Janelle Denison - Prisioneros del Amor

Здесь есть возможность читать онлайн «Janelle Denison - Prisioneros del Amor» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: Современные любовные романы, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Prisioneros del Amor: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Prisioneros del Amor»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

La cazadora de recompensas Joelle Summers era muy buena en su trabajo, hasta que detuvo por error a Dean Colter, un atractivo hombre de negocios. A diferencia de sus prisioneros habituales, Dean parecía dispuesto a cumplir todas las fantasías de Joelle. Y aunque él clamaba su inocencia, ella no tardó en descubrir que no era tan inocente…
Después de años trabajando como un esclavo, Dean Colter quería una aventura, pero que lo secuestrara una hermosa cazadora de recompensas, aficionada a esclavizar a sus prisioneros, no era exactamente lo que había planeado. Sin embargo, pronto se dio cuenta de que ser su cautivo también tenía sus ventajas. Quizá fuese ella la que pusiera las esposas, pero Dean tenía la llave que abría las pasiones más desatadas de aquella ardiente mujer.

Prisioneros del Amor — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Prisioneros del Amor», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Tenía dos días para averiguar el modo de convencer a aquella mujer de que era inocente.

En fin, había dos formas de ver la situación: podía sentirse como una víctima y resistirse, o rendirse y ganarse la confianza de Jo Sommers. Así, al menos el viaje sería más agradable. Bien, lo primero que tenía que hacer era corregir su comportamiento malhumorado de antes. Giró la cabeza hacia el perfil de Jo. El sol estaba empezando a ponerse en el horizonte, y los tonos pastel hacían que su tez pareciera Irradiar calidez.

– Quiero pedirte disculpas por mi actitud -le dijo Dean, rompiendo el silencio que se había adueñado del interior del vehículo durante la última media hora-. Estoy seguro de que cuando me hayan absuelto de esas acusaciones y encuentren al tipo que me ha suplantado, encontraré todo esto muy divertido.

Jo entornó los ojos, suspicaz:

– ¿Eso crees?

– Es lo que quiero creer, al menos -contestó Dean-. Cuentas con mi entera cooperación. Me he resignado al hecho de que no puedo probar mi inocencia hasta que esté frente a las autoridades, así que me he propuesto disfrutar del viaje como me has dicho. -le anunció. «Y de tu compañía», añadió mentalmente.

Una sonrisa se dibujó lentamente en los carnosos labios de Jo.

– Bien, me gusta esa nueva actitud.

– Y a mí me gusta tu sonrisa -contestó él con: sinceridad.

La sonrisa de Jo se desvaneció al instante, y se sonrojó. Obviamente no se esperaba el cumplido.

– Gracias -balbució incómoda.

– No hay de qué -respondió él conteniendo i una sonrisilla-. ¿Estás casada?

Jo se quedó callada un momento, y se lamió el labio inferior antes de admitir:

– No.

– Hum… No puedo decir que me sorprenda – dijo él. Jo le lanzó una mirada furibunda que exigía una explicación inmediata, de modo que añadió-: Es difícil imaginar a un marido que permita que su mujer trabaje como cazarrecompensas.

Jo resopló y puso los ojos en blanco ante lo que obviamente le parecía un punto de vista anticuado.

– ¿Un novio quizá?

Jo le lanzó una mirada penetrante. Estaba visiblemente molesta.

– No, y te agradecería que te guardaras para ti el comentario que fueras a hacer al respecto -le advirtió.

A pesar de sus esfuerzos por contener la risa, los labios de Dean temblaron de un modo incontrolable, hasta que ya no pudo más y tuvo que volver el rostro. Estaba claro que había algo que le impedía mezclar en su vida a alguien significativo con su ocupación, y tenía mucha curiosidad por saber la razón. Quería averiguar todo lo posible sobre Jo Sommers: por qué hacía lo que hacía, y descubrir si esa sensualidad que creía adivinar bajo la dura fachada era real.

4

Aproximadamente una hora más tarde, Jo salió de la autopista interestatal, y detuvo el vehículo frente a un restaurante de comida rápida en Kelso, Washington, a unos metros del motel en el que había pensado pasar la noche. Era una ciudad pequeña y tranquila, justo lo que estaba buscando. Lo único que quería en ese momento era llenarse el estómago, darse una ducha de agua caliente para destensar los músculos de sus hombros, dormir… y la total cooperación que el fugitivo le había prometido, claro.

Hasta el momento al menos había cumplido su palabra, y se había comportado de un modo ejemplar, aunque por supuesto tampoco podía hacer mucho esposado y sujeto por el cinturón de seguridad.

Sin embargo, no había vuelto a protestar con aquello de que no era él, no se había vuelto a quejar de estar incómodo, y no se había vuelto a advertir frustración en su voz. Por el contrario, había estado sacando, uno tras otro, temas de conversación, preguntándole sobre todo por la época en que había sido policía. Las anécdotas del oficio parecían fascinarlo y divertirlo, y no había perdido ocasión de lanzar ocasionales comentarios galantes que no hacían sino azorarla. Tenía que admitir que era un buen conversador, y que el tiempo y los kilómetros parecían haber pasado volando.

Bajó la ventanilla para poder leer el gran cartel iluminado donde anunciaban los distintos platos. Una vez hubo decidido lo que iba a pedir, se giró hacia Dean.

– ¿Qué quieres comer?

Los ojos del fugitivo se encontraron con los suyos, y sus labios esbozaron una irresistible sonrisa.

– Bueno, como eres tú quien invita, creo que tomaré… Dos hamburguesas dobles con queso y beicon, una de patatas grande y un refresco de cola tamaño gigante.

Jo enarcó las cejas ante la ingente cantidad de comida que quería pedir.

– Oh, ¿eso es todo? -inquirió con ironía. Se preguntó si siempre comía así, y dónde diablos iba a meterse todo aquello.

Dean hizo un ademán de encogerse de hombros, pero hizo un mal movimiento y contrajo el rostro, dolorido. Era obvio que tenía los músculos rígidos por la postura, pero ni aun así expresó una queja para que lo soltase.

– ¿Qué quieres? -murmuró-. Ya te dije que estaba hambriento.

– ¿Y estás seguro de que no quieres también un postre para acompañar ese banquete pantagruélico? -añadió ella para picarlo.

Dean volvió a levantar la vista hacia el cartel.

– Pues ahora que lo dices… Creo que tomaré una porción de esa tarta de mousse de chocolate que anuncian.

Evidentemente, Jo lo había preguntado en broma, pero se quedó anonadada al darse cuenta de que él hablaba en serio. De pronto se encontró pensando en que debía de quemar muchas energías para poder comer de ese modo y estar en tan buena forma. No pudo evitar que su mirada se desviara hacia el cuerpo viril y atlético que había estado cacheando, y se le empezaron a ocurrir diversos métodos para quemar todas esas calorías que iba a ingerir. Las imágenes que se formaron en su mente tenían poco que ver con la gimnasia, y mucho con el ejercicio que suponían unas buenas sesiones de sexo: calor, sudor, dos cuerpos frotándose, empujando las caderas al unísono, con los músculos al límite, el pulso totalmente fuera de control…

Oh, sí, el pulso desde luego se le había acelerado, y sentía la sangre bombeando por sus venas con la misma cadencia que habían marcado aquellas eróticas visiones. De repente le pareció que hacía calor dentro del vehículo a pesar de que el aire acondicionado estaba en funcionamiento. No podía creer que hubiera tenido esa clase de pensamientos, y mucho menos que hubiera imaginado a su cautivo en el papel del protagonista de su fantasía sexual.

Apretó las manos en torno al volante mientras inspiraba despacio. «Tienes que controlarte, Joelle. Este tipo es un criminal, por muy guapo, sexy y encantador que sea, por muy convincente y honesto que parezca». Tampoco importaba cuánto tiempo hacía que un hombre le provocaba un deseo semejante. No era de confianza, no cuando lo llevaba a la cárcel y seguramente pasaría tras las rejas unos cuantos años. Repitiéndose esas palabras una y otra vez, salió del vehículo y pidió en la ventanilla lo que le había dicho Dean, más una ensalada de pollo y un té helado para ella.

Unos diez minutos después, regresaba a la camioneta con las bolsas cargadas con la comida y la bebida. Las colocó en el asiento de atrás, volvió a ponerse al volante, y llevó el vehículo hasta el aparcamiento del motel.

– Volveré enseguida -le dijo a Dean mientras abría la puerta-. Voy a pedir que nos den una habitación para pasar la noche y cenaremos una vez estemos instalados, ¿entendido?

Dean le dedicó una sonrisa irónica.

– Tranquila, estaré aquí esperando.

Jo se bajó del vehículo y cerró la puerta tras de sí. Atravesó el aparcamiento y entró en la garita acristalada sin perder de vista un momento la camioneta. Firmó en el libro de registros y pagó por una noche.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Prisioneros del Amor»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Prisioneros del Amor» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Janelle Denison - Sinfully Sweet
Janelle Denison
Janelle Denison - Christmas Fantasy
Janelle Denison
Janelle Denison - Private Pleasures
Janelle Denison
Janelle Denison - Wild for Him
Janelle Denison
Janelle Denison - Into The Night
Janelle Denison
Janelle Denison - Forbidden
Janelle Denison
Janelle Denison - Todas sus fantasías
Janelle Denison
Janelle Denison - Too Wilde to Tame
Janelle Denison
Janelle Denison - Born to Be Wilde
Janelle Denison
Janelle Denison - Nieodparta pokusa
Janelle Denison
Janelle Denison - A Wicked Seduction
Janelle Denison
Janelle Denison - Seductive Fantasy
Janelle Denison
Отзывы о книге «Prisioneros del Amor»

Обсуждение, отзывы о книге «Prisioneros del Amor» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x