• Пожаловаться

José Somoza: El detalle Tres novelas breves

Здесь есть возможность читать онлайн «José Somoza: El detalle Tres novelas breves» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию). В некоторых случаях присутствует краткое содержание. категория: Триллер / на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале. Библиотека «Либ Кат» — LibCat.ru создана для любителей полистать хорошую книжку и предлагает широкий выбор жанров:

любовные романы фантастика и фэнтези приключения детективы и триллеры эротика документальные научные юмористические анекдоты о бизнесе проза детские сказки о религиии новинки православные старинные про компьютеры программирование на английском домоводство поэзия

Выбрав категорию по душе Вы сможете найти действительно стоящие книги и насладиться погружением в мир воображения, прочувствовать переживания героев или узнать для себя что-то новое, совершить внутреннее открытие. Подробная информация для ознакомления по текущему запросу представлена ниже:

José Somoza El detalle Tres novelas breves

El detalle Tres novelas breves: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «El detalle Tres novelas breves»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

En este libro se reúnen las tres únicas novelas breves del autor. No se relacionan solo por su extensión: también las une la intención, porque cada una de ellas cuenta la historia de una obsesión. Aunque podría afirmarse que toda historia es siempre la historia de una obsesión (la del narrador), la que sufren los protagonistas de estos relatos es particular en más de un aspecto, ya que constituye el fondo y la forma, el origen y destino último de la narración. Existen otras similitudes curiosas: dos de los protagonistas son médicos; los tres, probablemente, están locos. Planos (1994), la obra que inició la carrera literaria del autor, se desarrolla en el pueblo de Roquedal, escenario de novelas posteriores como Cartas de un asesino insignificante o La caja de marfil. En Planos, la obsesión de Marcelino Roimar, un joven médico que viaja al pueblo para realizar una sustitución de verano, se transforma en una fantasía terrorífica: la de vislumbrar otros mundos dentro de éste y conocer a la extraña criatura que los habita. El detalle: su narrador es el «loco oficial» de Roquedal, Baltasar Párraga, que hace de improvisado detective en una curiosa investigación. Pese a su fama de enajenado, la obsesión de don Baltasar, paradójicamente, resulta mucho más racional que la de Roimar: los pequeños detalles situados en los limites de la percepción y la manera en que pueden convertirse, para un observador atento, en el origen de claves secretas. Párraga cree que siempre hay un asesino oculto detrás de cada tragedia, y tiendo a darle la razón. La boca: es el único de los tres relatos que no se desarrolla en Roquedal y su estructura es tan extraña como la obsesión de su protagonista, porque consta de una especie de frase monstruosa, sin apenas pausas para el aliento. El narrador es un odontólogo que atiende una consulta próspera, vive una vida familiar gris y tiene una relación desgastada con una amante, pero su monocroma existencia cambia de improviso cuando hace un descubrimiento singular: por dentro alberga huesos. La evidencia de que, bajo la piel, sobrellevamos un esqueleto puede convertirse en una perogrullada temible.

José Somoza: другие книги автора


Кто написал El detalle Tres novelas breves? Узнайте фамилию, как зовут автора книги и список всех его произведений по сериям.

El detalle Tres novelas breves — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «El detalle Tres novelas breves», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема

Шрифт:

Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

¡El mismo ritmo, no hay duda, que el de las patas de la araña al atravesar la calle Cruz y el de las uñas de Aparicio sobre la mecedora: toc, toc, toc-toc…! ¡Oh, taimado criminal, así que eres tú! ¡Cómo te ocultas a los ojos de los inocentes! Porque ¿qué pueden saber estos chavales sobre el ruido que producen? ¿Cómo podrían percibirlo si no se perciben ya a sí mismos? ¿Y qué sabe la pobre Paz, cuyos pies redoblan en el suelo como músicos de procesión celebrando su propia muerte? Pero si supieran observar esquinadamente, como yo hago, sin alcohol en el cuerpo, algo extraño notarían en ese conjunto de golpes de cristal, madera y carne. No se trata de la música a la que creen acompañar: ellos ejecutan (perfecta palabra) su propia melodía con cada gesto, al mismo ritmo, y junto a ellos salta la araña y arañan las uñas. ¡He aquí el detalle que nadie percibe!

Era obsesionante: como el repiqueteo de las gotas de lluvia sobre una lápida o la tos metálica de una metralleta en la noche (bien las recuerdo de la guerra). Pero mejor: una vieja máquina de escribir manejada por las huesudas manos de la muerte, tecla tras tecla, escribiendo ¿qué?

Los últimos días de la vida de Paz.

El texto comenzaba, sin duda, con la palabra «Eres», señalando a la pobre chica como un rayo de luna. «Mira, observa cómo, mediante golpes sordos y repetidos, puedo machacar otra vida -me decía mi inagotable carnicero-. Su vida está bajo sus propios pies: y ella la destroza incesante.»

Cuando me marché a casa aquella noche no pude evitar repetir durante todo el camino, con la punta de mi bastón, el tenebroso aunque pegadizo ritmo: toc, toc, toc-toc (a veces ocurre así con ciertas músicas malditas, que no parecen querer abandonarnos nunca, y también con algunas ideas demasiado cariñosas, cuyos abrazos terminan por ahogarnos). Ya en la cama, recordé la leyenda de las danzas de la muerte medievales: un esqueleto invitaba a bailar a un cura, a un señor feudal, a un cortesano, a una puta y a un caballero y marcaba el ritmo con su propia guadaña. Y de todo esto nada sabía el ingenuo de Casimiro, más ingenuo y ciego que los besugos que vendía en su tienda. La pena me hizo ir a decírselo y la misma pena me lo impidió… pero también algo extraño que sucedió entonces, más terrible que todo cuanto había advertido hasta ese momento.

Le hallé al día siguiente (mañana espléndida de mayo, víspera de los festejos) sumergido en el hediondo océano del mercado de la plaza, que en realidad son tres o cuatro tiendas juntas en un semisótano, pero que parecen cien por la aglomeración de gente, la penumbra y la suciedad. Casimiro hacía rodajas un tronco de pez espada con un enorme cuchillo de psicópata mientras hablaba a voces con la señora Asunción Portero y otra amiga, que esperaban para ser servidas. Me acerqué con lentitud, pensando en qué le diría y cómo, pero sus propias palabras me evitaron el dilema. Hablaba de su hija.

– ¡Qué me van a contar, si ya lo sé! ¡Un día de éstos le voy a enseñar yo a beber alcohol! ¡Se lo tengo dicho! ¡Lo que pasa es que uno no puede ir detrás de ella todas las noches, como un perro guardián!

– Claro -asentía doña Asunción.

– Diga que sí -coreaba su amiga.

– ¡Además, toda la culpa no es suya! ¡Ni nuestra tampoco, porque educación ha recibido…!

Casimiro descargó otro golpe de machete en el pez espada. De vez en cuando se llevaba el dorso de la manaza al bigote color barro que le cruzaba la cara (también se había dejado las patillas largas).

– ¡Cómo quieren después que eduquemos, si no somos nosotros, es la sociedad la que pervierte! ¿Qué se nos puede pedir a nosotros, los padres? ¡Trabajamos para llevarles el alimento a la boca, como los gorriones, y ellos se creen que cae de los árboles…! Pero, claro, tampoco puedes encerrarla en casa como un sultán y decirle: «Eh, que no sales hasta que cumplas dieciocho», ni decirle: «Sales, pero te diviertes como yo quiera». ¡Eso no se puede decir!

– Claro que no.

– Diga que no.

– ¡El mucho cariño, el demasiado cariño, eso es lo malo! -Se limpió con la manaza las salpicaduras del pez mutilado, que le habían rebotado en la cara-. ¡Les queremos tanto que…! Y es que los tiempos son diferentes: en nuestra época no nos movíamos de una baldosa y andábamos más derechos que una vela, pero no había libertad, como ahora, y eso no estaba bien, qué caramba. Es fácil educar cuando solo tienes que decirle a tu hijo: «Trabaja». Pero ahora la juventud se divierte… y eso no es malo… Yo le he dicho a mi hija: «Estás en la mejor época de tu vida, ¡pues anda y disfrútala!».

El cuchillo, mientras tanto, no dejaba de caer. El pez era cada vez menos, las rodajas cada vez más. El afilado martillo golpeaba sobre el tajo, sin rozar en ningún momento los expuestos dedazos de Casimiro, amoratados por el frío.

Dejé de escuchar el debate para concentrarme en aquel peculiar ruido: chac, chac, chac-chac. «¡Y las réplicas de Asunción y su amiga! ¡Y las carcajadas de los clientes de la carne!¡Y el hacha del carnicero marcando el compás, y el cuchillo del pescadero en contrapunto! Antonio, el bailarín, disfrazado de esqueleto, hubiera podido representarlo: cuchillo, risas, respuestas, una coral de verdugos. ¡Pobre Casimiro: y no se da cuenta de que su hija se hace trizas bajo su machete!» Esto escribí esa misma noche, pálido y agarrotado por la inquietud tras comprobar que el ritmo terrible de los pasos de mi asesino se había extendido como un cáncer por todo el pueblo, ¡y que incluso el padre de la futura víctima lo interpretaba a cuchillazos en su tienda! ¡Qué te iba yo a contar, Casimiro, si ya el pez espada que machacabas sobre el tajo, las preciosas pepitas de plata de su cuerpo desparramadas, la carne rosada y el ojo oscuro de la espina (otra vez la oquedad central) rotos por tu energía indiferente, te lo contaba todo a cada golpe que le dabas…!

Y el coro, burlón, cantaba:

– ¡Sí!

– ¡ No!

– ¡Qué va!

Y el cuchillo:

– ¡Chac, chac, chac-chac!

Y el carnicero:

– Ja, ja, ja ja!

Sintiéndome gobernado por un poderoso vértigo, escapé a toda prisa del mercado y me refugié por un instante en la plaza cubierta de sol. «En algún lugar de este pueblo -pensé, apoyándome en el borde de piedra de la fuente de los peces-, pobrecita Paz, te encuentras adherida a la telaraña, y el coro ya te amortaja con su canción fúnebre… ¡Hasta tu propio padre la canta sin saberlo, o quizá sabiéndolo pero sin quererla escuchar! ¡Y tú, pobrecita, como los sagrados pasos de las procesiones, te detienes en tu vía crucis ante esta terrible saeta!»

Unos niños, hijos de vecinos que yo conocía, jugaban cerca de la fuente. Me vieron y me señalaron con el dedo, riéndose:

– ¡El loco! ¡El loco!

– ¡El loco! ¡El loco del cementerio!

Cuando me volví hacia ellos echaron a correr como ciervos por la calle Principal hacia abajo. El más pequeño (no tendría más de cinco años), que iba el último, se detuvo en la esquina, antes de desaparecer con los demás, y me gritó:

– ¡El… oco!

Me senté en el borde de la fuente y empecé a echarme fresco con el sombrero. Así estuve hasta que el mareo aflojó. Después lloré un poco, porque el día era tan lindo que me parecía increíble hallarme tan abandonado. Hubo un tiempo en mi vida en el que cielos como el que contemplaba en aquel momento, estampados en azul puro, me ponían alegre y de buen ánimo. ¡Mala cosa es desarraigarnos del paisaje! ¡Malo es oscurecernos cuando amanece, tener frío cuando sale el sol, hallarnos solos en la muchedumbre! ¡Malo sentir que ni el sol, ni la primavera, ni el mar de verano ni la risa de los niños nos entran dentro, porque no les pertenecemos! «Pero también lloré por ti, Paz, tan inocente y solitaria en este mundo -anoté en mi cuaderno esa noche de angustia-. ¡Qué fácil sería salvarte si todos percibiéramos los mismos detalles!» Y añadí:

Читать дальше
Тёмная тема

Шрифт:

Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «El detalle Tres novelas breves»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «El detalle Tres novelas breves» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё не прочитанные произведения.


Отзывы о книге «El detalle Tres novelas breves»

Обсуждение, отзывы о книге «El detalle Tres novelas breves» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.