Mario Llosa - Pantaleón Y Las Visitadoras

Здесь есть возможность читать онлайн «Mario Llosa - Pantaleón Y Las Visitadoras» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: Современная проза, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Pantaleón Y Las Visitadoras: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Pantaleón Y Las Visitadoras»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Pantaleón Pantoja, un capitán del ejército recientemente ascendido, recibe la misión de establecer un servicio de prostitución para las fuerzas armadas del Perú en el más absoluto secreto militar. Estricto cumplidor del deber que le ha sido asignado, Pantaleón se traslada a Iquitos, en plena selva, para llevar a cabo su cometido, pero se entrega a esta misión con tal obcecación que termina por poner en peligro el engranaje que él mismo ha puesto en movimiento.

Pantaleón Y Las Visitadoras — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Pantaleón Y Las Visitadoras», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

así que veremos quién gana. Sólo te advierto que cuando averigüe en qué anda metido Panta no pienso chismearte aunque te hagas pipí de curiosidad.

Ahora, será muy emocionante que el Ejército le haya dado esa misión en el Servicio de Inteligencia, Chichita, y eso quizá lo ayude mucho en su carrera, pero lo que es yo, te digo, no estoy nada contenta con el asunto. En primer lugar porque casi no lo veo. Tú lo sabes lo cumplidor y maniático que es Panta con su trabajo, se toma todo lo que le mandan tan a pecho que no duerme ni come ni vive hasta que lo termina, pero en Chiclayo al menos tenía sus guardias con horario fijo y yo sabía sus entradas y salidas. Pero aquí se pasa la vida afuera, nunca se sabe a qué hora vuelve y, cáete muerta, ni en qué estado. Te digo que no me acostumbro a verlo de civil, con guayaberas y blue jeans y la gorrita jockey que le ha dado por ponerse, me parece haber cambiado de marido y no sólo por eso (uy, qué vergüenza, Chichi, eso sí que no me atrevo a contártelo). Si sólo fuera durante el día yo feliz de que trabaje. Pero tiene que salir también de noche, a veces hasta tardísimo, y se me ha presentado tres veces cayéndose de borracho, había que ayudarlo a desvestirse y al día siguiente su mamacita tenía que ponerle pañitos en la frente y hacerle mates. Sí, Chichi, te estoy viendo la cara de asombro, aunque no te lo creas, Panta el abstemio, el que sólo tomaba Pasteurina desde que tuvo hemorroides: cayéndose de borracho y con la lengua enrevesada. Ahora me da risa porque me acuerdo lo chistoso que era verlo irse de bruces contra las cosas y oírlo quejarse, pero en el momento pasé unos colerones que tenía ganas de cortarle a él también lo que ya sabes (contra, me fregaría yo solita, jajá). Él me jura y requetejura que tiene que salir de noche por su misión, que debe buscar a unos tipos que sólo viven en los bares, que hacen ahí sus citas para despistar y a lo mejor es verdad (así se ve en las

películas de espionaje, ¿no es cierto?), pero oye, ¿tú te quedarías tan tranquila si tu marido se pasara la noche en los bares? No, pues, hijita, ni que yo fuera boba para creer que en los bares sólo ve a hombres. Ahí tiene que haber mujeres que se le acercan y le meten conversación y Dios sabe qué más. Le he hecho unos escándalos terribles y me ha prometido no salir más de noche salvo cuando sea de vida o muerte. Le he rebuscado con lupa todos sus bolsillos y camisas y ropa interior, porque te digo que si le encuentro la menor prueba de que ha estado con mujeres pobre Panta. Menos mal que en esto su mamacita me ayuda, está aterrada con las salidas nocturnas y las tranquitas de su hijito, al que siempre había creído un santito de sacristía y resulta que ahora ya no lo es tanto (uy, Chichi, te mueres si te cuento).

Y, además, por la bendita misión tiene que juntarse con una gente que pone los pelos de punta. Fíjate que la otra tarde había ido a la vermouth con una vecina de la que me he hecho amiga, Alicia, casada con un muchacho del Banco Amazónico, una loretana muy simpática que nos ayudó mucho con la instalación. Fuimos al cine Excelsior, a ver una de Rock Hudson (agárrame que me desmayo), y a la salida estábamos dando una vueltita tomando fresco, cuando al pasar por un bar que se llama "Camu Camu" lo veo a Panta, en una mesa del rinconcito, ¡con qué pareja! Un ataque, Chichi, la mujer una perica tan llena de pintura que no le cabía una gota más ni en las orejas, con unas teteras y un pompis que rebalsaban del asiento, y el tipo un hombrecito a medias, tan retaco que los pies no llegaban al suelo, y encima con unos aires de castigador increíbles. Y Panta entre los dos, conversando lo más animado, como si fueran amigos de toda la vida. Le dije a Alicia mira, mi marido, y entonces ella me agarró del brazo, nerviosísima, ven, Pocha, vámonos, no te puedes acercar. Total que nos fuimos. ¿Quiénes crees que eran ese par? La perica es la mujer de más mala fama de todo Iquitos, el enemigo número uno de los hogares, le dicen Chuchupe y tiene una casa de pes en la carretera a Nanay, y el enanito su amante, para partirse de risa imaginársela haciendo cositas con el mamarracho ese, vaya depravada y él peor. ¿Qué te parece? Después se lo dije a Panta a ver qué cara ponía y, por supuesto, se comió un pavo tan terrible que

comenzó a tartamudear. Pero no se atrevió a negármelo, reconoció que ese dúo son gente de mal vivir. Que tenía que buscarlos por su trabajo, que nunca que lo viera con ellos me le fuera a acercar ni menos su madre. Yo le dije allá tú con quién te juntas pero si alguna vez sé que te has ido a meter a la casa de la perica en Nanay tu matrimonio peligra, Panta. No, pues, hijita, figúrate la fama que vamos a hacernos aquí si Panta empieza a lucirse por las calles con esa gente.

Otra de sus juntas es un chino, yo que creía que todos los chinos eran finitos, éste es Frankenstein. Aunque a Alicia le parece pintón, las loretanas tienen el gusto atravesado, hermana. Lo pesqué con él un día que fui a visitar el Acuario Moronacocha, a ver los peces ornamentales (lindos, te digo, pero se me ocurrió tocar una anguila y me soltó una descarga eléctrica con la cola que casi me tira al suelo), y la señora Leonor también lo ha pescado en una cantinita con el chino, y Alicia los chapó paseándose por la Plaza de Armas y por ella me enteré que el chino tiene fama

de gran forajido. Que explota mujeres, que es un vividor y un vago: figúrate las amistades de tu cuñadito. Se lo he sacado en cara y la señora Leonor más que yo, porque a ella la enferman más que a mí las malas juntas de su hijito, sobre todo ahora que cree que se nos viene encima el fin del mundo. Panta le ha prometido que no se lucirá en las calles ni con la perica ni con el enano ni con el chino, pero tendrá que seguir viéndolos a escondidas porque resulta que es parte de su trabajo. Yo no sé dónde va a ir a parar con esa misión y con esa clase de relaciones. Chichita, comprenderás que me tiene con los nervios alterados, saltoncísima.

Aunque en realidad no debería estarlo, quiero decir por el lado de los cuernos y la infidelidad, porque, ¿te cuento, hermana?, no te imaginas cómo ha cambiado Panta en lo que se refiere a esas cosas, las íntimas. ¿Te acuerdas cómo ha sido él siempre tan formalito desde que nos casamos que tú te burlabas tanto y me decías estoy segura que con Pantita tú ayunas, Pocha? Pues ya no te podrás burlar nunca más de tu cuñadito en ese aspecto, malhablada, porque desde que pisó Iquitos se volvió una fiera. Algo terrible, Chichi, a veces me asusto y pienso si no será una enfermedad, porque figúrate que antes, te he contado, le provocaba hacer cositas una vez cada diez o quince días (qué vergüenza hablarte de esto, Chichi), y ahora al bandido le provoca cada dos, cada tres días y tengo que estarle frenando los ímpetus, porque tampoco es plan, pues ¿no?, con este calor y esta humedad tan pegajosa. Además, se me ocurre que le podría hacer mal, parece que afecta al cerebro, ¿no decía todo el mundo que el marido de la Pulpito Carrasco se volvió locumbeta de tanto hacer cositas con ella? Panta dice que es culpa del clima, un general ya lo previno allá en Lima que la selva vuelve a los hombres unos fosforitos. Te digo que me da risa ver a tu cuñadito tan fogoso, a veces se le antoja hacer cositas de día, después del almuerzo, con el pretexto de la siesta, pero claro que no lo dejo, y a veces me despierta de madrugada con la locura esa. Imagínate que la otra noche lo chapé tomando tiempo con un cronómetro mientras hacíamos cositas, se lo dije y se confundió muchísimo. Después me confesó que necesitaba saber cuanto duraban las cositas entre una pareja normal: ¿se estará volviendo vicioso? Quien le va a creer que para su trabajo necesita averiguar esas porquerías. Le digo no te reconozco, Panta, tú eras tan educadito, me da la impresión de estarte metiendo cuernos con otro Panta En fin, hija, basta de hablar de cochinadas que tú eres virgencita y te juro que me peleo contigo para siempre si se te ocurre comentar esto con alguien y sobre todo con las Santana, esas locas.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Pantaleón Y Las Visitadoras»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Pantaleón Y Las Visitadoras» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «Pantaleón Y Las Visitadoras»

Обсуждение, отзывы о книге «Pantaleón Y Las Visitadoras» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x