• Пожаловаться

Vernor Vinge: Naufragio en el tiempo real

Здесь есть возможность читать онлайн «Vernor Vinge: Naufragio en el tiempo real» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию). В некоторых случаях присутствует краткое содержание. Город: Barcelona, год выпуска: 1988, ISBN: 84-06-485-8, издательство: Ediciones B, категория: Фантастика и фэнтези / на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале. Библиотека «Либ Кат» — LibCat.ru создана для любителей полистать хорошую книжку и предлагает широкий выбор жанров:

любовные романы фантастика и фэнтези приключения детективы и триллеры эротика документальные научные юмористические анекдоты о бизнесе проза детские сказки о религиии новинки православные старинные про компьютеры программирование на английском домоводство поэзия

Выбрав категорию по душе Вы сможете найти действительно стоящие книги и насладиться погружением в мир воображения, прочувствовать переживания героев или узнать для себя что-то новое, совершить внутреннее открытие. Подробная информация для ознакомления по текущему запросу представлена ниже:

Vernor Vinge Naufragio en el tiempo real

Naufragio en el tiempo real: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Naufragio en el tiempo real»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

En la esperada continuación de LA GUERRA DE LA PAZ, una desastrosa extinción ocurrida en el siglo XXIII amenaza la continuidad de la civilización. Los poseedores del poder tecnológico intentan recoger a todos los supervivientes que van siendo liberados del éstasis de las Burbujas e incorporarlos al proyecto final, que no es otro que reconstruir la civilización con una diezmada humanidad. Pero uno de los líderes ha sido “asesinado” abandonado en el tiempo real, mientras el resto de la humanidad se encuentra en gracias a las Burbujas. En este caso, la reflexión de Vinge sobre el futuro, merecedora del Premio Prometheus otorgado por la Sociedd Libertaria Futurista, toma la forma conductora de una novela de misterio en un ambiente de ciencia ficción . El protagonista, Will Brierson, policía del siglo XXI, debe encontrar al “asesino” y desentrañar por qué se intenta obstaculizar la reconstrucción de la civilización. Finalista del Premio Hugo 1987

Vernor Vinge: другие книги автора


Кто написал Naufragio en el tiempo real? Узнайте фамилию, как зовут автора книги и список всех его произведений по сериям.

Naufragio en el tiempo real — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Naufragio en el tiempo real», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема

Шрифт:

Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Juan temblaba. Miró a Yelén. Ella le devolvió la mirada y luego miró a Wil. No estaba convencida.

—Yelén —dijo Wil sin alzar la voz—. ¿Lo recuerdas? El día que Mudge fue asesinado, afirmó que Chanson se había dedicado a la religión.

Yelén meneó la cabeza. Aquel recuerdo hacía tres días que había desaparecido.

Al fin, Chanson habló en voz alta:

—¿No puedes ver cómo te has engañado a ti mismo, Wil? Tienes la evidencia de esto por todas partes. ¿Por qué crees que los ficheros de Lu referentes a la civilización, estaban prácticamente inservibles? ¡Porque ella jamás estuvo allí! En el mejor de los casos aquellos documentos son de segunda mano, a los que se han añadido pruebas contra mí o quien fuera que representara una amenaza para ella. Wil, por favor. Puedo estar equivocado en los detalles, pero sea lo que sea la criatura Lu, ha demostrado que es capaz de sacrificarnos a todos con tal de salirse con la suya. No importa lo que te haya hecho, debes ser capaz de ver esto.

La risa de Mónica fue casi un cacareo.

—¡En qué lío te has metido, Brierson! Los hechos explican perfectamente cualquiera de las dos teorías. Y Della Lu anda de cacería por el espacio interestelar.

Wil simuló que estaba tomando en consideración este comentario, porque necesitaba tiempo para pensar. Luego movió negativamente la cabeza y continuó con la misma calma de antes:

—Tal vez no lo creas, pero hay datos que Juan jamás pensó en alterar. El diario de Marta, por ejemplo… Ya lo sé, Yelén. Lo has estudiado durante centenares de años, y conocías a Marta mucho mejor que yo. Pero Marta sabía que no había sido abandonaba debido a un simple sabotaje. Sabía que el enemigo conocía lo que había dejado en los montones de piedras y podía destruir cuanto quisiera. Y hasta algo peor, si ella lograba esconder algún mensaje y hacértelo llegar, cuando lo hubieses comprendido, el simple hecho de entenderlo podía desencadenar un ataque.

»Pero yo soy un tecno-min, fuera de tanta automatización. Marta captó mi atención con el único incidente que sólo ella y yo podíamos conocer. Yelén, después de la fiesta de los Robinson… yo no… yo nunca traté de aprovecharme de Marta —miró a Yelén a la cara, deseando ver en ella que le creía.

Como no obtuvo respuesta, prosiguió:

—Durante los últimos años de su vida, Marta hizo un terrible doble juego. A nosotros nos contó la historia de su valerosa supervivencia y de su derrota, pero al mismo tiempo dejó pistas que confiaba que me señalarían a Juan.

Eran muy sutiles. Llamaba a sus amigos, los monos pescadores, dándoles nombres de la gente de nuestra colonia. Siempre había un Juan Chanson, una criatura solitaria que disfrutaba mirándola a ella. En el último día de su vida, mencionó que todavía estaba allí, vigilándola. Ella sabía que el verdadero Juan Chanson la acechaba.

Juan dio un golpe sobre el banco.

—¡Maldita sea! Se puede descubrir cualquier mensaje si la manera de codificarlo es lo bastante demencial.

—Por desgracia, tienes razón. Y si ella no hubiera podido hacer algo más esto quedaría en empate, Juan. Pero a pesar de todas sus desgracias, Marta tuvo buena suerte. Uno de sus monos pescadores era un mutante, mayor y más listo que cualquier pescador que hayamos podido encontrar. La seguía a todas partes y trató de imitar su manera de construir los montones de piedras. No era gran cosa, pero tenía un aliado en el tiempo real —sonrió tristemente—. Le llamaba W. W. Brierson. Adquirió mucha práctica construyendo montones de piedras, siempre en la misma posición relativa al Lago Pacista. Al final se lo llevó hacia el norte, y lo dejó en un bosque normal, lejos de la zona vitrificada. No sé si estabas vigilando desde muy cerca, Juan, pero no pudiste ver lo que el animal se llevó, ni supiste que había construido un montón de piedras, porque Marta jamás estuvo allí.

Los ojos de Juan atravesaron a Yelén y luego volvieron a fijarse en Wil, pero no dijo nada.

—Hace cuatro días que te enteraste de la existencia de este montón, desde que yo se lo conté a Yelén. Quisiste demostrar todo tu poder, y asesinar a la mitad de la raza humana para evitar que yo pudiera hacerme con él —salió de la plataforma y anduvo lentamente hacia el hombrecito—. Bueno, Juan. No tuviste éxito. Yo había visto lo que Marta quería decirme cuando no tenía que hablar con parábolas. Cualquiera puede verlo, también. Y a pesar de todas las conspiraciones que atribuyas a Della Lu, sospecho que la evidencia física convencerá a Yelén y a sus autones de laboratorio.

Yelén se había apartado de Chanson. Tung apretaba los labios, convirtiéndolos en una línea estrecha. Hasta en el caso de que no llegue a confesar, puedo ser capaz de vencer, pensó Wil.

Juan miró a su alrededor, y luego a Wil otra vez.

—Por favor. Todo lo estás interpretando mal. Yo no asesiné a Marta. Realmente quiero que la colonia sea un éxito. Y he sacrificado muchas más cosas que vosotros para poder salvarla; si no lo hubiera hecho así, ninguno de vosotros habría sobrevivido durante estos cincuenta megaaños. Pero ahora, esto mismo me hace parecer culpable. Tengo que convenceros… Mira, Wil. Tienes razón en lo que se refiere a Mudge y a mí; jamás debería haber intentado esconderlo. Me avergüenzo de haber creído alguna vez en todas aquellas tonterías de niños. Pero entonces era joven, y mis pesadillas me seguían hasta mi casa desde mi trabajo. Necesitaba creer en algo. Abandoné mi trabajo, lo abandoné todo, a cambio de sus promesas.

»Salimos del estasis en el 2295, un poco antes de cuando la numerología de Mudge anunciaba que Cristo iba a dar el Gran Espectáculo. Allí no había más que ruinas, una civilización destrozada y una especie exterminada. Mudge revisó sus camelos y llegó a la conclusión que nos habíamos pasado, que Cristo ya había llegado y se había vuelto a marchar. ¡Maldito chiflado! No podía aceptar nada de lo que veíamos. Algo había visitado el Sistema Solar a mediados del siglo veintitrés, pero no era nada sacro. La evidencia de una invasión alienígena estaba por todas partes. Mudge había llegado con poco más que una tela de arpillera y cenizas. Yo llevaba abundante equipo. Pude efectuar análisis que respaldaron mis afirmaciones. Yo tenía poder para salvar a los humanos que todavía estaban en estasis.

»Yelén, desde entonces mi objetivo fue el mismo que el tuyo. Hasta el punto que mientras vosotros, los tecno-max, seguíais en estasis, yo ya hacía mis planes. La única diferencia era que yo conocía la existencia de los alienígenas. Pero jamás pude convencer de ello a Mudge. En realidad, las señales eran tan sutiles que empecé a preguntarme si alguien más podría creerme.

Chanson se había puesto en pie y su manera de hablar se hizo más rápida.

»A menos que nos protegiéramos contra los invasores, todos los buenos deseos del mundo no harían resucitar a la especie humana. Yo tenía que hacer algo. Yo… Yo incrementé alguna evidencia. Detoné cargas nucleares en algunas ruinas. ¡Seguramente, ni un hombre ciego dejaría de darse cuenta de esto! —miró acusadoramente a Tammy y a Yelén—. Pero cuando regresasteis al tiempo real, no quedasteis convencidas. No podíais aceptar ni siquiera la más clara de las evidencias… Lo intenté. Lo intenté. Durante los siguientes dos mil años viajé por todo el Sistema Solar, descubriendo las señales de la invasión, haciéndolas más aparentes para que hasta los idiotas no pudieran dejar de verlas.

»Al final, tuve un pequeño éxito. W. W. Sánchez tuvo la paciencia necesaria para examinar los hechos, y la falta de prejuicios para creer. Os convencimos a todos para que fuerais algo más precavidos. Pero el peso de la vigilancia todavía recaía sobre mí. Nadie más quería poner centinelas en los confines del Sistema Solar. Al correr de los años, pude destruir dos sondas alienígenas, pero todavía Sánchez fue el único que quedó convencido —miraba más allá de Wil, como si hablara consigo mismo—. Me gustaba Bill Sánchez. Hubiera deseado que no hubiera abandonado; aunque su colonia era algo pequeña para tener éxito. Le visité allí, en varias ocasiones. Estaba en una larga e idílica ladera. Bill quería hacer investigaciones, pero lo único que tenía era la cinta perforada que había encontrado en Charon. Estaba obsesionado por ella; la última vez que le vi llegó a decir que era una falsificación —una expresión ligera de pena pasó por la cara de Juan—. Bueno, aquella colonia era demasiado pequeña para poder sobrevivir, desde luego.

Читать дальше
Тёмная тема

Шрифт:

Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Naufragio en el tiempo real»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Naufragio en el tiempo real» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё не прочитанные произведения.


Juan Aguilera: El refugio
El refugio
Juan Aguilera
Robert Sawyer: Factor de Humanidad
Factor de Humanidad
Robert Sawyer
Vernor Vinge: La guerra de la paz
La guerra de la paz
Vernor Vinge
César Vidal: Artorius
Artorius
César Vidal
Отзывы о книге «Naufragio en el tiempo real»

Обсуждение, отзывы о книге «Naufragio en el tiempo real» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.