Julia Navarro - La Sangre De Los Inocentes

Здесь есть возможность читать онлайн «Julia Navarro - La Sangre De Los Inocentes» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: Историческая проза, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

La Sangre De Los Inocentes: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «La Sangre De Los Inocentes»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Algún día alguien vengará la sangre de los inocentes…
Soy espía y tengo miedo. Así empieza la crónica que escribe Fray Julián, notario de la inquisición, cuando recibe la misión de relatar los enfrentamientos acaecidos en Montsegur (Francia) a mediados del siglo XIII. Las luchas de poder entre los cátaros y el control que, en nombre de la fe, lleva la inquisición, propiciarán que la crónica del fraile sea un valioso tesoro a descubrir. Su última frase – algún día, alguien vengará la sangre de los inocentes – se convertirá en un enigma a descifrar de generación en generación. Cuando estalla la Segunda Guerra Mundial, Ferdinand verá con sus propios ojos como el mundo se desintegra. Tiempo después, a principios del siglo XXI, Raimón de la Pallisiére, hijo del aristócrata francés, recurrirá a El Facilitador, un hombre que desde la sombra maneja los hilos de poder, para un único fin: cumplir la sed de venganza por tanta sangre derramada a lo largo de la Historia.

La Sangre De Los Inocentes — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «La Sangre De Los Inocentes», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

– Fátima, estamos en España, aquí no suceden estas cosas; nadie me va a matar, además yo no he manchado el honor de la familia.

Pero su madre había palidecido, sopesando las palabras de su nuera. A ella le había sorprendido el apremio del hermano de su marido para que recibiera a su hijo Mustafa, y la había inquietado ver cómo éste había buscado la confrontación con Laila.

– Pero el honor de la familia lo suelen resolver los familiares directos, el padre, el marido, el hermano… -dijo la mujer mirando a Fátima.

– Pero hay ocasiones en que si es necesario se busca a otro miembro de la familia. Puede haber padres que no se sientan capaces de matar a su propia hija, y… bueno, yo creo que pese a todo Mohamed quiere a Laila. A veces he temido que él… pero no… no creo que fuera capaz de matarla.

Su suegra emitió un sonido lastimero mientras que Laila la miró con asombro. Fátima estaba hablando de su vida como si no le perteneciera, como si vivir o morir dependiera de la voluntad de su familia.

– Fátima, llevo años luchando contra todo esto que dices. No podemos dar por bueno que a una adúltera se la lapide o que a un ladrón se le corte la mano o a que a una mujer se la asesine para lavar no sé qué extraño concepto del honor o que a una niña la casen con un desconocido.

– ¡Ten cuidado, Laila, no te confíes! -le pidió Fátima con voz de súplica-. Y cuídate de Mustafa, evítale. No te dejaremos sola, ni siquiera por la noche deberías estar sola. Atranca bien la puerta y no te fíes de tu primo.

Fátima se asustó cuando su suegra se acercó a ella y le cogió las manos apretándoselas con fuerza mientras la obligaba a mirarla de frente.

– ¿Qué sabes, Fátima? ¡Dínoslo! -le ordenó.

– ¡No sé nada, os lo aseguro! Si supiera algo no dudéis que lo diría, no quiero que… no quiero que le pase nada a Laila, pero tengo miedo.

Las tres mujeres se quedaron en silencio, sobrecogidas, y Laila por primera vez también sintió miedo.

Mohamed ayudaba a su primo a colocar la poca ropa que guardaba en la maleta.

– Tu madre no ha debido permitir que tu hermana se haya convertido en una cristiana -reprochó Mustafa a Mohamed.

– Laila es como es y no es culpa de mi madre. Esto es muy diferente de la aldea donde vives, aquí es obligatorio que las niñas vayan al colegio y, desgraciadamente, les meten ideas en la cabeza. Mis padres nos han educado como debían.

– Tú eres un buen musulmán; alguien de quien sentirnos orgullosos, pero tu hermana… está provocando el deshonor a nuestra familia.

– Mí hermana no ha hecho nada reprobable -la defendió Mohamed.

– ¡Vamos, tú sabes que sí! Lo que ha dicho esta noche es blasfemia. Supongo que le tienes afecto, pero no debería importarte lo que le pase; cuanto antes lo resolvamos, mejor. Tú deberías haberlo hecho pero ya me han dicho que… bueno, que eres un hombre importante, que no debes tener problemas con la ley. Para eso está la familia. Tu padre es débil, siempre lo ha sido, me lo ha explicado el mío. Es una pena, porque es el mayor, aunque de hecho es a mi padre a quien acude la familia para pedirle justicia.

– Mi padre no es débil -protestó Mohamed sintiéndose humillado.

– Tu hermana debería estar muerta. Tú no puedes hacerlo, pero ¿y él?

– ¿Matarías a tu propia hija? Bueno, supongo que no puedes responder a esa pregunta; aún eres joven y no tienes hijos.

– Tengo tres hermanas a las que no dudaría en cortar el cuello si se comportaran como Laila. Pero eso nunca sucederá porque mi madre las ha educado bien y ya están casadas.

– Creí que tus hermanas eran más jóvenes que tú.

– Y así es. La mayor tiene dieciocho años, le sigue una de dieciséis y la pequeña de catorce años. Mi padre arregló sus esponsales cuando eran niñas y ellas han aceptado su destino, como debe ser. ¿Por qué no habéis casado a Laila? Mi madre dice que si se la hubieseis enviado os la habría devuelto casada. Mi madre no comprende a la tuya.

– Bien. Te dejaré que descanses.

Mohamed no quería continuar la discusión con su primo. Él abominaba de cuanto hacía Laila, pero no soportaba los reproches de Mustafa contra su hermana y sus padres.

– No me quedaré mucho tiempo, puede que una semana -le advirtió su primo.

– No te precipites, porque a lo mejor… -Mohamed quedó en silencio mientras Mustafa aguardaba a que terminara la frase.

– Haré lo que he venido a hacer -respondió Mustafa. Mohamed salió de la habitación sin responderle.

36

Raymond de la Pallisière presidía la reunión semanal de la fundación Memoria Cátara respondiendo a las preguntas preocupadas de sus más allegados. Aquellos hombres compartían con él su odio contra la Iglesia y habían confiado a su buen juicio que llevara adelante un plan para infligir un golpe a Roma, pero ninguno sabía, ni quería saber, en qué consistiría el golpe, aunque ansiaban saber cuándo sería.

Todos quedaron en silencio cuando Edward, el leal mayordomo del conde, entró con paso precipitado en la biblioteca donde celebraban la reunión.

Edward se acercó al conde d'Amis y le murmuró algo al oído que conmocionó al aristócrata, porque todos los presentes le vieron palidecer.

– Señores… me van a perdonar unos minutos, enseguida regreso.

Raymond abandonó la biblioteca seguido de Edward. El mayordomo aún no había salido de su asombro desde que un criado le había avisado de que una señorita acababa de llegar, una señorita que aguardaba en el vestíbulo y decía ser la hija del conde.

Edward había acudido de inmediato y se había encontrado con una mujer joven de mirada impertinente, con un par de maletas Vuitton que le apremiaba a que avisaran a su padre.

El conde había llegado el día anterior; no le había dicho a Edward que esperaba la visita de nadie y menos de aquella hija que, por lo que él sabía, vivía en Norteamérica y con la que no tenía trato.

Catherine estaba de pie y parecía de mal humor. Raymond se acercó a ella interrogándola con la mirada.

– He decidido venir -dijo ella como toda explicación a su inopinada visita.

– Eres bienvenida al castillo.

– Gracias.

– Edward, acompañe a mi hija Catherine a la habitación verde; mande una doncella para que le ayude con el equipaje y con cuanto necesite.

– No me voy a quedar mucho tiempo…

– Quédate lo que quieras; ahora, si me lo permites, tengo una reunión con unos caballeros miembros del comité de mi fundación. El castillo está a tu disposición. Espero no demorarme mucho.

– No quiero ser un incordio.

– No lo eres; y ahora perdóname.

Raymond regresó sobre sus pasos sintiéndose desconcertado a la vez que satisfecho por la llegada de su hija. Tendría que acostumbrarse al carácter imprevisible de Catherine, en eso sí se parecía a su fallecida esposa.

Catherine siguió a Edward por las escaleras hasta el primer piso, donde el discreto mayordomo abrió una puerta que daba paso a una habitación entelada en seda de color verde pálido.

– Ahora mismo le enviaré a una doncella para que la ayude a deshacer el equipaje.

– No hace falta; soy capaz de deshacer mi propia maleta.

– Aun así la enviaré por si necesita algo…

– No necesito nada. Gracias.

Cuando Edward salió de la habitación, Catherine suspiró aliviada mientras miraba a su alrededor.

La cama con dosel le pareció inmensa y le gustó el secreter apoyado contra la pared y los dos pequeños sillones tapizados en un verde más intenso que el de las paredes. Vio dos puertas y, curiosa, las abrió; una daba a un cuarto de baño y la otra a un vestidor.

No tardó más de diez minutos en deshacer las maletas. Estaba ansiosa por conocer el castillo.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «La Sangre De Los Inocentes»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «La Sangre De Los Inocentes» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «La Sangre De Los Inocentes»

Обсуждение, отзывы о книге «La Sangre De Los Inocentes» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x