Lisa See - La Telaraña China

Здесь есть возможность читать онлайн «Lisa See - La Telaraña China» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: Детектив, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

La Telaraña China: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «La Telaraña China»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Inspectora Liu, ¿necesito recordarle que China tiene costumbres y rituales para tratar a sus huéspedes? Use su shigu, su experiencia de la vida.
Todos los extranjeros, tanto si se trata de desconocidos o de demonios como este visitante, son potencialmente peligrosos. No demuestre ira ni irritación. Sea humilde, prudente y cortés.
El viceministro apoyó la mano sobre el hombro de la inspectora.
Hágale creer que existe un vínculo entre usted y él. Así hemos tratado a los extranjeros durante siglos. Así tratará usted a este extranjero mientras sea nuestro huésped.”`
En un lago helado de Pekín aparece el cadáver del hijo del embajador norteamericano. La difícil y ardua investigación es asignada a la inspectora Liu Hulan. A miles de kilómetros, un ayudante de la fiscalía de Los Ángeles encuentra en un barco de inmigrantes ilegales el cadáver de un Príncipe Rojo, el hijo de uno de los hombres más influyentes de China…
Una impactante novela de intriga que recrea el conflicto que se produce entre dos países diametralmente opuestos cuando sus gobiernos se ven obligados a colaborar en pie de igualdad.

La Telaraña China — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «La Telaraña China», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

– Eso lo veo claro -dijo el-. Pero entonces, por qué iban a matar a Henglai? 0, ya puestos, ¿por qué iban a matar a Billy?

– No lo sé. Quizá Guang intento engañar a las triadas y ellos se vengaron. Quizá los chicos intentaron enganar a Guang.

– Ninguna de las dos posibilidades puede ser cierta.

– ¿Por qué?

– Como tu misma dijiste, ninguno de los dos trabajaría en este caso de no ser por Guang.

Hulan extendió la mano por encima de la mesa para coger la de David.

– No hablemos más del caso, por favor.

El la miro, encantado por la deliciosa ironía de su petición. Hacía apenas unos días, era él quien rogaba que hablaran de otra cosa. Además, Hulan tenía razón. Haían hecho mucho en dos días. ¿Qué mal podía haber en que gozaran de unas horas de libertad?

Después de la cena, regresaron al hotel de ella. En la habitación, él le acarició la mejilla y luego el cuello y la clavícula hasta el pecho. Se tomaron cierto tiempo para desnudarse mutuamente. La boca de él se demoró en los pezones de ella, que gimió en respuesta a sus caricias. Pronto los labios de ella buscaron un punto sensible bajo la oreja izquierda y luego se dirigieron hacia el hueco en la base del cuello, antes de continuar su recorrido hacia abajo. Esa noché, David y Hulan harían de la pasión una eternidad.

Varias horas más tarde les despertó el teléfono.

– ¿Si? -dijo Hulan con tono somnoliento.

Ella y David estaban tumbados del lado izquierdo, acurrucados. David le había pasado el brazo izquierdo por la cintura tenía la mano en su seno izquierdo. Hulan notó que esa mano empezaba a recorrerla al tiempo que la voz del teléfono le dijo en culto mandarín:

– Tenemos algo de que hablar. Por favor, reúnase conmigo en el Café del Jade Verde de Broadway. Por supuesto, puede llevar con usted al señor Stark.

Hulan colgó y apartó la mano de David. En voz baja le comunicó lo que acababan de decirle. El se incorporó con expresión preocupada.

– Será mejor que llamemos al FBI. Ellos sabrán encontrar Gardner y a Campbell. Dejemos que se ocupen de esto.

– No -dijo ella, meneando la cabeza-. El qlue ha llamado nos lo ha pedido a nosotros. Quiere decirnos algo a nosotros. Si queremos oírlo, será mejor que vayamos solos.

– Es peligroso -insistió él, pero la expresión de Hulan le dijo que no tenía miedo.

Abandonaron la habitación, se detuvieron ante la de Peter Sun y llamaron a la puerta. Al no recibir respuesta, Hulan miró su reloj. Pasaba de la medianoche.

– Ya debería haber vuelto -dijo.

– Esta con Campbell. No to preocupes por él.

David llevó el coche hasta Chinatown. Luces de neón rosa, amarillo y verde de las tiendas y restaurantes cerrados brillaban en las calles desiertas. David aparcó el coche en el aparcamiento al aire libre de uno de los paseos que flanqueaban Broadway. Hulan sintió frío por primera vez desde que estaba en California y David le rodeo los hombros con el brazo cuando echaron a andar hacia el Café del Jade Verde. Ninguno de los dos iba armado.

Cuando llegaron a las ventanas del café, comprobaron que estaba cerrado al público. Hulan deseó que hubieran seguido el consejo de David y hubieran llamado al FBI o a la policía. La puerta del Café del Jade Verde estaba abierta y entraron. El olor bastó para que comprendieran por qué les habían hecho ir hasta allí.

– Quizá deberías esperar aquí -susurró Hulan.

– Iba a decirte lo mismo a ti.

– Estoy acostumbrada a la muerte -dijo ella.

– Lo haremos juntos -dijo David, cogiéndola de la mano.

Entraron en el café caminando con paso cauto. Aguzaron el oído, pero no les llego ningún sonido. David hizo un gesto en dirección a la cocina y Hulan asintió. Rodearon la caja registradora y empujaron las puertas batientes.

Zhao yacía en el suelo en cinco pedazos. Le habían cortado los brazos y las piernas, que era el castigo tradicional por traición a las triadas, y los habían arrojado al suelo descuidadamente, cerca de la cabeza y el torso. Detrás del cuerpo, sobre los fogones, una enorme olla de tres niveles despedía humos fétidos. Hulan fue la primera en moverse, pisando con cautela el suelo ensangrentado para apagar el fuego. David se inclinó sobre el cuerpo de Zhao, miro los ojos del inmigrante v revivió el momento en el Peonía en que había notado el tirón en la pernera de los pantalones.Le cerró los ojos con suavidad, se incorporo y se acerco a Hulan, que parecía paralizada, mirando fijamente la enorme olla.

– No creo que pueda hacerlo -dijo Hulan.

David levanto con cuidado la gran tapa de bambú y la dejo un lado. Dentro de la olla había una masa de carne hervida. Era todo lo que quedaba de Noel Gardner.

16

6 y 7 de f ebrero, Tribunal Federal

Telefonearon a la policía y al FBI. Llamaron al hotel y despertaron a Peter, que había vuelto de su juerga por la ciudad. Un agente del FBI lo llevo al restaurants una hora más tarde y aun medio borracho. Dado que Jack Campbell no contestaba al teléfono y al busca, dos agentes del FBI se presentaron en su casa y encontraron el teléfono descolgado, el busca sobre una mesa en la sala de estar al agente tirado en la cama profundamente dormido como consecuencia de una noche de alcohol y agitacion. Jack llego al Jade Verde afirmando que quería ver con sus propios ojos lo que le había ocurrido a su compañero. Después, se sentó en una de las sillas del comedor, hundi6 la cabeza entre las manos y se echo a llorar.

Eran cerca de las cuatro de la mañana cuando David y Hulan abandonaron el restaurante. Cuando salieron por la puerta de la calle se vieron asaltados por las haces de las cámaras, por los micrófonos que lanzaban hacia sus rostros por una andanada de preguntas de los medios de comunicación locales que habían recogido información de sus escaneres de la policía. David cogió a Hulan por el brazo y se abrió paso hasta el coche. Mientras conducía hacia Hollywood con una mano en el volante, con la otra apretaba con fuerza la fría mano de ella.

Una vez fuera de la autopista, David se concentró en las curvas que subían por la angosta carretera desde el fondo de Beachwood Canyon hasta debajo del letrero de Hollywood. Metió el coche en el garaje, abrió la puerta de casa, introdujo el código de seguridad del sistema de alarma y condujo a Hulan a la sala de estar pasando por la cocina. Hulan se sintio atraída por el ventanal en forma de arco y se detuvo ante él para contemplar las luces de la ciudad que tenía a sus pies. David había anhelado aquel momento muchas veces a lo largo de los años, pero ahora, al mirar su perfil recortado a la luz mortecina, solo sintió una tristeza desesperada.

– Quieres beber algo? ¿Coñac? ¿Agua?Una taza de te?

– Me siento responsable -dijo ella con tono afligido, volviéndose hacia David.

– Yo también, Hulan, pero no tenemos la culpa. No podíamos saber como acabarían las cosas.

– ¿Tenían familia?

– Noel era soltero. Dios mío, solo era un crío, sabes? En realidad aún no había empezado a vivir. ¿Y Zhao? Leí su expediente, pero no recuerdo qué decía.

Hulan se frotó los ojos. No había nada que decir.

– Vámonos a la cama -dijo él, cogiéndola del brazo.

David la abrazo y de repente quiso contarle todo lo que se había guardado desde que la reencontrara en el Ministerio de Seguridad Publica.

– No me has preguntado por mi mujer -dijo.

– No importa.

Hulan parecía sincera, pero él anadió;

– No quiero más secretos. Si esta noche nos ha enseñado algo… La vida es corta. El futuro es incierto. Son tópicos, Hulan, pero hay algo de verdad en ellos. -La atrajo más hacia sí-. No quiero que el pasado se interponga entre nosotros. Ya no, nunca más.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «La Telaraña China»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «La Telaraña China» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «La Telaraña China»

Обсуждение, отзывы о книге «La Telaraña China» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x