Para los habitantes de las pequeñas historias, que son parte de una historia más grande.
Índice
Portada
Portada interior
Dedicatoria Para los habitantes de las pequeñas historias, que son parte de una historia más grande.
Nota de la autora NOTA DE LA AUTORA Las cosas grandes empiezan siendo pequeñas. Todos los días vemos a nuestro alrededor cómo las semillas se convierten en árboles, las nubes se transforman en tormentas y las palabras crecen hasta formar libros. Lo vemos tan a menudo que ya no nos sorprende, y, sin embargo, aún somos capaces de contemplar una semilla, una nube o una palabra y creer que estamos ante algo insignificante. Cuando escribí mi primer microcuento, en agosto de 2017, pensé que estaba ante una de esas cosas «insignificantes». Incluso cuando tomé la inusual (para mí) decisión de compartir ese microcuento en Twitter, y cuando me planteé el reto de escribir uno al día, mentiría si dijera que no pensaba en ello como un proyecto que duraría, como mucho, unas pocas semanas. No habría sido la primera vez que me comprometía a hacer algo «todos los días» solo para perder interés al cabo de un tiempo. Si alguien me hubiese dicho que más de tres años después seguiría escribiendo microcuentos diarios, y que incluso publicaría un libro con algunos de ellos, dudo mucho que lo hubiese creído. Y es que, cuando las cosas pequeñas se presentan ante nosotros, rara vez las vemos como algo más. Confío en que al leer este libro tengas una visión más amplia y una imaginación más despierta que yo. Espero que estas diminutas historias te lleven, como a mí, por senderos inesperados, llenos de aventuras, reflexiones y sueños. Y espero que, si alguna de ellas permanece contigo después de terminar la lectura, le concedas la libertad de echar raíces y convertirse, quizás, en parte de una historia mayor.
Historias
Agradecimientos
Créditos
Autora/Ilustradora
NOTA DE LA AUTORA
Las cosas grandes empiezan siendo pequeñas. Todos los días vemos a nuestro alrededor cómo las semillas se convierten en árboles, las nubes se transforman en tormentas y las palabras crecen hasta formar libros. Lo vemos tan a menudo que ya no nos sorprende, y, sin embargo, aún somos capaces de contemplar una semilla, una nube o una palabra y creer que estamos ante algo insignificante.
Cuando escribí mi primer microcuento, en agosto de 2017, pensé que estaba ante una de esas cosas «insignificantes». Incluso cuando tomé la inusual (para mí) decisión de compartir ese microcuento en Twitter, y cuando me planteé el reto de escribir uno al día, mentiría si dijera que no pensaba en ello como un proyecto que duraría, como mucho, unas pocas semanas. No habría sido la primera vez que me comprometía a hacer algo «todos los días» solo para perder interés al cabo de un tiempo.
Si alguien me hubiese dicho que más de tres años después seguiría escribiendo microcuentos diarios, y que incluso publicaría un libro con algunos de ellos, dudo mucho que lo hubiese creído. Y es que, cuando las cosas pequeñas se presentan ante nosotros, rara vez las vemos como algo más.
Confío en que al leer este libro tengas una visión más amplia y una imaginación más despierta que yo. Espero que estas diminutas historias te lleven, como a mí, por senderos inesperados, llenos de aventuras, reflexiones y sueños. Y espero que, si alguna de ellas permanece contigo después de terminar la lectura, le concedas la libertad de echar raíces y convertirse, quizás, en parte de una historia mayor.
Конец ознакомительного фрагмента.
Текст предоставлен ООО «ЛитРес».
Прочитайте эту книгу целиком, купив полную легальную версию на ЛитРес.
Безопасно оплатить книгу можно банковской картой Visa, MasterCard, Maestro, со счета мобильного телефона, с платежного терминала, в салоне МТС или Связной, через PayPal, WebMoney, Яндекс.Деньги, QIWI Кошелек, бонусными картами или другим удобным Вам способом.