Hugo Richard Vogel - Cómo construir una relación amorosa

Por supuesto, cada uno quiere convertirse en todo aquello de lo que es capaz. El deseo de alcanzar las propias metas es innato en la naturaleza humana. No podemos cambiar el querer ser todo lo que podemos ser. El éxito en la vida es convertirse en lo que uno quiere ser. Sólo puedes convertirte en lo que quieres ser a medida que evolucionas. Para ello necesita un socio competente que le informe sobre lo que está haciendo desde el punto de vista de las cosas que no tiene.

La ciencia de cómo conseguir un compañero de vida es por lo tanto el conocimiento más esencial para una persona.

No hay nada malo con el deseo de tener una pareja de por vida adecuada. Lo que entiendo por encajar ya lo he revelado y lo mostraré en el curso posterior del libro. El deseo de una pareja de vida adecuada es el deseo de una vida más rica y plena. Este deseo es apropiado y encomiable. Siempre.

Hay tres razones por las que vivimos. Vivimos para el cuerpo, la mente y el alma. Ninguno de estos tres es más importante o mejor que los otros. Todos son igualmente valiosos. Ninguno de los tres puede expresarse completamente si se descuida completamente a uno. No es correcto vivir sólo para el alma y por lo tanto descuidar la mente o el cuerpo. Tampoco es correcto vivir sólo para la mente y descuidar el cuerpo y el alma. Por supuesto, no tiene sentido vivir sólo para el cuerpo y apagar la mente. La vida real significa la expresión equilibrada de los tres en equilibrio.

Lo que sea que alguien diga. Nadie puede ser realmente feliz si su cuerpo no está sano. Y lo mismo vale para su mente y su alma.

Si a uno de los tres se le niega la expresión, entonces surgen deseos insatisfechos. Si uno de los tres es descuidado, entonces ciertas tareas simplemente no pueden ser completadas.

Una persona no puede vivir feliz sin una buena comida, ropa cómoda, un hogar agradable y la libertad de la monotonía constante. La paz y la relajación también son

necesario para su vida física. Si dos personas comparten el trabajo, el espacio vital y los ingresos, es mucho más fácil lograrlo que en una sola vida en la que uno tiene que hacer todo por sí mismo y pagar todo el valor añadido por sí solo.

Una persona tampoco puede vivir feliz sin tiempo para capacitarse para viajar y observar. También necesita oportunidades de entretenimiento a un nivel que le convenga. Esto también es más fácil de lograr en parejas que solo.

Para ser mentalmente feliz, también es necesario ser capaz de rodearse de cosas bellas que uno valora. Encontrar cosas bellas también es más fácil de lograr junto con un compañero de vida. Cuatro ojos ven más que dos.

Para vivir un alma completa, una persona debe ser capaz de amar. Quien vive permanentemente solo niega el amor a sus semejantes.

La felicidad más grande del hombre radica en dar cosas buenas a los que ama. El amor encuentra su expresión más natural en dar. El que da espontáneamente ama. La persona que siente que no tiene nada que dar se detiene en su estado de desarrollo. No está evolucionando. Pero el estancamiento es un retraso en el tiempo. (2)

Al dar cosas materiales una persona encuentra la vida plena para su cuerpo. Al dar desarrolla su mente. Al dar despliega su alma. Por lo tanto, es del más alto valor para una persona tener un alma gemela. Puede expresarle su amor dando.

Es absolutamente correcto que desees tener la mejor alma gemela del mundo. Es igualmente cierto que hay que prestar la mayor atención a la ciencia, a encontrar una pareja. Tienes el deber de esforzarte tanto como puedas. No puedes hacer más servicio a los demás que hacer lo mejor de ti mismo. Para hacer esto, es necesario que encuentres a tu alma gemela.

Cuando escribo en este libro sobre el derecho a la pareja, no sólo me refiero a las parejas de hecho entre hombres y mujeres, sino también, específicamente, a las parejas civiles entre dos personas del mismo sexo que se aman.

Hay una ciencia de la búsqueda de pareja, y es una ciencia exacta como la física o las matemáticas. Hay ciertas leyes de la naturaleza que regulan cómo encontrar una pareja de vida adecuada. Las leyes de la naturaleza se aplican a todo ser humano, independientemente de su predisposición. No importa si la persona es heterosexual, homosexual o lesbiana. En cuanto una persona reconozca y aplique estas leyes, encontrará con certeza matemática la pareja de por vida que le conviene.

La convivencia con la pareja es el resultado de actuar de cierta manera. Aquellos que hacen las cosas de cierta manera encuentran un compañero de vida. Otros que no hacen las cosas de esta manera permanecen solos por mucho que lo intenten. No puede encontrar un socio adecuado. No importa cuánto lo intenten. Simplemente no funciona. No importa qué habilidades o qué apariencia o qué estatus social tienen.

Que la afirmación anterior es correcta puede verse en los siguientes hechos.

Encontrar el socio adecuado no es una cuestión de medio ambiente. Si este fuera el caso, todas las personas de una determinada zona residencial habrían encontrado la pareja ideal. Todos los habitantes de un lugar vivirían en una relación feliz. Por otro lado, todos los habitantes de otro lugar vivirían sin pareja. O los habitantes de una ciudad estarían felizmente casados, mientras que los habitantes de otra ciudad estarían divorciados.

Pero en todas partes vemos a personas que viven en pareja y a personas que viven separadas en el mismo ambiente y a menudo también dentro de la misma clase social.

Pero si dos personas viven en el mismo lugar y pertenecen a la misma clase social y una encuentra la pareja ideal y la otra permanece sola, queda claro que no depende del lugar ni del estatus social.

Más bien, encontrar un alma gemela es el resultado de hacer las cosas de cierta manera.

No son las circunstancias las que determinan nuestras vidas, sino nuestras decisiones, que tomamos consciente o inconscientemente. (3)

La habilidad de hacer las cosas de cierta manera es lo único que importa. No importa qué habilidades o talentos tenga una persona. La gente con mucho talento puede fallar en encontrar un compañero mientras que otros que tienen poco talento encuentran un alma gemela.

Si observamos más de cerca a las personas que han encontrado un compañero de vida, resulta que tienen una destreza promedio. No tienen mayores talentos o habilidades que otras personas. Está claro que no han encontrado pareja porque tienen talentos o habilidades especiales. No tienen talentos que otras personas no tengan. Encuentran una pareja porque hacen las cosas intencional o accidentalmente de cierta manera.

Vivir con un ser querido no es el resultado de que alguien se quede en casa y se preocupe única y exclusivamente por esa persona. Muchas personas que se aferran a su pareja la pierden, mientras que otras que tienen numerosos conocidos y amistades con quienes salen mantienen a su pareja.

Además, nadie mantiene al socio ideal porque él crea cosas que otros no pueden. Porque dos personas que trabajan en el mismo campo a menudo hacen casi las mismas cosas. Sin embargo, una celebra bodas de oro y la otra se divorcia.

Así que llego a la afirmación de que encontrar un compañero de vida es el resultado de hacer las cosas de la manera definitiva.

Pero si encontrar una pareja de por vida es el resultado de hacer las cosas de cierta manera, y si las mismas causas siempre traen los mismos resultados, entonces cada hombre y cada mujer puede encontrar la pareja ideal de por vida de esta manera. El tema de la búsqueda de pareja se hace tangible en el campo de la ciencia exacta.

La cuestión es, por supuesto, si este camino en particular puede ser tan difícil que pocos pueden seguirlo. Eso no puede ser verdad. Como hemos visto. La gente talentosa encuentra pareja y los tontos encuentran pareja. La gente intelectualmente grandiosa encuentra una pareja y la gente estúpida encuentra una pareja. Las personas físicamente fuertes encuentran una pareja y las personas débiles consiguen una pareja para toda la vida.