Blake Pierce - Una Vez Cazado

Здесь есть возможность читать онлайн «Blake Pierce - Una Vez Cazado» — ознакомительный отрывок электронной книги совершенно бесплатно, а после прочтения отрывка купить полную версию. В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. ISBN: , Жанр: Триллер, Детектив, foreign_detective, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Una Vez Cazado: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Una Vez Cazado»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

¡Una obra maestra del género de thriller y misterio! El autor hizo un buen trabajo desarrollando a los personajes psicológicamente. Los describe tan bien que sientes que estás en sus mentes, sientes sus temores y te alegras por sus éxitos. La trama es muy inteligente y el libro te mantendrá entretenido de principio a fin. Este libro te mantendrá pasando páginas hasta bien entrada la noche debido a sus giros inesperados. Opiniones de libros y películas, Roberto Mattos (Una vez desaparecido) Una fuga de una cárcel de máxima seguridad. Llamadas frenéticas del FBI. La peor pesadilla de la agente especial Riley Paige se ha hecho realidad: un asesino en serie que encerró hace años ha escapado. Y ella es su blanco principal. Riley está acostumbrada a ser la cazadora, pero, por primera vez, ella y su familia están siendo cazadas. Mientras el asesino la acecha, también comienza a matar, y Riley debe detenerlo antes de que sea demasiado tarde para las otras víctimas y para sí misma. Pero este no es un asesino común y corriente. Es demasiado inteligente, y su juego del gato y el ratón es demasiado retorcido, y de alguna manera logra eludirla y siempre permanecer un paso por delante. Desesperada por detenerlo, Riley se da cuenta de que solo hay un camino: debe ahondar en el pasado, en la mente retorcida de este asesino, en sus viejos casos, y volver a aprender lo que lo impulsa. Se da cuenta de que la única forma de detenerlo es enfrentar la oscuridad que creía haber dejado atrás. Un thriller psicológico oscuro con suspenso emocionante, UNA VEZ CAZADO es el libro #5 de una nueva serie fascinante – con un nuevo personaje querido – que te dejará pasando páginas hasta bien entrada la noche. El Libro #6 en la serie de Riley Paige estará disponible pronto.

Una Vez Cazado — читать онлайн ознакомительный отрывок

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Una Vez Cazado», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Shane Hatcher era lo que realmente importaba.

Su misión era regresar a Hatcher a la prisión. Si lo atrapaban antes de que matara a Moran por su traición, bien. Ella y Bill conducirían a la dirección de Moran sin darle ninguna advertencia. Llamarían a la oficina de campo local para que contaran con apoyo allá.

Los barrios pandilleros mucho más siniestros de Siracusa quedaban a media hora en carro de la casa de clase media en la que vivía Kelsey Sprigge. El cielo estaba nublado, pero no estaba nevando, y el tráfico se movía normalmente por las carreteras bien despejadas.

Riley accedió a la base de datos del FBI e investigó un poco en su celular mientras Bill manejaba. Vio que la situación local de las pandillas era grave, ya que se habían agrupado y reagrupado en esta área desde la década de 1980. En la era de Shane de las Cadenas, la mayoría habían sido locales. Desde entonces unas pandillas nacionales se habían trasladado a la zona, trayendo consigo mayores niveles de violencia.

Las drogas que alimentaban esta violencia con sus ganancias se habían vuelto más extrañas y mucho más peligrosas. Ahora incluían cigarrillos empapados en líquido para embalsamar y cristales llamados “sales de baño” que inducían paranoia. Nadie sabía qué sustancia aún más letal aparecería pronto.

Cuando Bill se estacionó frente al edificio de departamentos deteriorado donde vivía Moran, Riley vio a dos hombres con chaquetas del FBI bajarse de otro carro. Eran los agentes McGill y Newton, quienes los habían recibido en el aeropuerto. Pudo notar que llevaban chalecos Kevlar debajo de sus chaquetas. Ambos llevaban rifles de francotiradores marca Remington.

“Moran vive en el tercer piso”, dijo Riley.

Cuando los agentes entraron por la puerta principal del edificio, se encontraron con varios pandilleros que estaban pasando el rato en el vestíbulo raído y frío. Estaban parados con las manos metidas en los bolsillos de sus sudaderas con capucha y parecían no estar prestándoles mucha atención al grupo armado.

“¿Serán los guardaespaldas de Moran?”, se preguntó Riley.

No creía que era probable que intentaran detener a un pequeño ejército de agentes, aunque podrían avisarle a Moran que alguien iba en camino a su apartamento.

McGill y Newton parecían conocer a los jóvenes.

“Estamos aquí para ver a Smokey Moran”, dijo Riley.

Ninguno de los jóvenes dijo una palabra. Solo miraron a los agentes con expresiones extrañas y vacías. Ese comportamiento le parecía extraño.

“Salgan”, dijo Newton, y los chicos asintieron con la cabeza y salieron por la puerta principal.

Los agentes subieron tres tramos de escaleras con Riley en el frente. Los agentes locales revisaron cada pasillo cuidadosamente. Se detuvieron en frente del apartamento de Moran en el tercer piso.

Riley golpeó la puerta. Cuando nadie contestó, exclamó:

“Smokey Moran, te habla la agente del FBI Riley Paige. Mis colegas y yo necesitamos hablar contigo. No pretendemos hacerte daño. No estamos aquí para arrestarte”.

El silencio continuó.

“Tenemos razones para creer que tu vida está en peligro”, gritó Riley.

Nada.

Riley intentó el pomo. Para su sorpresa, la puerta no estaba cerrada con llave, y se abrió.

Los agentes entraron a un apartamento muy limpio que prácticamente no estaba decorado. Tampoco tenía una televisión, ni dispositivos electrónicos, ni una computadora. Riley entró en cuenta de que Moran lograba ejercer una gran influencia en el mundo criminal únicamente dando órdenes cara a cara. Pasaba desapercibido ya que nunca se conectaba, ni tampoco usaba un teléfono.

“Definitivamente es astuto”, pensó Riley. “A veces lo tradicional funciona mejor”.

Pero Moran no estaba por ninguna parte. Los dos agentes locales revisaron todas las habitaciones y los armarios rápidamente. No había nadie en el apartamento.

Todos bajaron las escaleras de nuevo. Cuando llegaron al vestíbulo, McGill y Newton levantaron sus rifles, listos para la acción. Los pandilleros jóvenes los estaban esperando en la base de las escaleras.

Riley los observó. Se dio cuenta que obviamente habían tenido órdenes de dejar que Riley y sus colegas registraran el apartamento vacío. Ahora parecía que tenían algo que decir.

“Smokey nos dijo que creía que vendrían”, dijo uno de los pandilleros.

“Nos dijo que les diéramos un mensaje”, dijo otro.

“Dijo que lo busquen en el viejo almacén de Bushnell en la calle Dolliver”, dijo un tercero.

Luego, sin decir más, los jóvenes se echaron a un lado, dejándoles a los agentes un montón de espacio para pasar.

“¿Estaba solo?”, preguntó Riley.

“Sí, estaba solo cuando salió de aquí”, respondió uno de los jóvenes.

Sentía un presentimiento extraño. Riley no sabía qué pensar al respecto.

McGill y Newton siguieron observando a los jóvenes mientras salieron del edificio. Cuando estaban afuera, Newton dijo: “Yo sé dónde queda ese almacén”.

“Yo también”, dijo McGill. “Queda a pocas cuadras de aquí. Está abandonado y a la venta, y se ha hablado de convertirlo en apartamentos elegantes. Pero no me gusta esto. Ese lugar es perfecto para una emboscada”.

Tomó su teléfono y pidió más apoyo.

“Tendremos que tener cuidado”, dijo Riley. “Los seguiremos en nuestra camioneta”.

Bill siguió de cerca a la VUD local. Estacionaron ambos carros delante de un edificio de ladrillos decrépito de cuatro pisos con una fachada hecha pedazos y ventanas rotas. Justo en ese momento llegó otro vehículo del FBI.

Cuando Riley observó el edificio más de cerca, entendió por qué McGill había querido más apoyo. El lugar era enorme y decrépito, con tres pisos de ventanas oscuras y rotas. Cualquiera de las ventanas podría ocultar a un tirador con un rifle fácilmente.

Todo el equipo local estaba armado con cañones largos, pero ella y Bill solo tenían pistolas. Serían un blanco fácil en medio de un tiroteo.

Aún así, Riley no le encontraba sentido a una emboscada. Después de eludir su detención hábilmente por unas tres décadas, ¿por qué un tipo tan brillante como Smokey Moran haría algo tan imprudente como tirotear a agentes del FBI?

Riley llamó a los otros agentes con su radio.

“¿Aún llevan sus chalecos Kevlar?”, preguntó.

“Sí”, fue la respuesta.

“Qué bueno. Quédense en sus carros hasta que les diga que se bajen”.

Bill encontró dos chalecos Kevlar en la parte posterior de su VUD. Él y Riley se los colocaron rápidamente. Luego Riley encontró un megáfono.

Bajó la ventanilla y exclamó:

“Smokey Moran, somos del FBI. Recibimos tu mensaje. Vinimos a verte. No pretendemos hacerte daño. Sal del edificio con las manos arriba y hablemos”.

Ella esperó un minuto. Nada sucedió.

Riley volvió a la radio otra vez y se dirigió a Newton y McGill.

“El agente Jeffreys y yo nos bajaremos del vehículo. Bájense con sus armas desenfundadas cuando estemos afuera. Nos encontraremos en la puerta principal. No bajen la mirada. Si ven cualquier movimiento en cualquier lugar del edificio, cúbranse inmediatamente”.

Riley y Bill se bajaron del VUD, y Newton y McGill se bajaron del suyo. Tres agentes del FBI más fuertemente armados se bajaron del vehículo recién llegado y se unieron a ellos.

Los agentes se movieron con cautela hacia el edificio, mirando las ventanas con sus armas listas. Finalmente llegaron a la seguridad relativa de la enorme puerta principal.

“¿Cuál es el plan?”, preguntó McGill, sonando claramente nervioso.

“Arrestar a Shane Hatcher, si es que está aquí”, dijo Riley. “Matarlo si es necesario. Y encontrar a Smokey Moran”.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Una Vez Cazado»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Una Vez Cazado» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Blake Pierce - Una Vez Atraído
Blake Pierce
Blake Pierce - Una Vez Anhelado
Blake Pierce
Blake Pierce - Una Vez Tomado
Blake Pierce
Blake Pierce - Una Vez Acechado
Blake Pierce
Blake Pierce - Una Vez Enfriado
Blake Pierce
Blake Pierce - Una Vez Abandonado
Blake Pierce
Blake Pierce - Una Vez Añorado
Blake Pierce
Blake Pierce - Una Vez Atrapado
Blake Pierce
Blake Pierce - Una Vez Atado
Blake Pierce
Blake Pierce - Una Vez Enterrado
Blake Pierce
Blake Pierce - Una Vez Perdido
Blake Pierce
Blake Pierce - Una Vez Inactivo
Blake Pierce
Отзывы о книге «Una Vez Cazado»

Обсуждение, отзывы о книге «Una Vez Cazado» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x