Mosley Walter - El Caso Brown

Здесь есть возможность читать онлайн «Mosley Walter - El Caso Brown» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: Триллер, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

El Caso Brown: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «El Caso Brown»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

John, un viejo amigo de Easy Rawlins, solicita la ayuda de éste. Brawly Brown, hijastro de John, ha desaparecido y todo hace pensar que el chico se ha visto atrapado en una situación más peligrosa de lo que supone. A Easy no le costará demasiado encontrar a Brawly y enterarse de que John tiene razón… Pero conseguir que Brawly vea las cosas de esa forma resultará mucho más complicado.

El Caso Brown — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «El Caso Brown», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Me senté en una mesa pequeña junto a la registradora y di unos sorbos al fuerte café. Todas las palabras que se decían o las tazas que se dejaban en las mesas repercutían en mis oídos. Tenía las puntas de los dedos entumecidas, y si movía la cabeza demasiado rápido, me temblaba un poco la vista.

Después de mi tercera taza de café, las cosas empezaron a serenarse un poco.

Strong llegó ante la puerta principal a las 4:19 y se sentó a mi mesa. Había intentado vestirse para la ocasión, y llevaba unos pantalones negros y una camisa azul oscuro recta con círculos naranja en el dobladillo. Pero su cabeza era demasiado elegante para aquella ropa, y su ropa demasiado deportiva para aquel bar abierto las veinticuatro horas.

A Strong le habría costado muchísimo encajar en algún sitio donde no fuera el centro de atención.

– ¿Café? -le pregunté.

Hice un gesto a Bingham y éste llamó a un camarero que trajo de la parte de atrás una bandeja con buñuelos calientes y dos tazas de café.

– Me ha colgado -dijo Strong.

– Me ha despertado de un sueño profundo.

El pulso duró hasta que el joven nos sirvió el desayuno.

– Tengo que hablar con usted, Rawlins.

– Por eso estoy aquí.

– Pero aquí no. Hay demasiada gente escuchando por aquí alrededor.

– Aquí precisamente no nos oirá nadie -dije, dejando que mi origen pueblerino empapase cada palabra-. Aquí la gente sólo se mete en sus asuntos. No les importamos nada.

Strong tenía la cara larga y los ojos profundos y conmovedores. Los clavó en los míos.

– ¿Es usted un hombre de raza, señor Rawlins?

– A lo mejor tengo algo de sabueso, no sé -dije.

– No es eso lo que quiero decir.

– Ya sé lo que quiere decir. Usted es uno de esos negros sabelotodo que intentan explicarlo todo según su propia visión. Pero yo sólo soy un negro corriente, haciendo lo que puede en un mundo donde el blanco de hecho es el rey. Tengo una casa con un árbol que crece en el jardín. El árbol es mío; podría cortarlo si quisiera, pero aun así, no se puede decir que sea el árbol de un negro. Es un pino, nada más.

Ya le había dado todos los datos que necesitaba para saber cómo era yo. Si Strong era lo bastante listo para comprenderlo, entonces tendría que tomarlo muy en serio; si no… bueno, ya veríamos.

Él se pasó los dedos por los labios, intentando asimilar mis palabras. Me miró a los ojos con más intensidad si cabe.

Y luego sonrió. Ampliamente.

– Vale -dijo-. No intento convertirlo. Simplemente, quiero saber dónde se sitúa usted en relación con los Primeros Hombres.

– Siguiente pregunta -dije.

– ¿Qué tiene que ver con Brawly Brown?

– Lo busco. Por su madre, como ya dije.

– ¿Y eso es todo?

Strong era más alto que yo y pesaba quince kilos más. Su pregunta insinuaba una amenaza. Pero yo no tenía miedo.

– Esto es una pérdida de tiempo -dije.

Me eché hacia atrás un poco, y probé uno de los buñuelos más ricos que he comido jamás.

– Estoy preocupado por Brawly -dijo Strong.

– ¿Y eso?

– Creo que forma parte del ala radical del grupo de Xavier. A pesar del nombre, el Partido Revolucionario Urbano es una organización cultural, señor Rawlins. Quieren tener una educación mejor para nuestros niños, llevar al barrio la nutrición y la influencia política adecuadas. Pero algunos de los más jóvenes no tienen paciencia para seguir el proceso. Están irritados, y quieren arremeter contra todo. Creo que Brawly forma parte de esos elementos.

– ¿Cómo ha conseguido mi teléfono, señor Strong?

– Me lo ha dado Tina.

– No le di mi teléfono a Tina.

– No, pero sí a Clarissa. Y ella fue a ver a Tina cuando usted la visitó en su casa. También estaba preocupada por Brawly.

– Ella se preocupa por la seguridad del chico, y a usted le preocupa lo que él podría hacerle.

– No a mí, sino al grupo. Ya vio lo que hizo la policía la otra noche. Sabe de lo que son capaces. Si salimos sencillamente a la calle y le decimos a la gente que vote, nos rompen las puertas y nos meten en la cárcel. ¿Qué cree que harán si nos constituimos en pelotones de guerrilleros armados hasta los dientes?

– ¿En eso está metido Brawly?

– No estoy seguro -dijo Strong, con toda la sinceridad de un cocodrilo hambriento-. Sé que están intentando recaudar dinero para comprar armas.

– Quizá quieran el dinero para el colegio -dije.

– No diga gilipolleces.

– Vale, vale -asentí-. Usted sabrá.

– ¿Por qué busca a Brawly Brown?

– Por su madre.

Años atrás, cuando hacía favores a la gente, mentía sin parar. Daba nombres falsos, nunca admitía cuáles eran mis verdaderos motivos… Como norma, la gente se creía mis mentiras. Aquélla era la primera vez que decía la verdad de forma sistemática, y el resultado era que nadie se creía lo que yo decía.

– Si eso es cierto -dijo Strong-, entonces será mejor que encuentre a Brawly y lo lleve a casa. Porque lo único que va a conseguir así es una tumba prematura.

– Al menos estamos de acuerdo en algo -afirmé-. Nada me gustaría más que meter a Brawly en una habitación con su madre. Pero ya sabe, sólo vi al muchacho una vez… me lanzó al otro lado de la habitación, y no creo que estuviera ni siquiera alterado.

– Quizá si yo voy con usted… -dijo Strong-. A lo mejor a mí me escucha.

– ¿Usted cree?

– Vale la pena intentarlo. Ese Brawly es un exaltado. Si le apartamos a él de la historia, es posible que yo pueda razonar con los demás. Y si usted representa a su madre, a lo mejor consigue apartarlo sin más.

Por lo que yo había visto, Brawly era más bien fuerza bruta o esperanza ciega… no una fuerza conductora. Pero ¿qué sabía yo? Y aunque mis sospechas fuesen ciertas, no había motivo alguno para estar en desacuerdo con Strong. Si estaba dispuesto a ayudar, yo también estaba dispuesto a dejar que lo hiciera.

– Sé dónde está -me dijo Strong.

– ¿Dónde?

– Puedo llevarle allí.

Pagó la cuenta y luego salimos hacia su coche, que estaba aparcado al otro lado de la calle. Era un viejo Crown Victoria, tan hermoso como el día que salió de la cadena de producción. El líder radical estaba orgulloso de su automóvil. No sé por qué, eso hizo que le apreciara más.

Pero algo me incordiaba en el fondo de la mente.

De camino, le pregunté a Strong:

– ¿Son amigos Xavier y Brawly?

– Pues en realidad no lo sé.

– ¿No? Yo creía que el jefe de un grupo como los Primeros Hombres sabría todo lo que estaba haciendo su gente y cómo se llevaban entre ellos.

– Yo no soy el jefe de esa organización. De hecho, hablando de forma estricta, ni siquiera soy miembro de ella.

– ¿Ah, no? Entonces, ¿por qué le tratan como si fuera un rey?

– Soy activista en la zona de la bahía. Vivo en Oakland. Tengo algunos seguidores aquí.

– Pero dicen que usted fundó los Primeros Hombres.

– Eso sólo fue un elogio lleno de generosidad -dijo-. Yo era muy amigo de un hombre llamado Harney, Philip Harney. Él es su modelo espiritual. Su aura me ha salpicado a mí también.

Fuimos hacia Compton. Pasamos la avenida Rosecrans y Alondra Boulevard, no lejos de la obra de John.

La duda insidiosa persistía en mi interior.

Cuando la carretera se convirtió en camino de grava, miré la señal temporal de la calle, en la que ponía A227-F. Me parecía lógico que Brawly se escondiera en alguna casa en construcción junto a la obra donde había estado trabajando no hacía tanto tiempo. Conocía la zona, los sistemas de seguridad y los horarios de los trabajadores.

Y entonces fue cuando me di cuenta. Strong no me parecía el tipo de hombre que corre con los gastos de un desconocido. Quizá sí de una chica guapa, o de algún pez gordo político, pero no de un hombre a quien no conoce y desde luego mucho menos un incordio como Brawly.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «El Caso Brown»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «El Caso Brown» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Walter Mosley - Fortunate Son
Walter Mosley
Walter Mosley - Fear of the Dark
Walter Mosley
Walter Mosley - Bad Boy Brawly Brown
Walter Mosley
Walter Mosley - A Little Yellow Dog
Walter Mosley
Michael Walters - The Shadow Walker
Michael Walters
Michael Crichton - A Case of Need
Michael Crichton
Michael Dibdin - Cosi Fan Tutti
Michael Dibdin
Walter Mosley - El Caso Brown
Walter Mosley
Minette Walters - La Casa De Hielo
Minette Walters
Michael Kleine-Cosack - Rechtsdienstleistungsgesetz
Michael Kleine-Cosack
Michael Morpurgo - Colly's Barn
Michael Morpurgo
Отзывы о книге «El Caso Brown»

Обсуждение, отзывы о книге «El Caso Brown» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x