Fredric Brown - El Caso De La Señora Murphy

Здесь есть возможность читать онлайн «Fredric Brown - El Caso De La Señora Murphy» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: Детектив, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

El Caso De La Señora Murphy: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «El Caso De La Señora Murphy»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

ESTABA TENDIDO en mi cama esa noche con una costilla rota y un trombón roto. La costilla sanaría, pero no el trombón, según decidí.
A ambos los había roto la noche anterior, bajando las escaleras, en camino a una reunión de aficionados: unos cuantos tipos a quienes había conocido y a los que les gustaba juntarse una noche cada dos semanas para producir ruido. La punta del pie tropezó en una rotura de la alfombra de la escalera, agujero que no estaba allí antes, a unos cuantos peldaños de la parte inferior, y me eché en clavado hacia un aterrizaje de tres puntos, el primero de los cuales había sido el extremo de la caja del trombón. Me había cortado la respiración por un momento y me había dolido, pero no mucho peor que cuando uno se lastima un dedo o se golpea el tobillo contra algo. La señora Bardy, la patrona, oyó la caída y llegó corriendo desde su apartamento al fondo del primer piso; llegó y comenzó a ocuparse de mí, como una gallina de sus polluelos, aun antes de que me levantara. Mi primer pensamiento no fue para mí ni para el trombón (yo no me lastimo con facilidad y la caja debía haber protegido al instrumento), sino para el tapete. Alguien pudo haberse roto el cuello a causa de él.

El Caso De La Señora Murphy — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «El Caso De La Señora Murphy», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

– ¿Por qué no telefonear a Ángela y presentarle el caso?

– ¿Cómo pudiera estar seguro que solamente Ángela escucha? Ese teléfono de los Dolan puede tener media docena de extensiones.

– Yo puedo arreglar eso, Ed. Tú giras el número general de los Dolan y luego escuchas. Yo hablaré.

Se fue a la oficina interior y le di tiempo para que se acomodara; luego marqué el número. Una voz aguda, masculina, contestó después de algunas llamadas: «Residencia Dolan». Tenía un acento muy fuerte, hasta en esas dos palabras, que no trataré de reproducir. Supuse que fuera la voz de Robert, el filipino.

– ¿Está la señorita Ángela Dolan? – preguntó el tío Am.

– Sí, señor. La voy a llamar.

Hubo un tiempo de espera y después la voz de Ángela. Se oía como la de su madrastra, pero dijo:

– Habla Ángela Dolan.

– ¿Señorita Dolan? Por favor no mencione mi nombre. Pronto sabrá por qué. Yo…

– Pero si no conozco su nombre ni reconozco su voz.

– Usted conoció a mi sobrino anoche; desea hablar con usted acerca de un asunto personal, y tenemos entendido que hay varias extensiones en su casa. Así que haga favor de llamarlo de otro teléfono, ¿quiere? Cualquier aparato cercano, o el privado en el estudio de su padre, si ha salido.

– Muy bien. Papá se acaba de ir y no creo que echara llave al estudio. Voy a llamarlo en un momento, o dos, si tengo que salir.

Colgaron y el tío Am me llamó:

– No me molestaré en escuchar esto. Sigue tú ahora.

Capítulo 7

Cuando Ángela llamó, le conté de la llamada de su madrastra y del problema que me presentaba.

– Comprendo, Ed; no existe ningún problema. Si ella te reconoce, te recuerda y te dice: «¿No es usted el joven a quien vi venir por Ángela anoche?», dile que sí, y también la verdad, hasta cierto punto, si entiendes lo que te quiero decir. Que yo te hablé anoche por la misma razón que ella te llamó hoy. Que tomamos unas cuantas copas y hablamos un rato, la misma conversación que sostendrías con ella.

– Muy bien. ¿Sabe alguien a qué hora llegaste?

– No. Así que el elemento tiempo no tiene para qué mencionarse. Y si después se lo menciona a mi papá, no importa. Confesaré que te hablé y te vi.

– Bueno. Pero para el caso de que luego me trate él a mí el asunto, pongámonos de acuerdo en nuestras versiones. ¿A dónde fuimos a tomar las copas y cuándo te llevé a la casa?

– El mismo sitio a donde fuimos realmente. No te acuerdas con precisión a qué hora regresamos a la casa, excepto que era tarde. Así no habrá contracciones, si ninguno de los dos es específico acerca de la hora; no nos fijamos. ¿Esta alguien allí que pueda oír lo que dices?

– No. – le contesté.

– Entonces, te quiero expresar, Ed, que yo… ¡Oh, no sé cómo decirlo!

– ¿Es acerca de lo de anoche?

– Sí.

– Permíteme tratar de ayudarte. Tienes miedo de que, porque fuiste franca y directa, vaya a suponer que tus talones son redondos y se resbalan. Cuando, en circunstancias normales, no son más redondos que los de cualquier muchacha hermosa…

– ¡Ed! – casi hubo un temblorcillo en su voz -. ¿Cómo pudiste haber adivinado tan exactamente lo que deseaba decirte… y cómo pudiste haberlo dicho mucho mejor y más directamente que lo que a mí se me hubiese ocurrido?

– No necesitaba decirse – le contesté. Entonces pensé que ahora que había abordado el tema de mis relaciones, era el momento de hacerle la pregunta que no le hice anoche. Así que proseguí -: ¿Puedo volverte a ver muy pronto?

– Ed, yo… yo no sé cómo contestarte eso. ¿Me quieres conceder un poco de tiempo para pensarlo?

– Seguro – rezongué -: «No me llames, yo te llamaré»; ¿es eso lo que me quieres decir?

– Ed, por supuesto que no. Es falta de comprensión tuya ponerlo en esa forma. Lo que pasa… en estos momentos me siento un poco confusa respecto a muchas cosas. Dame un poco de tiempo para asentarme. Entonces, si todavía lo deseas, llámame, y te contestaré sí o no, con claridad, no «acaso»…

– Magnifico, pero cuando te llame, conserva en la cabeza que no estoy necesariamente sugiriendo una repetición de lo de anoche. Nada más solicitando una cita.

– Gracias, Ed. Te prometo una contestación definitiva si me llamas no antes de una semana.

– Cuando te hable, ¿debo utilizar el mismo sistema que en esta ocasión, hacer que alguien llame y te dé el recado de que tú telefonees de un aparato sin extensiones?

– No – respondió con énfasis – si nos vemos de nuevo, será abiertamente, Ed. Si alguien escucha, no importa.

– Perfecto. ¿Estarás allí cuando llegue, esta tarde?

– Temo que no. Estoy tomando un para de clases por las tardes, en la Universidad de Chicago, dos veces a la semana, de las dos a las cuatro, y hoy es uno de los días.

– Hasta dentro de una semana entonces, Ángela.

– Adiós, Ed – y ambos colgamos.

Oí el chirrido del sillón giratorio del tío Am, y luego unos cuantos pasos que se detuvieron en el vano de la puerta.

– No estaba escuchando – me dijo -, pero no pude dejar de distinguir partes de tu conversación. ¡Muchacho! ¿Estas seguro de que sabes lo que estás haciendo?

Yo sabía lo que me quería decir. No estaba criticando mi moralidad o tratando de mezclarse en mi vida. Conoce mi debilidad por las mujeres y me la consiente como yo le consiento su debilidad por el juego. Hasta sabe que algún día, si es que hallo la mujer que me vaya bien, me casaré; y está reconciliado con la idea.

No estaba preocupado por mis relaciones pasadas o futuras con Ángela, como Ángela. Se encontraba inquieto respecto a mis relaciones, futuras, con la hija única de Vincent Dolan, muy amada, y yo comprendí su punto.

Era algo que yo había estado tratando de no ver. Vincent Dolan era un hombre rico que estaría deseando el mejor partido posible para su hija, y un pobre detective privado no era un candidato probable. Y todavía menos que desearme para yerno, aceptaría que yo tratara de seducir a su hija sin miras al matrimonio. Acaso todavía la creyera virgen.

Bueno, sí, todo eso me había cruzado por la mente, y ésta me había dado una contestación. A Vincent Dolan le simpatizaba yo personalmente. Si se percataba de que veía a menudo a su hija, podía hacerme alguna advertencia, pero no haría que me trabajaran. Y yo consideraría que estaba en su derecho de advertirme, a menos de que, para entonces, yo hubiese decidido que mis intenciones para con Ángela eran honorables.

Además, tal vez no le importara un comino. Pensaría que ya estaba grandecita y que era asunto de ella con quién salía. Una señal estimulante de ese sentido había sido…

– Hay una cosa – le dije – que no pudiste adivinar. Le pregunté si debía de utilizar el mismo sistema en mi siguiente telefonazo como en éste, y su respuesta definitiva fue que no. Si no volvemos a ver, será abiertamente. Resulta obvio que conoce la actitud de su padre hacia ella mejor que nosotros, y no cree que se oponga.

– Eso sí hace diferencia – asintió con el ademán -. Bueno, ahora que ya has hablado con todos los miembros de la familia Dolan, excepto Mike, ¿qué me dices de una partidita de gin rummy?

– Está bien – acepté. Dio media vuelta para ir a su oficina, y yo empezaba a enderezarme; en ese preciso instante repicó el teléfono. Así que me quedé en mi sitio esperando a que el tío Am contestara «Hunter & Hunter», pues era su turno.

– ¿Am? Harry Cogswell, de la Phoenix Indemnity. ¿Esta cualquiera de ustedes dos libre para un día de trabajo, inmediatamente?

– Yo lo estoy. Ed tiene una cita esta tarde.

– Muy bien. Escucha.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «El Caso De La Señora Murphy»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «El Caso De La Señora Murphy» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «El Caso De La Señora Murphy»

Обсуждение, отзывы о книге «El Caso De La Señora Murphy» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x