• Пожаловаться

Lucy Gordon: La fuerza del destino

Здесь есть возможность читать онлайн «Lucy Gordon: La fuerza del destino» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию). В некоторых случаях присутствует краткое содержание. категория: Современные любовные романы / на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале. Библиотека «Либ Кат» — LibCat.ru создана для любителей полистать хорошую книжку и предлагает широкий выбор жанров:

любовные романы фантастика и фэнтези приключения детективы и триллеры эротика документальные научные юмористические анекдоты о бизнесе проза детские сказки о религиии новинки православные старинные про компьютеры программирование на английском домоводство поэзия

Выбрав категорию по душе Вы сможете найти действительно стоящие книги и насладиться погружением в мир воображения, прочувствовать переживания героев или узнать для себя что-то новое, совершить внутреннее открытие. Подробная информация для ознакомления по текущему запросу представлена ниже:

Lucy Gordon La fuerza del destino

La fuerza del destino: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «La fuerza del destino»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Nick Kenton no podía creérselo. La pizpireta y pecosa adolescente que no lo había causado más que quebraderos de cabeza, llegando incluso a arruinar su vida amorosa, había vuelto a aparecer en su vida y él se veía obligado a cuidar de ella. Pero la sorpresa fue aún mayor cuando descubrió que la desgarbada quinceañera se había convertido en una mujer. Una mujer hermosa y radiante que lo hacía reír y amenazaba con volverlo loco. Y, mientras ella ponía patas arriba su cómoda y ordenada vida en Londres, Nick era completamente ajeno al plan que Katie había tramado para seducirlo y casarse con él.

Lucy Gordon: другие книги автора


Кто написал La fuerza del destino? Узнайте фамилию, как зовут автора книги и список всех его произведений по сериям.

La fuerza del destino — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «La fuerza del destino», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема

Шрифт:

Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

– Lo sé -replicó ella, llevándose el pañuelo a los ojos-. Supongo que no es culpa tuya que seas tan insensible, Nick. La naturaleza te ha hecho así. No te puedes imaginar lo que es estar tan lejos y soñar con tu familia…

– Pero no soñabas conmigo, ¿verdad? Y, si soñabas, imagino que en los sueños me clavarías agujas -ironizó él. En ese momento, vio que las lágrimas asomaban a sus ojos-. Katie, no llores. Era una broma. Perdona, no quería ser tan grosero.

– De verdad, Nick, es como quitarle un caramelo a un niño -dijo ella entonces, sonriendo de oreja a oreja-. No deberías dejar que te tomase el pelo con tanta facilidad.

– Pero, ¿serás… -empezó a decir él-. Ahora me acuerdo de que solías llorar cuando te daba la gana.

– Sí, entre todos mis otros pecados, deberías haber recordado ése -asintió ella.

– ¿Qué voy a hacer contigo?

– Por ahora, darme de comer. ¿Dónde está la lasaña que habíamos pedido?

Los camareros aparecieron a su lado como por encanto y, mientras uno retiraba el plato de spaguetti, el otro servía la lasaña y un tercero aparecía para servir el vino. Ella los recompensó con una sonrisa deslumbrante y los tres jóvenes se quedaron embobados.

– Habría muchos chicos jóvenes en Australia, supongo -dijo Nick, admirado ante aquella exhibición de poder.

– No lo sé. Es posible -contestó ella, como sin darle importancia.

– ¿Has perdido la cuenta?

– No, me parece que no he conocido tantos .

– Si lo que estoy viendo aquí es un ejemplo, yo pensaría que s í has conocido a muchos.

– ¿A qué te refieres? -preguntó ella, con aire de inocencia-. Ah, los camareros. ¿No pensarás que están pendientes de mí?

– No te hagas la tonta. No se ve una cara como la tuya todos los días.

– ¿De verdad te parezco guapa, Nick? -sonrió ella, iluminando parte del salón.

– Pasable -contestó él, negándose a morder el cebo.

– ¡Ja!

– No pienso seguirte el juego. Déjalo para impresionar a los críos de tu edad. Mientras estés aquí, yo soy como tu padre.

– No creo que seas mucho mayor que yo.

– No demasiado, pero te recuerdo que Isobel te crió y que yo estuve a punto de casarme con ella.

– ¿Casarte con ella? De eso nada.

– Prefiero no hablar de eso, si no te importa -dijo él, irritado.

– Has empezado tú, diciendo que eres como mi padre. De verdad, Nick, no deberías infravalorarte de ese modo. Tampoco estás tan mal.

– ¿Quieres terminar de cenar, por favor?

– Era una broma. No te habrá molestado, ¿verdad?

– Pues sí -contestó él. Katie seguía comiendo su lasaña con un apetito sorprendente-. Veo que tienes buen apetito -observó-. ¿No me digas que tú no miras las calorías?

– Nunca me preocupo por mi peso -contestó ella, indiferente-. Como lo que quiero y no engordo… ¿no pensarás que estoy gorda? -preguntó, alarmada de repente, pasándose las manos por las caderas.

– No estás gorda -contestó él, incapaz de apartar los ojos de la figura femenina.

– ¿Estás seguro? Mírame bien.

– Te estoy mirando bien.

Era curioso lo diferente que era de Isobel. Las dos hermanas eran de piel clara, pero la piel de Isobel era como la leche, mientras que la de Katie era más bien como de melocotón. Isobel parecía pintada en tonos pastel, mientras Katie brillaba con colores vivos y radiantes. Su corta estatura no le restaba atractivo, más bien al contrario.

Satisfecha de su figura, Katie seguía comiendo.

– Isobel me ha dicho que te has convertido en un banquero.

– Bueno, no exactamente. Trabajo para una firma bancaria como asesor financiero y me va muy bien.

– ¿Por qué tienes que ser siempre tan prosaico? ¿Dónde está la emoción?

– ¿Qué emoción?

– La emoción de conducir la máquina del progreso -dijo ella teatralmente-. De mover las ruedas del dinero. Isobel me había dicho que eras un tipo importante.

– ¿Ah, sí? -preguntó él, intentando que su expresión no mostrara lo complacido que se sentía por el comentario.

– Y que tenías un apartamento de lujo con vistas al río. Estoy deseando verlo.

– Iremos a casa en cuanto termines de cenar. Patsy está deseando conocerte.

– ¿Patsy? -preguntó ella, con una voz un poco hueca.

– Es mi secretaria. Te gustará, es una persona muy cariñosa.

– Qué bien -dijo Katie, sin mirarlo.

– Va a quedarse en casa mientras tú estés en Londres.

– ¿Por qué? ¿Por si acaso me decido a atacarte? Dile que no tiene que preocuparse por eso.

– No digas tonterías. Por cierto, no te he hablado de Derek. Es mi compañero de piso y…

– ¿Es joven?

– Sí.

– ¿Guapo?

– Las mujeres parecen creer que sí. Pero te aconsejo que no le prestes atención.

– Eso va a ser difícil si vamos a vivir bajo el mismo techo.

– Esa es la razón por la que Patsy va a vivir con nosotros.

Katie lanzó una carcajada.

– Estás intentando proteger mi virtud. Qué simpático.

– Katie, una chica no puede compartir piso con dos hombres solteros sin que la gente murmure.

– Si tu compañero es tan serio y tan tieso como tú, no hay nada de qué preocuparse.

– Si Derek fuera como yo, no habría ningún problema -suspiró él.

– Nick, si hubiera más hombres como tú, el mundo tendría muchos problemas.

– ¿Es que no puedes hablar en serio?

– Estoy hablando en serio -contestó ella-. Háblame de Derek. ¿Trabaja contigo?

– No, se dedica a los ordenadores. Inventa sistemas, programas y esas cosas. Es una especie de genio, pero su personalidad podría definirse como rebelde. Le gusta «apurar la copa de la vida», como él dice. Pero yo creo que lo que le gusta es apurar todas las copas que le pongan por delante.

Demasiado tarde se dio cuenta Nick de que había dicho exactamente lo que no debería haber dicho.

– ¡Ese Derek tiene que ser divino! ¿Cuándo voy a conocerlo?

Nick decidió que tendría que pensar las cosas dos veces antes de decirlas. Estaba impresionado por el cambio que se había producido en Katie y no acertaba a hacer las cosas bien.

Y era culpa de ella, sentada allí como una diosa, con aquellos misteriosos ojos verdes que parecían prometer mil cosas. Derek se volvería loco al verla.

Nick estaba preparado para una Katie rebelde, salvaje, pero nadie le había advertido que se encontraría con una Katie bellísima. En aquel momento, la situación parecía abocada al desastre e Isobel lo culparía por ello.

– Lo conocerás esta noche -dijo él-. Suponiendo que se decida a dormir en casa.

– Ese chico parece fascinante. Además, si a ti no te gusta, a mí me tiene que encantar.

– Muchas gracias -dijo él, irritado.

– Puede que sea mi tipo.

– Ninguna mujer sensata se acercaría a él.

– ¿Y desde cuándo soy yo sensata? Isobel es la sensata y, sin embargo… -empezó a decir ella, pero no terminó la frase. Tenía la cara ladeada y lo miraba a través de las pestañas más largas que Nick había visto en su vida.

– ¿Qué?

– Nada.

– ¿Qué ibas a decir de Isobel?

– Sólo que se le fue la cabeza cuando conoció a Brian. Creo que tu hermano destapó a la Isobel insensata y que eso era lo que ella quería.

– Si has terminado de cenar, -dijo él, cortante- deberíamos marcharnos.

Mientras iban hacia su casa, Nick intentaba ser amable de nuevo. Era el primer viaje de Katie a Londres y parecía tan emocionada por todo lo que veía que era imposible no sentir simpatía. A pesar de eso, seguía poniendo a prueba su paciencia, sobre todo cuando le pidió que fuera más despacio para ver unos escaparates sin tener en cuenta el tráfico o cuando lo obligó a parar en medio de una calle porque había visto el modelo de sus sueños. Cuando Nick había conseguido encontrar aparcamiento y se dirigía hacia la tienda, ella salía de ella con una bolsa en la mano y los ojos brillantes.

Читать дальше
Тёмная тема

Шрифт:

Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «La fuerza del destino»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «La fuerza del destino» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё не прочитанные произведения.


Lynsey Stevens: Volver a tus Brazos
Volver a tus Brazos
Lynsey Stevens
Lisa Jackson: El Millonario
El Millonario
Lisa Jackson
Liz Fielding: Cena para Dos
Cena para Dos
Liz Fielding
Lucy Gordon: Aprendiendo a Amar
Aprendiendo a Amar
Lucy Gordon
Отзывы о книге «La fuerza del destino»

Обсуждение, отзывы о книге «La fuerza del destino» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.