Omraam Mikhaël Aïvanhov - La energía sexual o el dragón alado

Здесь есть возможность читать онлайн «Omraam Mikhaël Aïvanhov - La energía sexual o el dragón alado» — ознакомительный отрывок электронной книги совершенно бесплатно, а после прочтения отрывка купить полную версию. В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: unrecognised, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

La energía sexual o el dragón alado: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «La energía sexual o el dragón alado»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

"La energía sexual es una energía que puede compararse con el petróleo, dice el Maestro Omraam Mikhaël Aïvanhov: quema a los ignorantes y a los torpes (esta fuerza quema su quintaesencia) mientras que sirve a aquellos que saben utilizarla, los Iniciados, para volar por el espacio".

La energía sexual o el dragón alado — читать онлайн ознакомительный отрывок

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «La energía sexual o el dragón alado», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

II

AMOR Y SEXUALIDAD

Pregunta: “Maestro, ¿querría usted decirnos la diferencia que existe entre el amor y la sexualidad, y cómo podemos utilizar la sexualidad en la vida espiritual?”

He aquí una pregunta muy interesante, que atañe a lo más importante que hay en la vida, y que concierne a todo el mundo. Sí, tanto a los jóvenes como a los viejos...

Yo no diría que estoy cualificado para responder a todas las preguntas que comporta este problema. Lo único que me diferencia de los demás, es que me gusta ver las cosas desde un cierto punto de vista, y he consagrado toda mi vida a la adquisición de este punto de vista. En primer lugar, os diré unas palabras para que no empecéis a criticarme diciendo: “Yo he leído libros sobre el amor y la sexualidad donde decían muchas más cosas. ¡Qué ignorante es este instructor!” Pues sí, soy ignorante, ¿por qué no? Pero los que han escrito esos libros no tenían mi punto de vista y no han entendido esta cuestión como yo la entiendo. Podéis, por lo tanto, si así lo queréis, informaros leyendo todo lo que los psicoanalistas y los médicos han escrito sobre la sexualidad, pero yo quiero llevaros hacia otro punto de vista casi desconocido hasta ahora.

¿Cuál es este punto de vista? Me he entretenido en representarlo mediante la siguiente imagen. Un profesor diplomado en tres o cuatro universidades trabaja en su laboratorio donde hace todo tipo de investigaciones y experiencias... Pero he aquí que su hijo de doce años, que está jugando en el jardín, se ha subido a un árbol, y desde allí arriba grita: “Papá, veo llegar a mi tío y a mi tía...” El padre, que no ve nada, pregunta al niño: “¿A qué distancia están? ¿qué traen?” Y el niño le da toda la información. A pesar de toda su ciencia, el padre no ve nada, mientras que el niño, que es pequeño e ignorante, es capaz de ver muy lejos, simplemente porque su punto de vista es diferente: él ha subido muy alto, mientras que su padre se ha quedado abajo.

Evidentemente, esto no es más que una imagen, pero os hará comprender que si bien es útil tener facultades intelectuales y conocimientos, el punto de vista es todavía más importante. Según observemos el universo desde el punto de vista de la tierra o desde el punto de vista del sol, obtenemos resultados muy diferentes. Todo el mundo dice: “El sol sale, el sol se pone...” Sí, es cierto, pero también es falso. Es cierto desde el punto de vista de la tierra; desde el punto de vista geocéntrico tenéis razón. Pero desde el punto de vista heliocéntrico, solar, es falso. Todos miran la vida desde el punto de vista de la tierra, y, evidentemente, desde ese punto de vista tienen razón. Ellos dicen: “Hay que comer, ganar dinero, disfrutar de los placeres...” Pero si se situasen en el punto de vista solar, es decir, en el punto de vista divino, espiritual, verían las cosas de manera distinta.3 Y es ese punto de vista el que yo poseo, el que me permite presentaros la naturaleza del amor y de la sexualidad de una manera totalmente diferente.

En principio, parece difícil separar la sexualidad del amor. Todo viene de Dios, y todo lo que se manifiesta a través del hombre como energía, es, en su origen, una energía divina; pero esta energía produce efectos diferentes según el conductor a través del cual se manifiesta. Podemos compararla con la electricidad. La electricidad es una energía de la que ignoramos su naturaleza, pero cuando pasa a través de una lámpara se convierte en luz; al pasar por un radiador, se manifiesta como calor; al pasar por un imán se convierte en magnetismo; al pasar por un ventilador se transforma en movimiento.

De la misma manera, existe una fuerza cósmica original que adopta uno u otro aspecto según el órgano del hombre a través del cual se manifiesta. A través del cerebro, se convierte en inteligencia, raciocinio; a través del plexo solar o del centro Hara, se convierte en sensación y sentimiento; cuando pasa por el sistema muscular, se manifiesta como movimiento; y cuando finalmente pasa por los órganos genitales, se traduce en atracción por el otro sexo. Pero siempre es la misma energía.

Le energía sexual viene, pues, de muy alto, pero al pasar por los órganos genitales, produce sensaciones, una excitación, un deseo de acercamiento, y cabe perfectamente que en esas manifestaciones no haya absolutamente ningún amor. Es lo que ocurre en los animales. En ciertos períodos del año, se acoplan, pero ¿lo hacen por amor? A veces se destrozan, y en cierta clase de insectos, como la mantis religiosa, o en ciertas arañas, la hembra se come al macho. ¿Es eso amor? No, es pura sexualidad. El amor comienza cuando esta energía pulsa al mismo tiempo otros centros en el hombre: el corazón, el cerebro, el alma y el espíritu. Llegado a ese punto, esta atracción, este deseo que tenemos de unirnos a alguien, se clarifica, se ilumina mediante pensamientos y sentimientos, mediante un gusto estético; ya no buscamos una satisfacción puramente egoísta en la que no contamos en absoluto con la pareja. El amor es sexualidad, si así lo queréis, pero expandida, iluminada, transformada. El amor posee tal cantidad de grados y manifestaciones, que resulta imposible enumerarlas y clasificarlas. Puede ocurrir, por ejemplo, que un hombre ame a una joven y bella mujer, pero sin ser apenas atraído físicamente por ella: él quiere, por encima de todo, verla feliz, con buena salud, instruida, rica, bien situada en la sociedad, etc. ¿Cómo explicar eso? Eso no es únicamente sexualidad, sino amor; y es, por lo tanto, un grado superior. Pero debe haber, a pesar de todo, un poco de sexualidad en este amor, porque podemos hacernos la siguiente pregunta: ¿Porqué este hombre no se ha unido a otra persona, a una mujer vieja y fea, o a otro hombre? Sí, si analizamos, descubriremos indicios de sexualidad. La sexualidad... el amor... sólo es una cuestión de grados. Es amor en el momento en que no os quedáis solamente con algunas groseras sensaciones físicas, sino que sentís los grados superiores de esta fuerza cósmica que os invade, y comulgáis con las regiones celestes. Pero, cuánta gente, una vez saciado su deseo, se separa o incluso empieza a pelearse. Lo único importante para ellos es descargar, liberar una tensión, y si al cabo de algún tiempo esta energía se acumula de nuevo en ellos, se vuelven sonrientes y tiernos, pero el único fin es el de satisfacer de nuevo su animalidad. ¿Qué amor hay ahí? Es normal que tengamos necesidades y deseos, sobre todo cuando somos jóvenes. La naturaleza, que lo ha previsto todo, ha creído que eso era necesario para la propagación de la especie. Si el hombre y la mujer se quedasen fríos el uno ante el otro, si estos se hubieran liberado de impulsos e instintos, se habría terminado la humanidad. Es, por lo tanto, la naturaleza la que empuja a las criaturas a unirse físicamente, pero el amor es otra cosa.

Podríamos decir que la sexualidad es una tendencia puramente egocéntrica que empuja al ser humano a no buscar nada más que su placer, y ello puede llevarle a la mayor crueldad, porque él no piensa en el otro, sólo busca satisfacerse. Mientras que el amor, el verdadero amor, piensa en primer lugar en la felicidad del otro, está basado en el sacrificio; sacrificio de tiempo, de energía, de dinero para ayudar al otro, para permitirle expansionarse y desarrollar todas sus posibilidades. Y la espiritualidad comienza, precisamente, cuando el amor domina a la sexualidad, cuando el ser humano se vuelve capaz de arrancar algo de sí mismo para el bien del otro.

Mientras no se es capaz de privarse de algo, no hay amor. Cuando un hombre se lanza sobre una joven, ¿piensa en el daño que puede hacerle? No, él es capaz de matarla para satisfacer sus instintos. Eso es la sexualidad, un instinto puramente bestial.

Diréis: “Es evidente, no hay nada de divino ahí…” Sí, pero la sexualidad es de origen divino, sin embargo, mientras el ser humano no sepa dominarse, sus manifestaciones, evidentemente, no son divinas. Lo que hay de positivo en la sexualidad es que trabaja en la propagación de la especie, pero si sólo la orientamos hacia el placer, la desperdiciamos. Actualmente se han inventado cosas increíbles en ese campo. Está la píldora, naturalmente, pero también se venden una gran cantidad de productos y de objetos que ni siquiera quiero nombrar. No se trata aquí de la propagación de la especie, sino exclusivamente del placer.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «La energía sexual o el dragón alado»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «La energía sexual o el dragón alado» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Omraam Mikhaël Aïvanhov - La balanza cósmica (número 2)
Omraam Mikhaël Aïvanhov
Omraam Mikhaël Aïvanhov - ¿Qué es ser un hijo de Dios?
Omraam Mikhaël Aïvanhov
Omraam Mikhaël Aïvanhov - Un futuro para la juventud
Omraam Mikhaël Aïvanhov
Omraam Mikhaël Aïvanhov - Los poderes de la vida
Omraam Mikhaël Aïvanhov
Omraam Mikhaël Aïvanhov - El amor y la sexualidad
Omraam Mikhaël Aïvanhov
Omraam Mikhaël Aïvanhov - Homenaje al Maestro Peter Deunov
Omraam Mikhaël Aïvanhov
Omraam Mikhaël Aïvanhov - La armonía
Omraam Mikhaël Aïvanhov
Omraam Mikhaël Aïvanhov - En espíritu y en verdad
Omraam Mikhaël Aïvanhov
Отзывы о книге «La energía sexual o el dragón alado»

Обсуждение, отзывы о книге «La energía sexual o el dragón alado» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x