Yrsa Sigurðardóttir - Ceniza

Здесь есть возможность читать онлайн «Yrsa Sigurðardóttir - Ceniza» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: Триллер, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Ceniza: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Ceniza»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

La violenta erupción de un volcán en Islandia obliga a desalojar una pequeña isla. Las cenizas y la lava sepultan una población. Sus habitantes se ven en la necesidad de iniciar una nueva vida en duras condiciones, y muchos abandonan la isla.
Treinta años después aquel trauma parece superado, pero el proyecto Pompeya del Norte decide desenterrar algunas de las viviendas. En las excavaciones de una de las casas, junto a objetos y utensilios cotidianos, se realiza un hallazgo sorprendente: cuatro cadáveres habían quedado ocultos por las cenizas todo ese tiempo sin que nadie sospechara de su existencia. Una abogada se ve forzada a investigar qué había ocurrido realmente con aquellos cuerpos y cómo habían llegado allí. La evidencia de un antiguo crimen hará aflorar una sórdida historia de violencia que parece no haber finalizado todavía, estremeciendo la aparentemente tranquila vida de un pueblo de pescadores.

Ceniza — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Ceniza», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

– Comprendo -dijo el joven, feliz a más no poder de que Stefán volviera a ser el de siempre-. El turno está acabando, ¿quieres que volvamos allí mañana por la mañana o…?

Los ojos de Stefán se cerraron.

– No. Iréis ahora. Ahora mismo -desafió al joven a que le contradijera mirándole fijamente a los ojos-. Examinaréis cada centímetro cuadrado y escribiréis un informe decente, como si se estuviera hablando del escenario de un crimen. Quiero encontrar una fotocopia esperándome en mi mesa mañana por la mañana -señaló la puerta con la mano-. En tu lugar, yo me daría prisa, no vaya a ser que tus compañeros se hayan marchado ya a casa…, dejándote todo el trabajo para ti solo -el joven abrió la boca como para responder, pero se contuvo. Fue hacia la puerta. Cuando estaba en el umbral, Stefán añadió-: Comprueba todas las llamadas entrantes y salientes del teléfono de la casa, así como del móvil de la difunta. Está claro que murió el domingo por la noche, de manera que las llamadas de entonces son, naturalmente, las más importantes.

– Eso haré -respondió el joven con un toque de rencor en la voz. Menudo lío. Estaba ya cansado de todo el día, dispuesto a tumbarse en el sofá y quedarse mirando la tele atontado. No era una idea nada atractiva tener que dedicarse a peinar todo un chalé adosado en busca de Dios sabe qué.

– Sí, y otra cosa -le dijo Stefán con voz fuerte cuando la puerta estaba a punto de encajar en los goznes.

– ¿Eh? -el joven introdujo la cabeza por el hueco de la puerta.

– Tengo especial interés en saber si Alda telefoneó al móvil de Markús Magnusson esa misma tarde, y cuánto duró la conversación. ¿Entendido?

– Entendido.

La puerta se cerró. Stefán se quedó mirando las claras maderas llenas de vetas mientras reflexionaba. Sabía que tendría que llamar a su colega de las Vestmann para ponerle al tanto de la marcha del caso. Pero no le apetecía lo más mínimo. Eso podía esperar. Ahora tenía que pasarse por el Hospital Nacional, reunirse con el forense y echar un vistazo al cadáver de Alda. Se puso en pie. Tenía que confesarse a sí mismo que no era solamente su trabajo lo que le empujaba a hacerlo. El forense había mencionado que la mujer estaba excepcionalmente retocada…, una palabra que Stefán no comprendió hasta que le dieron una explicación más precisa. La mujer de Stefán estaba siempre dando la vara con que quería aumentarse el pecho, por eso quería ver unos pechos de esos con sus propios ojos. ¿Quién sabe si a lo mejor, en caso de que le gustaran, acababa dando luz verde?

Capítulo 6

Sábado, 14 de julio de 2007

Los únicos asistentes a la entrega de premios aquella mañana de sábado eran los niños ganadores y sus padres. Sóley estaba sentada entre su madre y su hermano Gylfi, con una sonrisa de oreja a oreja. El concurso se había celebrado en la semana del arte de la biblioteca infantil, y consistía en dibujar algún utensilio doméstico que hiciera más fácil la vida de la familia, y Sóley se había pasado la tarde dibujando y coloreando muy concentrada. Para gran asombro de Þóra, su hija ganó, aunque hasta aquel momento Sóley había mostrado una capacidad bastante limitada para las actividades artísticas. La chica que había conseguido el premio del grupo de más edad volvió a su asiento con un ramito de flores y un cheque regalo del patrocinador del concurso, una de las mayores empresas de electrodomésticos del país. La directora de la biblioteca municipal llamó a continuación a Sóley, que se colocó al lado de la señora con los mofletes muy colorados.

– Enhorabuena por tu premio -dijo la bibliotecaria cogiendo la manecita de Sóley. Señaló el dibujo de la niña, que colgaba en un lugar destacado, al lado de las demás obras de arte que se habían presentado. No eran demasiadas, tal como había sospechado Þóra al enterarse de que Sóley había ganado-. Debo decir que es un dibujo precioso de una plancha -dijo la bibliotecaria al tiempo que entregaba a Sóley un sobre grueso y un ramo de flores.

Þóra arqueó las cejas. ¿Por qué había pintado Sóley una plancha? Su ex marido se la había llevado cuando se separaron, porque la ropa que usaba Þóra no necesitaba plancha. Puso muy en duda que Sóley supiera cómo era, aunque la había representado bastante bien pese a no disponer de modelo. Þóra dejó de mirar el dibujo y, llena de orgullo, dirigió los ojos hacia su hija, que tenía las mejillas aún más rojas que cuando llegó al lado de la bibliotecaria, con el premio en las manos y los ojos bajos. Sóley parecía estar a punto de echarse a llorar, pero tenía los dientes apretados.

– Es un trineo, no una plancha -dijo Sóley, que empezó a morderse el labio inferior.

Ahora le tocó a la bibliotecaria el turno de enrojecer un poco, pero para gran alivio de Þóra, solucionó muy bien el malentendido diciendo que se había expresado mal. La carcajada que soltó Gylfi no ayudó mucho, sin embargo, y cuando volvieron a ponerse delante del dibujo no dejó de soltar risitas.

– Es verdad que es igualito a una plancha -dijo él-. ¿Cómo se te ocurrió pintar un trineo? ¿Crees que es un utensilio doméstico?

Þóra se lanzó en defensa de su hija:

– Sí, sí. En el campo se considera a los trineos utensilios domésticos -apretó la mano de su hija, que seguía mustia-. No le escuches. No sabe cómo son los trineos -en realidad, lo mismo podía decirse de Sóley-. Os voy a invitar a un helado para festejar el premio -apartó la mirada del trineo y contempló los demás dibujos-. Sóley, el tuyo es el más guay de todos. Chulísimo.

– No, es feo -dijo la niña-. Tenía que haber pintado una puerta, como pensé al principio.

Þóra se dio cuenta de que tendría que explicarle a su hija en algún momento lo que significaba la palabra «utensilio doméstico».

– Basta de tonterías -dijo-. Has ganado y no ha sido por casualidad. El dibujo más guay de todos. «Trineo» y «plancha» se escriben con ene. Por eso se confundió la señora -le dio un beso a Sóley en la mejilla y miró enfadada a su hijo, que parecía a punto de echarse a reír otra vez-. Hazme un favor y búscame un libro sobre la erupción de las Islas Vestmann -le dijo. Así Gylfi tendría algo en qué pensar en vez de en la plancha-trineo, y a ella no le vendría mal leer algo sobre lo sucedido en 1973, de lo que en realidad sabía bastante poco. Þóra aprovechó la oportunidad, mientras su hijo buscaba el libro, para animar un poco a su hija, aunque su humor no empezó a mejorar hasta que no estuvieron sentados delante de unas copas enormes llenas de helado con nata. El móvil de Þóra sonó en el mismo momento en que estaba terminando su helado, pero decidió no contestar por miedo a que el mundo se le derrumbara a su niña. Cambió de opinión cuando vio en la pantalla que quien llamaba era Markús. El mundo de él sí que se estaba derrumbando, y un helado no le serviría para recuperar la normalidad.

Þóra colgó tras hablar con Bragi, su socio del bufete, y suspiró. Estaba agotada tras un día que había ido muy distinto a como esperaba. Habían vuelto a llamar a Markús para otro interrogatorio, sospechoso ahora de haber participado en la prematura muerte de Alda y de cooperación en la muerte de los hombres del sótano. La llamada telefónica de Markús había sido una llamada de auxilio y Þóra acabó en la comisaría después de haber renunciado a ir al cine o hacer cualquier otra cosa con sus hijos. Había tenido que escuchar cómo hacían a su cliente las mismas preguntas que en anteriores interrogatorios, aunque ahora se añadían varias sobre Alda. Todas giraban en torno a si Markús había estado en casa de ella el domingo por la tarde, que es cuando se calculaba que había muerto. Markús afirmó que no, manteniendo la versión de que solo habían hablado por teléfono. Al principio afirmó que no había ido a su casa en varias semanas, pero luego reconoció que había estado allí recientemente, aunque no la tarde sobre la que le preguntaban, sino la anterior. Había pasado por allí solo un momento y tomó un vaso de vino.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Ceniza»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Ceniza» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Yrsa Sigurðardóttir - I Remember You
Yrsa Sigurðardóttir
Yrsa Sigurðardóttir - The Silence of the Sea
Yrsa Sigurðardóttir
Yrsa Sigurðardóttir - Het laatste ritueel
Yrsa Sigurðardóttir
Yrsa Sigurdardóttir - The Day Is Dark
Yrsa Sigurdardóttir
Yrsa Sigurdardottir - Ashes To Dust
Yrsa Sigurdardottir
Yrsa Sigurdardottir - Last Rituals
Yrsa Sigurdardottir
Yrsa Sigurðardóttir - Ladrón De Almas
Yrsa Sigurðardóttir
Yrsa Sigurðardóttir - El Último Ritual
Yrsa Sigurðardóttir
libcat.ru: книга без обложки
Yrsa Sigurðardóttir
Yrsa Sigurdardóttir - My Soul to Take
Yrsa Sigurdardóttir
libcat.ru: книга без обложки
Yrsa Sigurðardóttir
Fríða Á. Sigurðardóttir - Ninas Geschichte
Fríða Á. Sigurðardóttir
Отзывы о книге «Ceniza»

Обсуждение, отзывы о книге «Ceniza» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x