Allison Brennan - La Caza

Здесь есть возможность читать онлайн «Allison Brennan - La Caza» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: Триллер, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

La Caza: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «La Caza»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Sólo hay una cosa que Miranda no puede perdonarse a sí misma: haber sobrevivido. Doce años atrás, consiguió escapar de las manos del asesino conocido como El carnicero, pero al hacerlo tuvo que dejar atrás a otras víctimas como ella, atrapadas, torturadas y asesinadas por un sádico que siempre ha ido un paso por delante de la policía. Ahora, vuelve a actuar. Miranda ya no es la presa, sino el cazador: sabe que atraparlo es la única manera de volver a encontrar la paz. Pero para ello tendrá que reencontrarse con Quinn, el hombre que la ayudó a superar el miedo y, también, el que la traicionó cuando más lo necesitaba. Ahora los dos se enfrentan a la más perversa mente criminal… pero también a unos sentimientos que han intentado enterrar durante años.

La Caza — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «La Caza», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Quinn le había dicho que durmiera un poco. Le hacía falta, y lo deseaba, pero tenía la cabeza hecha un torbellino. Cada vez que cerraba los ojos, le venía el recuerdo de la pequeña foto de Larsen en su expediente universitario.

La sensación era de irrealidad. Ponerle rostro al Carnicero. ¿Sería Larsen? No lo sabía. Ahora le había visto la cara, pero no podía decir con certeza que era él.

Casi le había pedido a Quinn que se quedara a pasar la noche. Se preguntó si acaso él esperaba que ella se lo propusiera. Ahora deseaba haberlo hecho.

La rabia que cultivó durante tanto tiempo parecía haberse disipado en los últimos días. Al ver a Quinn la primera vez, se sintió muy irritada, asombrada y preocupada de que él viera qué ocultaba ella detrás de su fachada de mujer dura. Temía que fuera a cuestionar cada una de sus decisiones, o a censurar todo lo que dijera o hiciera.

Sin embargo, al despertarse esa mañana, no temía lo que él pudiera decir al verla debatirse bajo la tensión de la investigación. Al contrario, tenía ganas de verlo.

Se puso el anorak grueso, enfundó la pistola y abandonó el calor de su cabaña. Se detuvo en el porche, respirando el aire frío. A pesar de estar bien abrigada, se echó a temblar. Esa noche haría unos siete grados. No bastaba para que la pobre Ashley se congelara, pero seguro que desearía estar muerta.

Miranda lo había deseado.

Llegó a medio trote hasta la entrada de los empleados de la hostería. No se permitió a sí misma dudar de su decisión. Subió directamente por las escaleras hasta su habitación y llamó a la puerta.

Quinn abrió. Llevaba unos pantalones de chándal grises y nada más. Miranda se quedó sin aliento al ver su pecho desnudo. Creía haber olvidado lo guapo que era, pero no. Recordaba cada uno de los músculos bien definidos de su cuerpo. Ni un gramo de grasa.

Era tan perfecto ahora como lo había sido a los treinta años.

– No podía dormir -dijo, con la respiración un poco acelerada. El corazón le martilleaba, expectante. Al venir, ella sabía lo que pasaría. Lo que esperaba que sucediera.

Lo necesitaba. Quinn espantaría sus demonios y la haría sentirse protegida. Deseable. Más como mujer y menos como víctima.

– Miranda…

Ella entró y cerró la puerta. Quinn le cogió la mano y tiró de ella.

– No me había dado cuenta de lo mucho que te añoraba -dijo Miranda, con una voz ronca que no parecía la suya.

– Dios mío, cómo te he echado de menos, Miranda -dijo él. Y la besó.

Esta vez, no había nada de timidez en el beso. Quinn le cogió la cara y se entregó a ella. Ella se sintió como si hubiera vuelto a casa.

Nunca había dejado de amarlo. Quinn había tenido una paciencia ejemplar con ella, y le había prestado un apoyo increíble. Le ayudó en todo, incluyendo la recomendación para la Academia aún cuando pensara que no estaba preparada.

Los sentimientos de traición y miedo que experimentaba Miranda fueron barridos por ese cálido beso. Estalló el calor. Ella no quedaría satisfecha con un solo beso. Quería más. Lo quería todo.

Quería que él volviera.

Quinn se apartó, la miró y frunció el ceño.

– ¿Qué pasa? -preguntó.

– ¿Qué pasa? Nada.

– ¿Y esto? -dijo, y le secó las lágrimas de la mejilla. Ella no se había dado cuenta. Quinn se besó los dedos húmedos, y luego la besó en la mejilla.

– Miranda, llevo tanto tiempo deseando que vuelvas a mí.

Ella le cogió la mano, le besó la palma y la guardó cerca de su boca.

– Me he dado cuenta de una cosa estos últimos días. Tú tenías razón. Yo quería ingresar en el FBI por motivos equivocados. Creía que la placa me daría el valor necesario. Que sería un escudo contra el miedo con que vivía cada día.

– Miranda, eres la persona más valiente que he conocido. Nunca has necesitado una placa para confirmarlo.

– Eso lo entiendo ahora. Pero no sé si mañana tendré el valor si tú no estás. Si Larsen es de verdad el Carnicero, no sé cómo voy a enfrentarme a él.

– No tienes que hacerlo.

Ella asintió.

– Sí que tengo que hacerlo. Iba a decir que no sé cómo voy a enfrentarme a él, pero lo haré. Me demostraré a mí misma que puedo hacerlo. Pero será más fácil si te tengo a mi lado.

Quinn la atrajo lo más cerca posible, envuelta como estaba en sus capas de ropa.

– Miranda, estaré ahí en todo momento.

– ¿Me puedo quitar el anorak?

Quinn sonrió y la besó en la frente al tiempo que le ayudaba a quitarse la chaqueta. Y el jersey. Y la blusa, hasta que se quedó en camiseta y vaqueros. Era evidente que Quinn quería comérsela. Ella se sintió arder bajo su mirada.

Se apoyó en la punta de los pies y lo besó.

Él le sostuvo la cara con las manos y la besó una y otra vez, como queriendo compensar todos los besos que se habían perdido a lo largo de los años. ¿Cómo era posible que ella hubiera renunciado a todo ese afecto? Con cada beso, volvía a sentir esa cálida intimidad que habían compartido, además de la paciencia de Quinn, su apoyo. Y la primera vez que hicieron el amor.

De sus labios escapó un gemido y él la llevó suavemente hasta la cama.

– Eres muy bella, Randy -murmuró, y sus labios le dejaron un reguero de besos en el cuello, hacia abajo y luego hacia arriba. Ella se estremeció, como sacudida por ligeras descargas eléctricas que le recorrían la columna.

Miranda lo atrajo, tirando de él, para besarlo con todas sus ganas, pero él se demoró con ligeras caricias, paseando los dedos lentamente por sus brazos, por encima de sus pechos, y luego de vuelta. Una sensación tan seductora que a ella le entraron ganas de quitarle el pantalón del chándal.

Pero estaba disfrutando de cada delicioso instante. Había pasado mucho tiempo, demasiado tiempo.

Ella se estiró y le acarició la espalda. Él la miró con sus ojos oscuros, y le tembló la mandíbula, tal era su deseo contenido.

– Miranda, ¿estás segura?

Ella asintió, se irguió a medias y lo besó.

Quinn quería hacerle el amor. Ahora.

Habían pasado más de diez años desde la primera vez y, en aquella ocasión, él sabía que ella no lo había disfrutado. Miranda quería acabar lo más rápido posible, como si quisiera demostrarse algo a sí misma. Que ella le confiara su cuerpo y alma convirtió aquello en una experiencia vibrante, y él nunca la presionó. Pero a medida que evolucionaba la relación y Miranda se encontraba más cómoda con él en la cama, sus sesiones de amor se volvieron apasionadas y calientes.

Ahora, el contacto de sus dedos despertaba en él el mismo fogoso deseo. Y, a juzgar por cómo ella se acoplaba a él, la estaba tocando justo donde más le gustaba.

Quinn le quitó los vaqueros y la delgada camiseta.

La primera vez que vio las cicatrices que el Carnicero le había dejado en los pechos, no pudo disimular una rabia animal. Miranda lo interpretó como una señal de rechazo, y él tardó días en hacerle entender que no era eso.

Miranda era bella, con sus cicatrices y todo. Él la había convencido de su sinceridad y su amor, pero cada vez que dejaba ver sus pechos, se ponía tensa.

Él los besó. Suavemente. Amorosamente. No se detuvo demasiado en su torso, sabiendo que ella no se sentía del todo cómoda. Lo recordaba todo de Miranda. Estaba más delgada y se le notaban las costillas. Ojalá hubiera estado a su lado para asegurar que comiera lo debido y se mantuviera sana. Sin embargo, sus músculos eran duros y fibrosos. Tenía mejor forma física ahora que cuando quiso ingresar en la Academia, pero eso no lo sorprendió.

Quinn estaba orgulloso de ella. De que hubiera trabajado tanto para llegar donde estaba. Y ¿ella creía que le faltaba valor? Miranda era la encarnación misma del valor.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «La Caza»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «La Caza» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Allison Brennan - Stalked
Allison Brennan
Allison Brennan - Love Is Murder
Allison Brennan
Allison Brennan - Silenced
Allison Brennan
libcat.ru: книга без обложки
Allison Brennan
Allison Brennan - Love me to death
Allison Brennan
libcat.ru: книга без обложки
Allison Brennan
Allison Brennan - Playing Dead
Allison Brennan
Allison Brennan - Killing Fear
Allison Brennan
Allison Brennan - Cutting Edge
Allison Brennan
Allison Brennan - Fatal Secrets
Allison Brennan
Allison Brennan - Sudden Death
Allison Brennan
libcat.ru: книга без обложки
Allison Brennan
Отзывы о книге «La Caza»

Обсуждение, отзывы о книге «La Caza» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x