Dieter Scharnhorst - Los difuntos se pronuncian

Tal vez pueda hacer esto en otra ocasión, porque se podría decir mucho sobre esto en detalle. Pero en esta hora no es importante mencionar todos los detalles, porque me gustaría daros una imagen de ese otro mundo, donde pueden entrar las almas de los hombres, que han ganado la verdadera felicidad a través de su vida ejemplar en la tierra.

Ese mundo no es como a veces se describe en la enseñanza de la iglesia de los hombres, como si sólo hubiera un constante canto, oración y llamado de Aleluya. No, el cielo no se ve así, y no se le podría llamar gloria, si estuviera así constituido. Lo glorioso y espléndido sólo puede ser algo que deleita al espectador, y si lo que ve también se rediseña constantemente. Nadie quiere experimentar lo mismo para siempre. Así que el mundo divino en su esplendor y variedad debe ser constantemente remodelado, sólo así se puede hablar de arrebato, de sorpresa, de gloria celestial. De este mundo y variedad infinita, uno debe reconocer como el Creador al Padre bondadoso y misericordioso, que tiene todas estas glorias formadas a través de sus mensajeros y que se preocupa tanto por hacer feliz a los suyos. Esta felicidad sucede en la forma en que te la he descrito. Soy muy consciente de que es difícil para algunos entender esto. Pero esto sólo de pasada.

Volvemos con nuestra hermana, que ahora en compañía de los hermanos y hermanas divinos conoció una parte del reino animal espiritual. Tuvieron que explicarle tantas cosas, porque en su vida humana no tenía ni idea de estas formas celestiales. Ahora, como recompensa por su vida justa en la tierra, se le permitiría experimentar las bellezas del mundo de Dios. En medio se le dio una amplia oportunidad de aprender sobre el significado y el propósito de la vida en la tierra y de ser iniciada en el plan de salvación y creación de Dios. Así que nuestra hermana ahora admiraba este gran reino animal. Sin embargo, los animales allí no son simplemente abandonados a sí mismos, sino que están bajo el cuidado de los espíritus de Dios, que pueden ser llamados guardianes o administradores. Los animales de la misma clase y especie siempre viven juntos como familias, pero todos pueden moverse libremente. No hay límites para ellos, sólo que viven juntos en el área disponible para ellos. Seres espirituales divinos presiden estos grandes rebaños como guías. Al mismo tiempo, también hay entre los propios animales ciertos líderes, a los que los demás deben obedecer. Así, un maravilloso orden rige sobre esta diversidad de animales. Explicar esto con más detalle sería ir demasiado lejos, y tampoco es mi tarea.

Ahora los ángeles le pidieron a Melissa que se fuera con ellos, aunque le hubiera gustado quedarse más tiempo en el reino animal. También esta vez se le dijo

"Puedes volver aquí más tarde sin más y permanecer en este reino animal a voluntad hasta que lo hayas visto todo. Puedes quedarte todo el tiempo que quieras, pero antes de eso tenemos otra parte del cielo para mostrarte.

Otra vez fue como un flash. Sucedió tan rápido que nuestra hermana ni siquiera fue capaz de notar los cambios. Parecía como si estuviera volando a través de paisajes florecientes. Así que uno entró en un nuevo nivel. Pero esta vez era una ciudad colorida. La casa siguió a la casa, pero cada una mostró una apariencia diferente. A pesar de esta diferencia, todo encajaba armoniosamente. También aquí nuestra hermana tenía todo para admirar.

"En cada casa hay algo muy especial que experimentar", le dijeron los ángeles. En cierto modo, esta ciudad es un museo. Puedes ir de una casa a otra como quieras, y puedes ver lo que te interesa."

Nuestra hermana se sorprendió y dijo:

"Sí, entonces debo quedarme aquí por toda la eternidad antes de poder entrar en todo lo que me has mostrado. Parece imposible que me interese todo, porque es demasiado grande y enorme... "

Esto se le admitió, de hecho fue así. Pero tienes ciertas tendencias en ti y éstas se desarrollarán en ti después de un cierto período de existencia. Entonces te dedicarás a uno u otro. Sólo queríamos darle una idea de la variedad del mundo celestial, en el que podrá comprender. Después tendrás tiempo suficiente para ir de un cielo a otro y experimentar lo que disfrutas. "

De esta manera la hermana sería recompensada por su vida en la tierra, ya que el cielo se regocijaba con su trabajo y su regreso a casa. La recompensa por su trabajo fue que se le permitió experimentar el mundo divino de la forma en que te lo describo.

Los ángeles que la acompañaban la condujeron ahora a cierta casa, ya que para ellos también estaba claro que sería imposible conducirla a todas las casas y darle las explicaciones necesarias. Así que le mostraron un extracto.

"Aquí se ven pinturas", dijeron los ángeles, "pinturas que representan personas que vivieron en la tierra y cuya vida en la tierra fue de especial importancia para el mundo espiritual. Aquí, por ejemplo, se ve a la primera persona que tiene un cuadro que muestra cómo vivió. Aquí están todas las personas representadas que han hecho cosas significativas para el mundo espiritual, desde el principio de la humanidad en la tierra. Por supuesto, esto es sólo un extracto para darle una primera visión. "

De nuevo, nuestra hermana estaba extremadamente cautivada, todo era tan excitante e interesante, y por eso quería ver esto más de cerca. Hizo pregunta tras pregunta, y los ángeles le dieron la respuesta. Porque aquí todo estaba al mismo tiempo entrelazado con la enseñanza espiritual. Nuestra hermana sólo tenía que maravillarse y asombrarse, todavía quería ver más, para que los espíritus de Dios le dijeran de nuevo, que más tarde podría contemplar esto por sí misma en todo el ocio, podría volver aquí de nuevo, pero ahora iba a ser llevada a otro nivel.

Melissa, que ya se sentía muy feliz por todo lo que había experimentado hasta ahora, estuvo de acuerdo, y un nuevo cielo se abrió para ella. Aquí estaba en un pueblo pequeño, pero muy diferente del que acababa de visitar. Pensó que aquí experimentaría el cielo más alto. Vio casas de indescriptible belleza, entre árboles muy altos y animales de aquí y de allá en maravillosos jardines. En esta llanura todo era de una diversidad nunca experimentada para ella. Los ángeles la invitaron a entrar con ellos a un salón abierto, que tenía columnas de mármol blanco en todos los lados, a través de las cuales se podía pasar. No puedo describir el techo que se extendía sobre este pórtico en su belleza y en la preciosidad de los materiales de construcción espiritual utilizados para ello. En la sala había una mesa con preciosos vasos y adornos florales. Frente a cada nave había una silla, en realidad estas sillas parecían tronos, uno tan magnífico como el otro. El salón todavía estaba vacío. Nuestra hermana debía entrar primero, sólo entonces llegarían los invitados. Los ángeles que la acompañaban le pidieron a nuestra hermana que ocupara el lugar que le habían asignado. En el mismo momento en que los invitados aparecieron por todos lados. Se pararon al lado o detrás del asiento del trono y felicitaron a nuestra hermana por su regreso a casa. Primero habló un ángel guía, y luego cada espíritu tomó la palabra y saludó y felicitó al que regresaba. Después de eso, todos se sentaron y bebieron de la exquisita bebida que se sirvió. Bendita sea nuestra hermana por esta experiencia. Estos altos seres que la rodeaban estaban tan maravillosamente vestidos que pensaba que tenía al ángel más alto de Dios ante ella en cada uno de ellos. Pero le dijeron:

"Aún no es hora de que te enfrentes al Príncipe supremo del Cielo. Llevará algún tiempo."

Pero ahora nuestra hermana ya había adquirido un indicio de la indescriptible gloria del cielo, y admiraba a cada uno de los seres divinos que se sentaban a la mesa con ella. Por supuesto que tenía que irse de nuevo, pero antes de hacerlo, pidió que se le permitiera hablar con todos y cada uno de estos ángeles de Dios. Pero le hicieron entender que tenían todas sus tareas, así que no podían quedarse. Pero ella tendría de nuevo la oportunidad de entrar en este cielo y así estarían juntos de nuevo. Mientras tanto, se le aconsejó que dejara que los espíritus de Dios le informaran detalladamente sobre todo lo que había experimentado hasta entonces. Debe ser comprensible para ella que hasta que no haya experimentado y probado todo hasta el final, pasará un tiempo incalculablemente largo.