostro de Sean se suavizó y por un momento pareció la misma cara de cuando tenía once años; luego hizo un gesto de asentimiento.

Se volvió hacia Annabeth y le confesó:

– Arresté a un tipo por unas multas inexistentes..

– ¿Que hizo, qué?

Annabeth se inclinó hacia delante, sosteniendo el cigarrillo junto a la oreja y con los ojos abiertos de par en par.

Sean echó la cabeza hacia atrás, dio una calada, expulsó el aire hacia el techo, y prosiguió:

– Había un tipo que me caía muy mal. El porqué no importa. Pues bien, una vez al mes más o menos, introducía su número de matrícula en el Registro de Vehículos por haber cometido alguna infracción; iba cambiando de infracción: un día por haber aparcado demasiado tiempo en una zona azul, otro día por haber dejado el coche en una zona de carga y descarga, etc. Bien, la cuestión es que el tipo estaba fichado, pero él no lo sabía.

– Porque nunca recibió ninguna multa -aclaró Annabeth.

– Correcto. Además, cada veintiún días le recargaban cinco dólares más por falta de pago; en fin, que las facturas se le fueron amontonando hasta que un día recibió una citación judicial.

– Y se enteró de que debía unos mil doscientos dólares al Estado -recalcó Whitey.

– ¡Mil doscientos! -repitió Sean-. Él insistió en que nunca había recibido ninguna multa, pero el tribunal no le creyó. Todo el mundo les va con el mismo cuento. Total, que el tipo está jodido. Después de todo, su nombre aparece en el ordenador, y los ordenadores no mienten.

– ¡Es genial! -exclamó Dave-. ¿Lo haces muy a menudo?

– ¡No! -contestó Sean, y Annabeth y Jimmy empezaron a reírse-. No, de verdad que no, David.

– ¡Ten cuidado! -le advirtió Jimmy-. Ahora te llama «David».

– Sólo lo he hecho una vez y al tipo ése.

– ¿Cómo te descubrieron?

– Su tía trabajaba para el Registro de Vehículos -contestó Whitey-. ¿No os parece increíble?

– ¡Y tanto! -exclamó Annabeth. Sean asintió con la cabeza y añadió:

– ¿Y yo cómo iba a saberlo? Total, que el tipo pagó las multas, pero se lo contó a su tía y ésta siguió la pista y se enteró de que había sido alguien de mi comisaría; como yo ya había tenido algún que otro percance con el caballero en cuestión, fue muy fácil para el comandante jefe atar cabos y reducir la lista de sospechosos; así es como me pillaron.

– ¿Qué marrón te cayó exactamente por esto? -preguntó Jimmy.

– ¡Uno bueno! -admitió Sean, y esa vez se rieron los cuatro.

– ¡Un marrón enorme, interminable y espantoso!

Sean se percató de que a Jimmy le brillaban los ojos, y también empezó a reírse.

– No ha sido un año muy bueno para el pobre agente Devine -declaró Whitey.

– Tuvo suerte de que no se enterara nadie de la prensa -apuntó Annabeth.

– ¡Ya nos ocupamos nosotros mismos de castigarle! -repuso Whitey-. Y en realidad, la mujer que trabajaba en el Registro de Vehículos sólo averiguó la comisaría en la que fueron expedidas las multas, pero no sabía quién lo había hecho. ¿Qué podíamos alegar? ¿Un error administrativo?

– Fallo técnico del ordenador -dijo Sean-. El comandante jefe me obligó a indemnizarle, bla, bla, bla, me suspendió una semana sin paga y me ha puesto a prueba por un período de tres meses. No obstante, podría haber sido mucho peor.

– Podrían haberle degradado -explicó Whitey.

– ¿Por qué no lo hicieron? -preguntó Jimmy.

Sean apagó el cigarrillo, alargó los brazos y contestó: -Porque soy Superpoli. ¿No lees los periódicos, Jim?

– Lo que el egocéntrico éste les está intentando decir es que, en los últimos meses, ha resuelto unos cuantos casos importantes -dijo Whitey-. Es la persona que ha resuelto más casos en mi unidad. Antes de echarle, tenemos que esperar a que alguien le supere.

– ¡Aquel caso de violencia en la carretera! -exclamó Dave-. Una vez vi tu nombre en el periódico.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Rio Mistico»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Rio Mistico» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Dennis Lehane - Since We Fell
Dennis Lehane
Dennis Lehane - Coronado
Dennis Lehane
Dennis Lehane - Live by Night
Dennis Lehane
Dennis Lehane - The Given Day
Dennis Lehane
Dennis Lehane - Shutter Island
Dennis Lehane
Dennis Lehane - Moonlight Mile
Dennis Lehane
Dennis Lehane (Editor) - Boston Noir
Dennis Lehane (Editor)
Dennis Lehane - Prayers For Rain
Dennis Lehane
Dennis Lehane - Gone, Baby, Gone
Dennis Lehane
Dennis Kuhl Dennis Kuhl - Das LasterLeben der Anderen
Dennis Kuhl Dennis Kuhl
Dennis Lehane - The Terrorists
Dennis Lehane
Отзывы о книге «Rio Mistico»

Обсуждение, отзывы о книге «Rio Mistico» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x