Aldivan Teixeira Torres - La Noche Oscura Del Alma

¡Hola, lector, cuánto ha pasado! Cerca de un año ya que he entrado en la cueva de la desesperación y he realizado mi sueño al comenzar mi carrera como escritor y por defecto convertirme en vidente, un ser súper dotado. Ahora, me siento listo para perseguir mis sueños. Antes de esto, sin embargo, brevemente decirles lo que me ha pasado en el periodo de tiempo de post-cueva. En algún momento después de subir la Montaña de Ororubá, encontrándome con el vigilante, la juventud y el pequeño muchacho y todavía estar enfrente al fantasma y los desafíos, volví a la casa de mis padres, confiado, victorioso, feliz y complaciente a reanudar la vida pasada. Era exactamente lo que hice y con la dedicación al trabajo y los estudios terminé la universidad y conseguí nuevas ideas para continuar mi carrera. Esto era un momento necesario e importante, que me dio una satisfacción inmensa, porque mis esfuerzos fueron recompensados. Sin embargo, yo todavía no estaba completamente realizado, porque todavía no había alcanzado la realización del sueño más grande: Ver mi serie “El vidente” en lo alto de la literatura mundial. Tal vez soy muy pretencioso, pero de esta forma me siento, al final, soy un vidente transformado por los poderes milagrosos de la cueva de la desesperación, la cueva más peligrosa en el mundo. Bien, dejaré al destino decidirlo.

Con el éxito de la primera tarea que debía reunir las “Fuerzas Opuestas”, para controlarlas y ayudar a alguien a encontrarse a sí mismo, puedo decir que me siento listo para la siguiente aventura. Pensando en esto, tomé la decisión siguiente: volver a la tierra sagrada de la montaña de Orobubá y encontrar al guardián así podrá ayudarme con el mayor objetivo de este libro, el cual es entender la peligrosa y misteriosa “Noche oscura del alma”.

La decisión hizo que yo comenzará a empacar mis maletas, separando los objetos más necesitados: Alguna ropa, mi crucifijo, mi Biblia, mi reloj de bolsillo, un cuaderno, artículos de higienes esenciales y libros para mantenerme ocupado durante y después del viaje. Después de organizar todo eso, voy a la cocina con la intención de decir adiós a la familia. Encontrando a mi madre, la abrazo y comienzo el difícil diálogo:

—Querida madre, vine para decirle que he decidido volver al pueblo de Mimoso con el objetivo de conseguir la segunda etapa de mi mejora crítica, espiritual, moral y humana. Es un viaje estrictamente necesario de modo que yo pueda entender finalmente lo que me ha pasado desde hace tiempo, mi noche oscura del alma, y esto es una situación común con todos los mortales.

— ¿Otro viaje a Mimoso? ¿Podría ser que usted no puede ver qué tan loco eso es, mi hijo? Su lugar es a mi lado. ¿Por qué es tan importante esta noche oscura al punto que usted está queriendo abandonarme?

—Voy a Mimoso en busca mis sueños. La primera etapa fue llevada a cabo, pero está en el pasado y ahora busco nuevos desafíos. Creo que la respuesta está en las montañas y por lo tanto voy allí. Madre intente entender, usted me ha criado para el mundo y no para usted. Recuerde que soy el vidente, el único ser humano que sobrevivió la cueva de la desesperación, y tengo mis responsabilidades con los lectores y el mundo. En vez de tratar de convencerme de no ir, usted debería animarme, porque lo he decidido. De cualquier modo, quise encontrarla para darle un abrazo.

Después de haber dicho eso, me acerqué a mi madre y nos abrazamos. Este gesto, sensible y vigoroso, ha recuperado mis energías, y era exactamente lo que yo necesitaba para afrontar los siguientes desafíos, incluso éste. Después de abrazarla, finalmente dije adiós a mi madre y caminé a las puertas con lágrimas en mis ojos. Mientras tanto mentalmente analizo mis planes para el viaje. ¿Qué me estará esperando? Yo no tenía la menor idea. Yo sólo estaba seguro que revivificarían e instigarían experiencias. Lector, vamos a continuar juntos.

Después de un rato, finalmente dejo la casa. Inmediatamente comienzo a buscar un medio cómodo de transporte, tranquilo y económico para llegar a Mimoso. Analizo todas las posibilidades y termino por decidir que el más viable era un taxi, porque la distancia no era muy larga (24 kilómetros). Decisión tomada, hago el uso de mis recursos de tomar el primero que pase. Después de algunos intentos, finalmente tomé uno. El coche se detiene, entro en él, cierro la puerta y me pongo cómodo. En este momento, siento que estoy siendo examinado por el conductor, justo antes él me pregunta

— ¿Hasta dónde, señor?

Le miro y simplemente contesto:

— Vamos a Mimoso, un lugar cerca de la Montaña Ororubà, una montaña sagrada.

Habiendo dicho esto, él me miró con desprecio, diciendo:

—Bien, sé muy bien donde queda Mimoso, vamos. Sin embargo, yo no sabía que la montaña de Ororubà era sagrada. Hábleme ahora sobre esta historia.

Sin querer perder demasiado tiempo haciéndolo, prometo:

— Está a lo largo de la historia. Lo diré durante el viaje. ¿Podemos ir? Estoy ansioso de llegar a mi destino.

Él está de acuerdo conmigo, aunque no feliz, y luego el coche arranca a mediana velocidad. Mientras tanto, de vez en cuando, el conductor me mira. ¿Qué estará pensando de mí? Pienso un rato y llego a la conclusión que su reacción es natural, después de todo pocos saben sobre el secreto de la cueva. Sin embargo, no soy ningún tonto de modo que él pueda tratarme de tal manera. Como consiguiente, decido decir la verdad.

— Conductor, estoy listo para explicar. ¿Cómo se llama usted?

— ¿Mi nombre es Aurelio y el suyo?

—Mi nombre es Aldivan, pero usted puede llamarme el vidente o el hijo de Dios. Voy a explicarme de modo que usted pueda creer en la declaración que hice hace un rato.

— Estoy listo. Usted puede contarme.

— Hace aproximadamente un siglo las tribus de Xukuru estaban en la guerra debido a los trucos de un hechicero llamado Kualopu. Durante mucho tiempo hubo muchas batallas peleadas y así la nación de Xukuru estaba en peligro de desaparecer. Observando eso un hechicero amable decide intervenir. Él hizo un pacto con las fuerzas del Universo, ofreciendo su vida a cambio del final de la guerra. Después de aquel pacto un milagro ocurrió. El hechicero fue asesinado y la guerra terminó. El hechicero pagó el precio y la paz fue restaurada. Desde aquel día la montaña de Ororubà se hizo sagrada y la cueva de desesperación, localizada en su cumbre, recibió poderes milagrosos capaces de convertir cualquier sueño en realidad, con la condición de que los sueños no sean egoístas. Es la segunda vez que tengo el placer de vivir en la montaña.

— Muy interesante. Usted dice que esta es la segunda vez que usted va allí. ¿Cómo fue la primera vez?

— Fue hace un año. Yo era un pobre soñador en busca de sabiduría y controlar mis “Fuerzas opuestas”. Con aquel objetivo subí la montaña, alcance la cumbre, encontré al vigilante (un ser milagroso que sabe misterios profundos), desafíos llevados a cabo, encontré al fantasma, la juventud y el niño, y finalmente entré en la cueva. Esta última experiencia cambió mi vida completamente, porque me hizo el vidente, un ser capaz de superar las barreras de tiempo y espacio y omnisciente por sus visiones. Con mis nuevos poderes, yo podría entender los sentimientos más profundos y las intenciones de las otras personas. Mientras tanto, todavía no puedo decir que estoy listo. La vida es un aprendizaje eterno en el cual la cueva era sólo una etapa. Ahora estoy listo para nuevos desafíos y por lo tanto mi vida está de vuelta. Esta vez quiero entender mi noche oscura del alma, el significado de todo lo que he vivido hace dos años. Creo que encontraré respuestas en la montaña o al menos comenzaré un nuevo viaje.