Petros Márkaris - Suicidio perfecto

Здесь есть возможность читать онлайн «Petros Márkaris - Suicidio perfecto» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: Триллер, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Suicidio perfecto: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Suicidio perfecto»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Tras haber sobrevivido al disparo recibido mientras resolvía su anterior caso (Defensa cerrada), el comisario Jaritos arrastra una aburridísima existencia de convaleciente lejos del ajetreo policial. Una noche, mientras ve pasar las noticias por el odiado televisor, una escena lo arranca de cuajo de la mediocre monotonía en que ha caído: en medio de una entrevista, un célebre empresario griego saca una pistola y comete un acto que deja pasmados a todos los televidentes. ¿Por qué un hombre de negocios tan discreto y bien considerado realiza una acción tan espectacular? El instinto del viejo sabueso despierta y Jaritos se pone en movimiento. Aunque está de baja y otra persona ha ocupado su despacho en las dependencias de la policía, el olfato del comisario es insustituible para esclarecer un caso cuyas repercusiones aumentan cada día.
Las pesquisas de Jaritos nos llevarán por la Atenas olímpica, donde se percibe la corrupción inmobiliaria y la modernización creciente convive con el café al más puro estilo griego.

Suicidio perfecto — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Suicidio perfecto», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Capítulo 42

La idea me asaltó por la noche. De repente, me incorporé en la cama con un sobresalto. No sé si la ocurrencia surgió de un sueño o al margen de él, porque no recuerdo haber estado soñando con Logarás y los tres suicidas en esos momentos. Cuando me despierto por la noche y me siento aturdido, hago lo que hace todo el mundo: voy a la cocina a beber un vaso de agua. Después me encontré en la sala de estar, sentado con medio cuerpo dentro y medio en la terraza.

Los datos que Logarás enviaba a Favieros, Stefanakos y Vakirtzís y que luego destruía o recuperaba eran pruebas incriminatorias. Logarás tenía pruebas y los amenazaba con divulgarlas. Las biografías constituían una solución alternativa, el mal menor: o aceptaban suicidarse delante de testigos y él publicaba sus biografías ditirámbicas, garantizándoles su buena fama póstuma, o seguían con vida y él los arrastraba por el lodo. Les enviaba los documentos comprometedores para convencerlos de que no se trataba de un farol. Terminada la lectura, los documentos se borraban o eran devueltos al remitente, por obra y gracia del programa que mencionó Spiros. Las biografías, sin embargo, se conservaban durante más tiempo, para que las leyesen y se cerciorasen de que no les daba gato por liebre.

No obstante, seguía en el aire la pregunta de con qué pruebas contaba Logarás y dónde las había encontrado. Y esta otra, resultante de la primera: si poseía informaciones tan concluyentes, ¿cómo es posible que no haya trascendido hasta ahora, tanto más cuanto que aludía a tres personajes eminentes? ¿Es concebible que los tres tuvieran tachas tan terribles en su pasado que prefirieran la muerte a su publicación, y que nadie las conociese salvo Logarás? Y, si nadie había encontrado estas pruebas hasta ahora, ¿cómo las halló él?

Cuando, al fin, regresé a la cama, en torno de las seis de la mañana, las preguntas seguían sin respuesta y el sueño me había abandonado. Finalmente, me quedé medio dormido hacia las ocho pero la llamada de Guikas volvió a sobresaltarme. Llamaba para comunicarme que el ministro nos esperaba a las diez. Antes de irme, telefoneé a Kula y le indiqué que recogiera a su primo y fueran a registrar el ordenador de Favieros en Erige. En realidad, no alimentaba grandes esperanzas de que descubriesen algo relevante pero, a partir de cierto punto, más vale no dejar piedra por mover.

Ahora estoy sentado junto a Guikas ante el escritorio del ministro y lo observo mientras compara las dos copias de la biografía de Vakirtzís, la que me envió a mí y la que encontramos en su ordenador. He traído ambas para que las confronte y compruebe que son idénticas.

El ministro levanta la cabeza y me pregunta lentamente:

– ¿Cree usted que mandó copias de las biografías a los tres suicidas?

Le explico mi teoría, que Guikas ya escuchó por el camino y dio por válida: en mi opinión, el suicidio público era la condición impuesta por Logarás para hacer circular las biografías. Luego le cuento mis reflexiones de la madrugada: que Logarás había reunido pruebas en contra de ellos y que les ofrecía las biografías a modo de salida honorable. Los obligó a elegir entre preservar su buen nombre suicidándose o vivir en la ignominia.

– ¿Qué pruebas podía tener ese Logarás? -pregunta el ministro.

– Sólo lo sabremos cuando lo desenmascaremos. Creo que es alguien de su entorno inmediato y, con toda probabilidad, de su juventud.

Su rostro refleja su desconcierto.

– ¿Cómo ha llegado a esta conclusión?

– Los hechos que tan desesperados estaban por ocultar tienen que pertenecer al pasado. Si se tratase de escándalos actuales, los conocerían todos los periodistas y los habrían aireado hace tiempo. Me atrevería a afirmar que los unía un secreto compartido. No es casual que los tres tuvieran un pasado en común y siguieran colaborando en el presente, aunque fuera por la fuerza, como en el caso de Vakirtzís.

El ministro nos mira alternativamente con aprobación.

– ¿Qué posibilidades tenemos de descubrir la verdadera identidad de Logarás?

– Sólo una: que se delate él solo -responde Guikas-. Nosotros no podemos hacerlo por nuestros medios. Se esconde tras un seudónimo y, hasta ahora, ha conseguido borrar sus huellas por completo.

El ministro se apoya en el respaldo de su sillón, decepcionado.

– En otras palabras, nos tiene pillados.

– No exactamente. Podemos seguir el camino inverso -contesto-. Investigar el pasado de los tres suicidas para descubrir el secreto que compartían. Si lo conseguimos, es muy probable que averigüemos también la identidad de Logarás.

– ¿Qué necesitan para ello?

– No sólo movilizar el departamento -interviene Guikas-, sino también la Dirección de Delitos Financieros y la Comisión de Obras Olímpicas.

– ¿No podría tratarse de algo relacionado con la dictadura? A lo mejor sucumbieron a las torturas y traicionaron a sus camaradas, por ejemplo, y Logarás lo sabía.

– Esas historias ya han prescrito, señor ministro. ¿Quién iba a darles importancia?

– Además, es poco probable que sucumbieran los tres -añado-. Estoy convencido de que, sea el que sea, este secreto es común y atañe, como mínimo, a los tres que ya se han quitado la vida. Ojalá sean los únicos, para que no haya nuevas muertes.

– Está bien. Me ocuparé de informar a la Comisión de Obras. Pero conduzcan la investigación con la máxima discreción posible, por favor: no queremos que se produzcan filtraciones.

– Si hemos sido discretos hasta ahora, seguiremos siéndolo -lo tranquiliza Guikas-. La investigación extraoficial llevada a cabo por el comisario ha demostrado ser eficaz.

No sé si me será posible continuar investigando desde casa o si habré de reinstalarme en el despacho. Ya lo decidiré más adelante, según las circunstancias.

Regresamos a jefatura en el coche oficial de Guikas. Después del suicidio de Vakirtzís me lleva entre algodones.

– Este asunto me ha complicado la vida -refunfuña mientras bajamos por la avenida del Mediterráneo-. Me ha obligado a interrumpir mis vacaciones para volver al trabajo.

– Y yo he tenido que aplazarlas, aunque esté de baja-repongo, para que no se crea el único sacrificado.

– No me importarían las vacaciones si no fuera por mi mujer. La dejé en Spetses y me llama cada día para preguntarme cuándo volveré. Es una guerra de nervios.

– Le comprendo -digo. Me mira y asiento levemente con la cabeza. Nos entendemos sin necesidad de añadir una palabra.

Cuando llegamos a jefatura, subo directamente al tercer piso y me dirijo al despacho de mis ayudantes. Dermitzakis está ordenando unas carpetas mientras Vlasópulos hojea una revista de equipos estereofónicos y altavoces. Al verme se levanta bruscamente y exclama «¡Señor comisario!», intentando esconder la revista en un cajón.

– Tranquilo. Sigo de baja, ¿lo has olvidado?

Dermitzakis se da la vuelta y me saluda con un «¡Bienvenido, señor comisario!».

– Escuchad con atención -les pido mientras cierro la puerta del despacho-. Ya sabéis de los suicidios de Favieros, Stefanakos y Vakirtzís.

– ¿Cómo no íbamos a saberlo? Están en boca de todo el país -comenta Dermitzakis.

– Quiero que investiguéis su pasado. Sistemáticamente y a fondo. Y, sobre todo, con la más absoluta reserva. No debe trascender nada. Nadie debe enterarse de ello.

– ¿Por qué? -pregunta Vlasópulos.

– ¿Qué te dije la última vez que pasé por aquí? Si os pido algo, lo haréis sin pedir explicaciones.

– Es cierto, señor comisario.

– ¿Qué estamos buscando, exactamente? -tercia Dermitzakis.

– No lo sé. Es probable que los tres se suicidaran por el mismo motivo, así que debe de tratarse de algo que incumbía a los tres. No puedo revelaros detalles, ni siquiera orientaros. Si necesitáis ayuda, os ponéis en contacto conmigo o directamente con el director. Ya hemos hablado de ello.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Suicidio perfecto»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Suicidio perfecto» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Petros Markaris - Deadline in Athens
Petros Markaris
Petros Márkaris - Noticias de la noche
Petros Márkaris
Petros Márkaris - Defensa cerrada
Petros Márkaris
Petros Márkaris - El Accionista Mayoritario
Petros Márkaris
Petros Márkaris - Muerte en Estambul
Petros Márkaris
Petros Márkaris - Con el agua al cuello
Petros Márkaris
Apostolos Doxiadis - Uncle Petros and Goldbach
Apostolos Doxiadis
Отзывы о книге «Suicidio perfecto»

Обсуждение, отзывы о книге «Suicidio perfecto» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x