*
Podemos señalar otros aspectos que constituyen manifestaciones de la vitalidad de una sociedad que encuentra en las estructuras jurídico-políticas de su país el impulso necesario para su desarrollo. Nos referimos, por ejemplo, a su protagonismo en los deportes, la ciencia y la educación. Un informe publicado en el año 2006 concluye que de entre las veinte universidades más destacadas del mundo, diecisiete son de los Estados Unidos. Por el mismo estudio es posible reconocer que este logro debe atribuirse al esfuerzo conjunto que las esferas pública y privada han hecho por impulsar la educación. 22Sólo de entre la comunidad del Massachusetts Institute of Technology (MIT) (profesorado, investigadores, alumnos y empleados) podemos contar 61 premios Nóbel hasta el año 2005: 26 en física, 12 en química, 13 en economía, 8 en medicina y fisiología y 2 en el rubro de la paz. En particular, Estados Unidos ha sido uno de los principales promotores del avance tecnológico que caracteriza a la cultura científica de nuestro tiempo. Uno de sus últimos desarrollos al respecto es la sonda “Impacto Profundo”.
En efecto, en la madrugada del lunes 4 de julio del 2005, el proyectil de la nave “Impacto Profundo 1” ( Deep Impact 1) dio en el blanco: el cometa “Tempel 1” a 134 millones de kilómetros de la Tierra. Las comunicaciones que hoy privan en la sociedad global nos permitieron acceder prácticamente de manera inmediata a las imágenes tomadas tanto por el proyectil, como por la nave misma que registró el impacto y sus consecuencias sobre el cometa. Los datos de estas imágenes habrán de servir para avanzar en el estudio de los orígenes del sistema solar y la formación de las condiciones necesarias para el desarrollo de la vida. Hace aproximadamente 4 500 millones de años una nube gigante de gas y polvo se colapsó para crear el sistema solar. Los cometas se formaron entonces, con lo que resultan una suerte de testimonio de nuestros orígenes más remotos.
Esta misión representa un hito en la historia espacial: es la primera vez que se intenta un impacto deliberado contra otro cuerpo del sistema solar. Pero podemos decir algo más: es la primera vez que el ser humano interviene en el curso natural del sistema solar que, hasta ahora y a pesar de sus múltiples transformaciones, sigue haciendo posible la existencia humana. De modo que el éxito de la misión supone sin duda un paso significativo en la ciencia y tecnología contemporáneas. La información a analizarse durante los próximos años será fundamental para explicar nuestros orígenes, más allá incluso de los inicios de la vida inteligente. Pero ya la planeación, ejecución y resultados de este evento han causado un impacto profundo no sólo en los especialistas, sino en la sociedad en general. 23
*
En 1963, Gabriel Almond y Sidney Verba publicaron un estudio analítico sobre el estado que entonces guardaba la cultura política de la democracia —sus estructuras sociales y los procesos que la sustentan. Con este propósito levantaron una serie de encuestas en cinco países, uno de ellos Estados Unidos. 24Las conclusiones que allí consignaron son hoy en día sumamente aleccionadoras. Almond y Verba, por ejemplo, encontraron en el país un alto porcentaje de ciudadanos que se manifestaron orgullosos de su gobierno y sus instituciones políticas: 85%. De acuerdo también con los resultados del estudio, 76% de quienes creen que el gobierno nacional tiene un impacto en su vida diaria (85% respondió que el gobierno tenía gran o algún efecto), señalaron que este impacto era para mejorar sus condiciones de vida. Asimismo, 83% declaró que esperaba un trato igualitario de la burocracia ante una determinada situación, y 85% lo hizo con respecto a la policía; mientras que 80% de los encuestados dijo seguir regularmente, o de cuando en cuando, los asuntos políticos.
Otro dato importante para nuestro análisis se refiere al alto sentido de competencia cívica que Almond y Verba encontraron en Estados Unidos entonces. En efecto, 77% afirmó pensar que podían hacer algo en caso de que se presentara una regulación local injusta. Con relación a una regulación injusta de carácter nacional, 75% consideró poder hacer algo. Además, en el caso de una posible influencia en el gobierno local, 56% señaló la idea de organización un grupo informal —no político— para enfrentar una medida injusta. Este alto sentido de competencia cívica a nivel local nos remite, desde luego, a la amplia participación en política que a nivel de comuna o municipio daba cuenta ya, como vimos, Tocqueville. Estos resultados se centran en la percepción que los encuestados tienen de su papel como ciudadanos y sujetos del orden político. Pero de ellos es posible derivar además una cierta concepción del poder político que se tenía en Estados Unidos a inicios de la década de los sesenta: se trataba de un gobierno sustentado en el consenso que delega el poder a sus autoridades; de un poder, por tanto, emanado de la ciudadanía, que mantiene intacta su convicción en torno a la soberanía popular y, con ello, su derecho a participar en la configuración y toma de decisiones que ordenan su vida en común.
Ahora bien, Almond y Verba dan un paso más allá en su estudio sobre los aspectos políticos de la cultura democrática para adentrarse en un terreno que, desde nuestra perspectiva, es hoy en día fundamental para la viabilidad de la democracia: el ámbito —más amplio— de las relaciones sociales que subyacen al orden político. De aquí la idea de una “cultura cívica” que no se limita a los aspectos ciudadanos y de participación política en el orden público, sino que abarca también aspectos de carácter social, así como el papel de “sujeto” del sistema administrativo. En este aspecto la investigación arroja en Estados Unidos altos índices de confianza entre los ciudadanos. El 59%, además, responde valorar sobre todo las virtudes sociales de generosidad y consideración, siendo ésta una apreciación clave cuando se trata de tomar la iniciativa para formar grupos políticos. Entre quienes afirmaron tener “fe” en las personas, 80% señaló que trataría de formar algún grupo para influir en el gobierno local. Para Almond y Verba, esta confianza social en general se traduce en una confianza políticamente relevante. 25Por último, 57% de los encuestados señaló pertenecer a alguna asociación voluntaria, sobre todo de carácter social, religiosa, fraternal, cívico-política y sindical. 26Estados Unidos, de acuerdo con este estudio, representa el modelo más cercano a una cultura cívica propiamente democrática, es decir, a la existencia de una ciudadanía. En definitiva, lo que al inicio de los años sesenta encontraron Almond y Verba fue un país cohesionado política y socialmente.
Конец ознакомительного фрагмента.
Текст предоставлен ООО «ЛитРес».
Прочитайте эту книгу целиком, купив полную легальную версию на ЛитРес.
Безопасно оплатить книгу можно банковской картой Visa, MasterCard, Maestro, со счета мобильного телефона, с платежного терминала, в салоне МТС или Связной, через PayPal, WebMoney, Яндекс.Деньги, QIWI Кошелек, бонусными картами или другим удобным Вам способом.