Victoria Mora - Arderá la memoria

Здесь есть возможность читать онлайн «Victoria Mora - Arderá la memoria» — ознакомительный отрывок электронной книги совершенно бесплатно, а после прочтения отрывка купить полную версию. В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: unrecognised, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Arderá la memoria: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Arderá la memoria»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Daniel Moyano decía que el cuento es ese medio violento, rápido y hermoso que nos saca de esta realidad, para conectarnos con otra que vislumbramos.Así Arderá la memoria nos invita a asomarnos a pequeños universos que reivindican la necesidad de no olvidar lo que habita en nosotros: nuestra historia reciente, la infancia, el horror, la esperanza insobornable, la recuperación de lo perdido. Los personajes de estos cuentos viven enfrentándose a la complejidad de una vida que no es fácil. Algunos se harán cargo de su destino con dignidad, otros se harán eco del horror; todos pagarán las consecuencias. Arderá la memoria es una invitación a dejarse llevar por la fugacidad de las historias breves, que no por eso dejarán de ser intensas. No se saldrá indemne de estas páginas.

Arderá la memoria — читать онлайн ознакомительный отрывок

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Arderá la memoria», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Le costaba mantener el volante derecho, iba despacio, en zigzag. La noche oscura, nublada, vacía, era la única que lo acompañaba. O eso creía. Manejaba por la esquina de la plaza cuando escuchó un quejido, miró en el espejo retrovisor. Ahí estaba, imperturbable, con la boca partida, seca, desnuda, gorda. Basta, andate, hija de puta, me tenés podrido . Esa palabra fue mágica. Ella desapareció dejando tras sí un rastro de putrefacción como él nunca había olido, penetrante, le ardía la nariz y le lloraban los ojos. La ventanilla baja era inútil, ni todo el aire del pueblo podía sacarle ese olor de encima.

Envuelto en una nube propia de alcohol y podredumbre estacionó en la puerta de su casa, medio auto sobre la vereda. La llave no entraba en la cerradura que parecía haber achicado sus proporciones. En ese momento alguien abría del otro lado, vio alejarse a su mujer moviendo los labios. Ya desplomado en el sillón, escuchó como un eco, eso que en la infancia su madre le repetía hasta el cansancio a su padre: vos y ese bar de mierda, me tenés cansada, hasta cuándo pensás seguir así. Ahora el turno era de él, estaba harto de esas frases tan venidas de otro tiempo.

No tuvo más remedio que hacer lo que tenía que hacer: con los pies firmes en el suelo y su mano derecha apoyada en el brazo del sillón, se paró. La tenía enfrente. Los pelos se le enredaron en las manos, la arrastró hasta la habitación, en la puerta ella se aferró al marco, resistiendo. La piña justo en el medio de la cara no resonó tanto como el ruido del cuerpo cayendo sobre las baldosas, ese mismo ruido que alguna vez creyó escuchar subiendo desde el Río de La Plata.

Mingo se levantó con la cabeza a punto de estallarle, se tomó algo para el dolor. Silvia estaba acostada en la otra habitación de espaldas, de cara a la pared. Se acordaba vagamente de haberle pegado, quizás tendría que decir algo. No, era muy pronto para intentar excusas, fue hasta la puerta de calle. ¿Qué iba a hacer todo el domingo con ella? El bar era su única opción.

Unos y otros entraron y salieron, sentándose en las mesas y en la barra, arrimando vasos. Esta vez nadie se acercó a él. Se hizo la hora de cerrar, entre dos lo sacaron a la vereda.

Sin recuerdo de un auto estacionado en la puerta, se largó a caminar las veinte cuadras que lo separaban de su casa. Llegó al paso a nivel, se detuvo cerca del cruce de vías, apoyado en un árbol quiso recuperar aire, le costaba respirar, a punto de recomenzar su marcha la vio. Del otro lado, la Gorda caminaba hacia él, desnuda, enorme, sonreía, venía directo a su encuentro. Ya no tenía la boca partida, hablaba, movía los labios, lo llamaba, pronunciaba su nombre. Sonó la bocina del tren. Él solo pensaba que esta vez iba a reconciliarse, explicarle que él hizo su trabajo, que fue un buen empleado, que tenía que dejarlo en paz. Se acercó, uno, dos, tres, pasos, uno más y ya podría decirle al oído todo lo que pensaba. A punto de tocarla, oyó una bocina que lo dejó sordo, el tren estaba demasiado cerca como para ensayar una huida.

Конец ознакомительного фрагмента.

Текст предоставлен ООО «ЛитРес».

Прочитайте эту книгу целиком, купив полную легальную версию на ЛитРес.

Безопасно оплатить книгу можно банковской картой Visa, MasterCard, Maestro, со счета мобильного телефона, с платежного терминала, в салоне МТС или Связной, через PayPal, WebMoney, Яндекс.Деньги, QIWI Кошелек, бонусными картами или другим удобным Вам способом.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Arderá la memoria»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Arderá la memoria» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «Arderá la memoria»

Обсуждение, отзывы о книге «Arderá la memoria» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x