vvaa - Nouvelle-Aquitaine y sus destinos

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Nouvelle-Aquitaine le invita a viajar en el tiempo. Parta tras las huellas de la historia desde Burdeos a Poitiers, desde los restos galorromanos a las bastidas medievales, siga los caminos y corredores del tiempo que cuentan la historia de la región a través de monumentos, paisajes y... nuevas tecnologías. Embárquese en un road trip histórico por carretera, desde las cuevas a los robots y otros humanoides. Desde el cromañón hasta Futuroscope.

Prehistoria

El 8 de septiembre de 1940, Robot, el perro que acompañaba a un grupo de adolescentes de paseo, desapareció bajo tierra mientras perseguía a un conejo. El agujero en el que cayó el animal reveló al mundo entero la cueva de Lascaux ( www.lascaux.fr ), uno de los tesoros de la Prehistoria. Después de Lascaux 2 (1983) y Lascaux 3 (2012), Lascaux 4 resalta, desde 2016, la última obra maestra del arte rupestre. Alrededor de la réplica completa de la famosa cueva decorada con pinturas y grabados de la época perigordana, la escenografía invita a vivir una experiencia inmersiva y personalizada gracias a las herramientas digitales de última generación: realidad aumentada, pantallas 3D, estaciones de interpretación interactivas…

Cerca de Poitiers, en Angles-sur-l'Anglin, uno de los pueblos más bellos de Francia, también se encuentra un yacimiento prehistórico excepcional: Le roc aux sorciers (la roca de los brujos) ( www.roc-aux-sorciers.fr ) , un friso de roca tallada de cincuenta metros de largo. Gracias a los centros de interpretación, puede tomarse el tiempo que necesite para admirar todos los detalles.

En las Landas fue descubierta, en 1804, en Brassempouy, al este de Dax, la Dame à la capuche (dama de la capucha) ( www.prehistoire-brassempouy.fr ), una gigantesca estatuilla de marfil esculpida hace 25000 años. La Maison y el ArchéoParc de la Dame le dan la bienvenida hoy para compartir con usted la historia de este fabuloso descubrimiento.

Cerca de Biarritz, en Saint-Martin d'Arberoue, las cuevas de Isturitz y Oxocelhaya ( www.grottes-isturitz.com ) están catalogadas como Monumento Histórico desde 1953. Son a la vez obras maestras de la naturaleza y un yacimiento prehistórico en el que se han llevado a cabo numerosos proyectos de investigación.

Cerca de Limoges, en La-Chapelle-aux-Saints, donde se descubrió el primer esqueleto de hombre de Neandertal en 1908, un pequeño y notable museo didáctico ( www.neandertal-musee.org ) se centra en los vínculos y diferencias entre el hombre de Neandertal y el Homo Sapiens. Ofrecen un taller sobre el nacimiento del fuego, tiro con hélice, tiro con arco…

Por último, nos gustaría destacar la importancia del valle del Vézère ( www.neandertal-musee.org ), que por sí solo cuenta con 147 yacimientos que se remontan al Paleolítico y 25 cuevas decoradas.

Antigüedad

Saintes ( www.saintes-tourisme.fr ), cerca de Cognac, se llamaba entonces Mediolanum santonum y era la capital de la Galia aquitana, provincia administrativa creada por el emperador Augusto en el año 27 a. C. Algunos de los edificios que se conservan —el anfiteatro, el arco de Germánico, el acueducto galo-romano y las termas— se cuentan entre los principales restos de la antigüedad galo-romana en la región. Se pueden visitar con un libro-juego diseñado como un concurso para niños de 7 a 12 años. Un momento emocionante para compartir en vacaciones.

Entre los numerosos yacimientos arqueológicos, podemos citar: las termas de Cassinomagus, en Chassenon, entre Angulema y Limoges, uno de los monumentos antiguos mejor conservados de Europa; la villa galo-romana de Plassac, cerca de Burdeos; el museo Vesunna ( www.via-antiqua.org ), en Périgueux, que cuenta la historia de la antigua ciudad y sus habitantes en un edificio contemporáneo diseñado por Jean Nouvel.

Época medieval

1256 es la fecha elegida para la fundación de Monflanquin, una bastida en los valles del Lot y del Garona, una de las mejor conservadas de la región, que incluye 44 bastidas (Montpazier, Pujols, Villeneuve-sur-Lot, La Bastide d'Armagnac...). Si las aldeas medievales se construyeron a lo largo de los siglos, las bastidas se levantaban a menudo en un solo movimiento, según un plan ortogonal con calles en ángulo recto, alrededor no de la iglesia, sino de la plaza central, que era al mismo tiempo un espacio comercial, cívico y municipal. Hoy, como en el pasado, se celebran aquí mercados y otras festividades, mientras que los soportales siguen albergando a menudo a artesanos y tiendas. ( www.coeurdebastides.com ).

En Nouvelle-Aquitaine, encontrará castillos encaramados (Beynac, Boussac, Castelnaud, Mauléon, Turenne), floridos (La Roche Courbon, Touffou), cinematográficos (Val, Hautefort, Nérac, Pau), animados (Bonaguil, Lastours, Saint-Jean d'Angle, Saint-Mesmin), artísticos (Oiron, Rochechouart), ecuestres (Pompadour), múltiples (nada menos que cinco castillos para la ciudad medieval de Chauvigny)... Y siempre tan impresionantes, incluso en ruinas (Chalucet, La Mothe Chandeniers, Gavaudun, Angles-sur-L'Anglin, Les Tours de Merle, Ventadour). Sus salones aún guardan numerosos secretos (Duras, Cadillac). Cuentan la historia de Francia (Pau y Enrique IV, Cognac y Francisco I), pero también la de las celebridades (Josephine Baker y Les Milandes, George Sand y Boussac, Toulouse Lautrec y Malromé, Montesquieu y La Brède, François de La Rochefoucauld y Charente...). No deje de emprender un viaje histórico por carretera durante sus vacaciones.

Siglo de las Luces

En el Siglo de las Luces, Montesquieu, que había nacido en la casa familiar de La Brède, cerca de Burdeos ( www.bordeaux-tourisme.com ), escribía sus Cartas persas y la capital de Nouvelle-Aquitaine vivía su segunda edad de oro. La localidad se transformó —fachadas de los muelles, Gran Teatro y el jardín público— gracias al impulso de Louis-Urbain Aubert, más conocido como marqués de Tourny, y se convirtió en el primer puerto del reino. Aún hoy, los vinos de Burdeos hacen que la ciudad sea famosa en todo el mundo. La arquitectura del siglo XVIII se mezcla ahora con un urbanismo moderno, los muelles revisitados y creaciones contemporáneas ya famosas como la Cité du Vin. Un renacimiento que convierte Burdeos en un destino de moda para disfrutar sin moderación.

Siglo XIX

Un siglo después de la revolución, Claude Monet instaló su caballete en Fresseline, al norte de Limoges, cerca de Vassivière – Meseta de Millevaches, para retratar la luz natural en una pintura al aire libre. Le siguieron Armand Guillaumin y Francis Picabia, así como cientos de artistas inspirados por los paisajes del Valle de los pintores. Hoy en día, existen itinerarios que permiten seguir las huellas de los impresionistas y visitar sus lugares emblemáticos. Entre los cuadros dispersos por todo el mundo, podemos contemplar algunos en el Museo de Bellas Artes de Limoges; entre ellos, algunos de Renoir, natural de la ciudad. www.tourisme-creuse.com